¿Hollywood sería igualmente Hollywood sin estas inmensas letras? Quién sabe, pero la realidad es que pese a lo que muchos piensan, este letrero no se instaló para servir a la industria del cine sino a la inmobiliaria, porque fue a finales de 1923 cuando en lo alto de Hollywood Hills comenzaron a brillar las enormes letras, iluminadas por miles de bombillas, para atraer a inversores en lo que sería un nuevo desarrollo inmobiliario en la ciudad. Y tampoco eran 9 como ahora, porque en un primer momento el cartel indicaba “Hollywoodland”, 13 letras de enormes dimensiones que cumplieron su cometido y mucho más. Se pensaron para permanecer allí 18 meses y van 100 años ¡y lo que les queda!
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
13,7 metros de alto y 106 de largo es lo que miden y lo cierto es que sin ellas la ciudad ya no sería la misma. En realidad el letrero que vemos hoy no es el de 1923, que con el paso del tiempo y las inclemencias meteorológicas se fue deteriorando, incluso el viento llegó a derribarlas. La ciudad decidió declararlo Monumento Histórico-Cultural de Los Ángeles en 1973 y en 1978 se organizó una campaña para recaudar fondos y reconstruirlo. La campaña llamada “Salvemos el letrero” fue liderada por unas cuantas celebridades de la época, entre ellas Hugh Hefner, editor de la revista Playboy, quien organizó una fiesta en la famosa Mansión para recaudar el dinero necesario. Las letras finalmente fueron restauradas.
Hoy se han convertido en una de las atracciones turísticas más visitadas por los viajeros y no solo como símbolo de la ciudad. El cartel de Hollywood forma parte de la historia del cine, cuando las compañías dejaron de mirar solo a la costa este y comenzaron a trasladar sus estudios a la oeste, viviendo una época dorada y haciendo del cartel el símbolo de una industria cinematográfica floreciente convertida en la meca de muchos soñadores aspirantes a estrellas del celuloide.
Pretty Woman, Blade Runner, La La Land… lo hemos visto en estas y en otras muchas películas y este año hemos querido vivir el glamour de Hollywood de cerca y celebrar sus 100 años visitándolas en persona. Os contamos cómo llegar hasta ellas y desde dónde contemplar su mejor perspectiva para animaros a una visita:
¿Cómo subir hasta el mítico cartel de Hollywood?
Sobre la colina del monte Lee, en el parque Griffith, cumplimos un sueño viajero: el de ver, por fin, esas letras que tantas veces habíamos visto brillar en la pequeña y la gran pantalla. Para llegar hasta ellas hay que dedicar, al menos, una mañana y emprender una agradable caminata (hollywoodsign.org).
Lo primero será acercarse en coche o taxi hasta la zona de Hoollywood Hills -en Los Ángeles las distancias son enormes y es imposible plantearse desplazamientos a pie-. Un barrio de increíbles mansiones (pueden costar la friolera de entre 5 y 8 millones de dólares) donde se encuentra el inicio de la ruta senderista. Acercando el coche lo más posible, alcanzar el famoso cartel nos llevará algo más de media hora (unos 3 kilómetros). Nos dejamos guiar por un sendero natural sencillo, aunque en ascenso, y con distintos tipos de plantas (algunas procedentes de España llevadas por los misioneros que seguían la ruta del Camino Real de California) que regala unas vistas únicas de Los Ángeles. No habrá que esperar mucho para verlo, porque pocas curvas después de empezar aparece ante nuestros ojos. Es casi imposible no sacar el móvil y ponerse a hacer fotos como un loco, o una loca, pero calma, a partir de ese momento su visión desde uno u otro lado te acompaña casi todo el resto del trayecto, con lo que habrá muchas y muy buenas oportunidades de fotografiarlo hasta llegar a la explanada más cercana a la que está permitido acercarse (The Last House on Mulholland). Una vez allí es fácil sentirse como una estrella -¡This is Hollywood!- y hacerse decenas de fotos hasta encontrar la perspectiva y pose perfectas.
Desde ahí, no se podrá avanzar más. Hemos dado con el punto más alto. Y es que desde 2011, por motivos de seguridad, no se puede llegar hasta la misma base de las letras. Y ¡ojo! que la zona está vigilada por cámaras y quienes lo hagan saldrán con una cuantiosa multa.
Otra opción, para quienes prefieran las rutas guiadas, es contratar a un guía que nos acompañará todo el camino. Empresas como Bikes and Hikes (bikesandhikesla.com) ofrecen estos tours a pie y otros, tanto caminando como en bici, por la ciudad de Los Ángeles o a conocer alguno de sus famosos barrios, como Beverly Hills.
