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Baeza y Úbeda ocupan el centro geográfico de la provincia de Jaén y desde los miradores que rodean sus antiguas murallas medievales se divisa una de las vistas más bellas del norte andaluz. Mirando hacia el sur, se extiende un inmenso mar de olivos que desciende hasta las orillas del río Guadalquivir para trepar después hasta las cumbres violáceas de Sierra Mágina, un territorio enaltecido por la literatura, la leyenda y el embrujo.
© Francisco M. Martín
© Francisco M. MartínÚbeda posee el mayor catálogo patrimonial de edificios civiles del arte renacentista del XVI. Baeza, su hermana, es dueña de la nómina de monumentos religiosos más reconocidos de aquella época. La primera es animada, culta y comercial; la segunda, poética, universitaria y silenciosa. Úbeda posee una de las plazas mayores más bellas de Europa. Se rotula Vázquez de Molina, aunque todos los vecinos la conocen como plaza de Santa María. No es solo una plaza principal, es un gran catálogo de la mejor arquitectura renacentista del sur de España.
Baeza es una ciudad de ambiente juvenil, sede de la universidad internacional de andalucía
© Francisco M. MartínJunto a la capilla del Salvador, donde está enterrado Francisco de los Cobos, el todopoderoso secretario de Estado del emperador Carlos V, se alza el palacio del Deán Ortega, el primer parador-palacio que abrió sus puertas en nuestro país en 1930. El palacio Vázquez de Molina, actual sede del Ayuntamiento, se halla frente a la iglesia de Santa María de los Reales Alcázares, antigua mezquita aljama.
La sinagoga del agua es la última atracción monumental de la ciudad de úbeda
En Baeza, a solo ocho kilómetros de su ciudad hermana, la plaza de Santa María acoge la catedral de la Natividad y, frente a ella, el seminario de San Felipe Neri, unido al palacio gótico isabelino de Jabalquinto, sede de la Universidad Internacional de Andalucía. Esos dos epicentros monumentales son el punto de partida de otros tantos itinerarios que se despliegan por las calles, plazas y barrios medievales.
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© ©En los últimos años, las dos ciudades jienenses han multiplicado sus encantos. No solo de patrimonio y arte viven Úbeda y Baeza. La primera, una ciudad de un marcado carácter comercial, ha reformulado por completo las señas de identidad de su antigua artesanía. A espaldas del palacio Vázquez de Molina, en el arranque de la monumental calle Real, abre sus puertas Alfarería Tito. Las piezas de cerámica que salen de su horno árabe dejaron hace algunos años de ser aquellos platos, alcuzas y vasijas anclados en un añejo Barroco. Hoy la alfarería se ha adaptado a estos tiempos y fabrica modernos objetos de diseño respetando los procesos tradicionales. Lo mismo ocurre con el esparto. Algo tan vinculado al carácter agrario de la ciudad se ha convertido en un material sofisticado y dúctil que unido a la madera o la forja , ofrece objetos de vanguardia que se exhiben, por ejemplo, en Ubedíes Artesanía, también ubicada en la calle Real.
© Francisco M. MartínNo lejos de aquí, por cierto, abre sus puertas la sinagoga del Agua, una de las últimas grandes atracciones monumentales de la ciudad, antiguo templo judío oculto durante largo tiempo en cuyo mikveh, el baño de purificación, cada mes de junio se aguarda con emoción el solsticio del verano. En Baeza, junto a la plaza del Pópulo, cuya fuente está presidida por la estatua romana de Himilce, se descubren los soportales que rodean la plaza de la Constitución, corazón de la ciudad contemporánea. El poeta Antonio Machado vivió en una casa próxima y cerca de ella abre sus puertas La Casa del Aceite, una boutique gastronómica donde se venden algunos de los mejores AOVE (aceites de oliva virgen extra) del mundo. La mayor parte de las marcas son de la provincia de Jaén, pero también tienen hueco en sus estanterías para otros aceites andaluces y castellanomanchegos. Y ya que hemos despertado el gusanillo del estómago, nada mejor que tomar asiento a la hora de la merienda en la pastelería Virolo, al lado de la plaza del Pópulo, donde elaboran los famosos hojaldres baezanos, la quintaesencia de la repostería jienense.
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© JUAN PORTONESEl apunte experto
››¿Dónde están los cerros de Úbeda? Son una leyenda medieval, pero los guías turísticos acompañan a los visitantes a la Redonda de Miradores para disfrutar de una vista impagable de las lomas olivareras.
››En Úbeda murió el poeta místico san Juan de la Cruz. En su convento-museo, además de la celda donde falleció el autor del Cántico espiritual, se celebran conciertos en su bello patio medieval.
››La iglesia de San Lorenzo de Úbeda y el Hospital de Santiago son los dos grandes centros culturales de la ciudad. En la primera hay exposiciones, conciertos y presentaciones durante todo el año.
© Baltasar Lopez Cuadra
© Baltasar Lopez Cuadra/©››El instituto Santísima Trinidad de Baeza acoge el aula del poeta Antonio Machado del mismo modo que la dejó cuando impartió allí clases de francés entre 1912 y 1919.
››Santa Cruz es la advocación de la única iglesia tardorrománica de Andalucía . Está frente al palacio de Jabalquinto y en el interior destacan sus pinturas murales fechadas entre los siglos xiv y xv.
Guía de viaje
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© JUAN PORTONES
