El río de las aguas hermosas: cómo visitar el nacedero del Urederra

¿CÓMO LLEGAR AL NACEDERO DEL UREDERRA?

El río Urederra está situado a 61 kilómetros de Pamplona. Hay que llegar hasta Baquedano (en la imagen), donde está el área de acogida, se estacionan los coches y comienza la ruta a pie -perfectamente señalizada- hacia el nacedero por la reserva natural (un total de 6 kilómetros entre ida y vuelta). Para dejar el coche en este área hay que pagar una tasa y para acceder al nacedero hay que reservar en la web: urederra.amescoa.com. En el momento de la reserva se seleccionan el día y la franja horaria.

¿CUÁL ES LA MEJOR ÉPOCA PARA VISITARLO?

Cada época del año tiene sus particularidades. El verano es el mejor momento para disfrutar del color turquesa de sus aguas. El otoño que se aproxima, es la época ideal para los amantes de los colores que se producen en los hayedos. En primavera es cuando el río lleva más caudal de agua.

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¿CÓMO ES EL NACEDERO DEL UREDERRA?

Es la principal atracción del Parque Natural de Urbasa-Andía, tal vez uno de los paisajes más bellos de Navarra. En el fondo de un profundo anfiteatro rocoso y en medio de un bosque de hayas centenarias tiene su nacimiento este río. Un lugar único con una vegetación envolvente done el caudal brota de un importante acuífero subterráneo que va dejando a su paso una sucesión de cascadas, torrentes y pozas.

Caminando por el sendero regulado que parte de Baquedano, el sendero transcurre entre encinas y algunos robles. Al llegar a una bifurcación hay que tomar el camino de la izquierda que se interna en una senda por el interior de un sombrío hayedo.

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La primera vez que vemos el río se aprecia un bonito bosque de rivera donde las hayas se alternan con alisos. En las zonas donde se crean remansos de agua se aprecia perfectamente la intensa tonalidad azul turquesa de las aguas. Es u fenómeno óptico único en España y se debe a la pura de las aguas de este nacedero y a la blanquecina capa de carbonato cálcico que recubre los fondos del río. La combinación de ambas cosas hace que que la luz del sol rebote con mayor facilidad en el agua originando este intenso y sorprendente color.

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Por el sendero iremos viendo mirlos acuáticos y anfibios como el tritón o la rana bermeja. Después de recrearnos con la belleza del camino, una serie de impetuosas cascadas nos llevan al final de la zona visitable. Debido a la fragilidad del ecosistema se ha cerrado el tramo final del sendero para protegerlo de posibles daños por parte de los visitantes.

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CONSEJOS PARA LA VISITA

• Te en cuenta que el aforo se limita a 500 personas al día, por lo que es mejor coger la entrada con tiempo. En caso de no poder ir finalmente, es posible cancelar la entrada
• La ruta son 6 kilómetros ida y vuelta y el tiempo que se tarde dependerá de lo que nos entretengamos por el camino. La dificultad de la ruta es baja
• Hay que llevar ropa y calzados apropiados para el campo, aunque no hay dificultad estamos caminando en la naturaleza. La ruta se puede hacer con niños (no con carrito)
• Al reservar la entrada te marca la hora de acceso, la de salida es libre, por lo que se puede permanecer dentro el tiempo que se quiera y se puede llevar comida
• En el nacedero no está permitido el baño y hay que tratar de alterar lo menos posible el medio (no cojas plantas, frutos ni eches ningún tipo de basura)
• La ruta de vuelta es mejor realizarla por el camino alternativo que atraviesa un robledal
• No olvides la cámara de fotos, el paisaje es una sorpresa tras otra