¿Sueñas con una luna de miel perfecta? Punta Cana lo tiene todo: resorts de lujo, playas paradisíacas, aventuras en tirolina o cenotes escondidos. Despierta con vistas a una playa turquesa, disfruta de servicios exclusivos y vive una experiencia inolvidable en el rincón más glamuroso del Caribe.
Para los amantes de la cultura y la historia, Santo Domingo es una joya imperdible. Su mágica Ciudad Colonial, Patrimonio de la Humanidad, te transporta al pasado entre calles adoquinadas y monumentos icónicos. Al caer el sol, una cena romántica en la Plaza de España, con vistas al Alcázar, y una noche llena de bachata y ron dominicano.
Samaná es el refugio ideal para parejas en busca de romance y aventura: playas escondidas, el impresionante avistamiento de ballenas y la mágica Cascada El Limón.
La Romana combina exclusividad y naturaleza en un solo lugar. Relájate en las tranquilas playas de Bayahíbe, bucea entre coloridos arrecifes y explora el Parque Nacional Cotubanamá. Además, no te pierdas Altos de Chavón, un encantador rincón cultural lleno de magia.
El parque nacional Los Haitises, en la bahía de Samaná, está formado por singulares formaciones rocosas y está compuesto por un rico mosaico de ecosistemas marítimos y terrestres: estuarios, ensenadas, bahías, cayos y mogotes.
En el parque de Los Haitises también se pueden visitar un centenar de cuevas que albergan la mayor colección de pinturas rupestres de la República Dominicana, testimonio de las antiguas culturas precolombinas.
Jarabacoa es el paraíso de la aventura. Conocida como la "ciudad de la eterna primavera", disfruta de rafting en el río Yaque, senderismo al Pico Duarte y emocionantes vuelos en parapente.
Una luna de miel en República Dominicana es un festín de sabores. Disfruta del sancocho, sabrosos mariscos con tostones crujientes y culmina con el dulce majarete, un postre de maíz y leche de coco, ideal para compartir momentos mágicos.