También lee: Así son las ciudades más bonitas de los Estados Unidos
El cartel visto con perspectiva
Después del pequeño trekking y antes de abandonar la zona conviene pasar por Lake Hollywood Park, un agradable espacio verde dentro de Hollywood Hills, justo debajo y con magníficas vistas del cartel desde algo más lejos. Es un buen lugar para hacer un alto y reposar la experiencia, preparado con mesas para hacer un pícnic.
Como esto va de cine, si el cartel de Hollywood ha aparecido en unas cuantas películas, nuestro próximo destino no se queda atrás. El observatorio Griffith es otro de los símbolos de esta ciudad -que tiene unos cuantos-, que sirve de observatorio astronómico y planetario y que también hemos podido ver en películas como Rebelde sin causa o The Terminator, entre otras, y que atrae a tantos turistas como el propio cartel.
Situado en el parque Griffith, uno de los parques urbanos más grandes de Estados Unidos, es el mejor mirador a las enormes letras que se ven a lo lejos y ofrece una vista panorámica de excepción a toda la ciudad, incluso en los días claros puede verse hasta el océano. Si han quedado ganas de senderismo en el parque hay numerosas rutas señalizadas.
¿DÓNDE DORMIR EN LOS ÁNGELES?
La oferta hotelera en esta ciudad es tan amplia y variada como puedas imaginar, así que la elección dependerá de si quieres estar más o menos céntrico y de lo rumboso que esté el bolsillo, porque los precios pueden llegar a ser muy elevados.
Si hemos venido a ver el cartel de Hollywood elegimos un hotel desde el que, gracias a sus inmensos ventanales y si el tiempo lo permite, podemos apreciarlo a lo lejos desde la propia habitación. En el corazón de la ciudad, el hotel Moxy Downtown Los Ángeles (moxydtla.com) y junto a él el AC Hotel Downtown Los Ángeles (marriott.com) son los nuevos place to be, una de las aperturas hoteleras más esperadas de la temporada (abiertos desde abril de 2023).
También lee: De Londres a Los Ángeles: escapadas para copiar la ruta de la temporada 4 de la serie 'You'
Situados junto al mítico estadio Crypto Arena, sede de Los Ángeles Lakers, el Centro de Convecciones y el Museo de los Grammy, estos colosos de cristal de 37 pisos dominan el skyline con dos hoteles de diseño moderno (encargado al estudio Yabu Pushelberg, el mismo que hizo el The Edition London) pero cada uno con su propia personalidad y unidos entre sí por una planta: el nivel 8. Moxy es más urbano, irreverente y lúdico, con una decoración en su lobby de entrada inspirada en la película Easy Ryder (en el propio lobby veréis una motocicleta). AC Downtown -la cadena española gestionada por Marriot-, cuenta con un diseño más tradicional, sereno e inspirado en el loft de un artista.
Como viene ocurriendo en Europa, los hoteles no son solo sitios a los que los clientes van a dormir. También se viven experiencias como en Moxy, donde un DJ pone música tres veces en semana en su lobby. En AC Bar&Lounge se degusta gastronomía mediterránea en la planta 34 con magníficas vistas. En Level 8, además de gastronomía se disfruta de música en directo y actuaciones. Y en La Lo La Rooftop, también en el piso 34, de una extensa carta de cócteles, buen ambiente y unas tapas al estilo español, como en casa pero con vistas a Hollywood Hills. Y así hasta 12 espacios de restauración, difícil elección.
También lee: Diez paradas en la Ruta 66 que no debes pasar por alto
¿CÓMO LLEGAR A LOS ÁNGELES?
Los vuelos directos que conectan Barcelona con Los Ángeles de la compañía Level (flylevel.com) ofrecen una experiencia diferente, completamente personalizable y a precios muy razonables, algo que agradece el bolsillo de los viajeros que van a Estados Unidos. Una compañía de larga distancia y bajo coste que permite que cada pasajero elija desde antes de partir cómo quiere que sea su experiencia, “Fly your way” se llama (my.flylevel.com).
Antes de embarcar tendrás la opción de elegir el menú que vas a tomar, ¿apetece un pollo al curry con arroz, un poke bowl de salmón o una hamburguesa? Seguro que sí, ¡son 13 horas de vuelo! También los snaks, las bebidas, el wifi si se quiere estar conectado o el pack confort (que incluye manta, almohada, botella, auriculares, cepillo de dientes y pasta, antifaz y calcetines) y solo pagarás por lo que hayas elegido o nada si optas por llevar tu mismo lo necesario. La personalización se hace hasta 12 horas antes del vuelo y una vez dentro del avión solo hay que esperar a que te vayan trayendo lo que has solicitado.
Los que quieren un plus de comodidad para tantas horas de vuelo pueden optar por la clase Premium Economy, con asientos más cómodos, cabinas más silenciosa, embarque exclusivo y mayor flexibilidad. Que cada uno elija su vuelo que Hollywood nos espera.