Ordino en Andorra, Ericeira, Sortelha y Vila da Madalena en Portugal, Slunj en Croacia, La Carolina en Argentina, Siwa en Egipto… y así 54 localidades de todas las regiones del mundo, desde México a Japón, acaban de ser reconocidos con el sello Best Tourism Village por la Organización Mundial del Turismo (OMT). Tres son españolas: Cantavieja, Oñati y Sigüenza. Un galardón que reconoce a los pueblos líderes en el cuidado del espacio rural y la preservación de los paisajes, la diversidad cultural, los valores locales y las tradiciones culinarias.
Tres pueblos españoles entre los mejores del mundo y sabemos por qué
Los elegidos en esta tercera edición han sido seleccionados entre casi 260 candidaturas y se han dado a conocer durante la Asamblea General de la OMT, que se ha celebrado en Samarcanda, Uzbekistán. Como en años anteriores reconoció a otros pueblos españoles: Lekunberri (Navarra), en 2021, y Rupit (Barcelona), Alquézar (Huesca) y Guadalupe (Cáceres), en 2022. Los de 2023 tienen sus propios méritos y te damos una pista de la acertada elección:
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
CANTAVIEJA
Ya era uno de Los Pueblos más bonitos de España, ahora este pueblo de Teruel es uno de los mejores destinos del mundo, como acaba de reconocer la OMT. Para descubrir Cantavieja hay que situarse en la comarca del Maestrazgo, porque es en ella donde se sitúa, sobre un peñón calizo a 1300 metros de altitud, lo que le proporciona unas estupendas vistas desde sus miradores. Su entramado urbano es de época medieval y tiene como centro la plaza porticada, en la que se levanta la iglesia de la Asunción y el edificio del ayuntamiento. Caminando por sus calles se descubre un maravilloso patrimonio monumental y arquitectónico, fruto de una tremenda historia que no se corresponde con su tamaño y que le hizo ser testigo de batallas entre templarios, san juanistas y carlistas.
Entre los lugares a los que hay que prestar especial atención está el Museo de las Guerras Carlistas, ubicado en una casa del siglo XVII que acoge también la oficina de turismo, la Casa Zurita, otra de las construcciones solariegas de Cantavieja; la muralla aspillerada, desde la que se accede a un paseo circular que la rodea y el castillo levantado por la Orden del Temple, que acoge en su torreón una ermita.
OÑATI
En el Parque Natural de Aizkorri-Aratz se encuentra el segundo de los pueblos elegidos por la OMT como Best Tourism Village, reconocido así por su magnífico entorno de pastos y montañas esculpidas por las aguas de sus cañones y ríos, donde se encuentra la famosa cueva de Arrikrutz, unos de los pocos lugares europeos donde ha hallado el resto completo del esqueleto del león de las cavernas. Oñati es el pueblo más extenso de Guipúzcoa, con un casco histórico que es conjunto monumental y 16 barrios y en él se creó la primera Universidad del País Vasco. Y si hablamos de patrimonio cultural, no faltan tradiciones, actividades etnológicas y los sabores de la cocina local.
De pueblo en pueblo por el Goierri, la tierra del queso Idiazabal
Una vertiginosa carretera de montaña sube, entre acantilados, desde Oñati hasta el santuario de Aránzazu, uno de los tres templos más impresionantes de Guipúzcoa, junto a Loyola y La Antigua. Aquella ermita que la Virgen pidió que le construyeran cuando se apareció en 1468, con “tres tablillas y siete tejas”, es ahora un enorme complejo presidido por la basílica que diseñó Sáenz de Oiza a mediados del siglo XX, con unas curiosas torres cubiertas de pinchos (arantzazu, en vasco, significa lugar de espinos) y, curiosos también, los 14 apóstoles que esculpió Oteiza para el friso de la fachada. Muchos vienen aquí en peregrinación, siguiendo los pasos de San Ignacio de Loyola. Otros muchos, a hacer alguna de las numerosas rutas de montaña que parten del santuario, incluida la que asciende al Aitxuri (1551 metros), la cumbre más alta de Guipúzcoa y del País Vasco.
SIGÜENZA
La distinción concedida por la Organización Mundial del Turismo le llega a esta localidad de Guadalajara en un momento importante, pues se encuentra a las puertas de la celebración de su IX Centenario, y será otro impulso más para brillar en el mapa del turismo internacional. Sigüenza es un continuo disfrute de punta a punta, desde su castillo momumental en lo alto, hasta el jardín de la Alameda, lugar de paseo de los seguntinos. Tiene un bonito conjunto de callejuelas que aquí llaman travesañas, plazuelas con soportales, una catedral llena de obras de arte, iglesias románicas, arcos y soberbios edificios de piedra que gustan a los que van en busca de conjuntos medievales auténticos.
Pueblos de Guadalajara para salir corriendo en los próximos puentes
Además del callejeo, en Sigüenza hay que visitar las obras de rehabilitación de la iglesia de Santiago, donde se ubicará pronto el Centro de Interpretación del Románico, tomar un café en el castillo-Parador, comer un asado en alguno de sus restaurantes tradicionales o disfrutar de la cocina de autor en sus dos restaurantes con estrella Michelin, y, para bajar la comida, hHacer la excursión por el barranco del río Dulce, con una sucesión de gargantas, una bonita cascada y un panorámico mirador sobre las hoces.
De La Alcarria a la Sierra Norte, las mejores excursiones por Guadalajara