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Málaga se mueve y la última prueba es el que está llamado a ser el nuevo referente de modernidad y lujo en la capital malagueña: el cinco estrellas en el que ha invertido el empresario y ex futbolista del FC Barcelona Gerard Piqué. Un hotel en una ubicación estratégica, la calle Victoria, junto a la plaza de la Merced y el conjunto monumental de la Alcazaba y, a su alrededor el Teatro Romano, el Museo Picasso o el Museo de Málaga. El nuevo ME, una de las marcas más icónicas y con mejor reconocimiento en el segmento de lujo de la cadena Meliá, combina arquitectura, diseño, arte y gastronomía y ofrecerá una experiencia auténtica conectada con la esencia de la ciudad. El diseño conceptual del hotel ha sido encargado a ASAH (Álvaro Sans Arquitectura Hotelera), inspirándose en otro hotel de la marca, el ME Milán, todo un referente de lujo urbano en Italia.
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© MeliáLa fachada del edificio se abre con numerosas ventanas y combina el color blanco con la piedra caliza de Málaga. En la planta baja, donde estará ubicado el restaurante principal y un gran salón de recepción, la transición entre los espacios se produce de forma progresiva, dando vida al entorno urbano y favoreciendo el contacto con la ciudad. En la primera planta, el hotel contará con un centro de convenciones y un gimnasio, mientras que en las cuatro siguientes se distribuyen las 128 habitaciones.
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La gran atracción del hotel de Piqué estará en el ático, en el que se ubicará una gran piscina infinity exterior climatizada con solárium, bar y un restaurante que, sin duda, aspira a convertirse en el mejor rooftop de la ciudad. Espacios que están llamado a ser el epicentro de la vida social y de la agenda cultural del hotel, recogiendo así la naturaleza de la marca ME by Meliá: un reflejo de las últimas tendencias y creaciones artísticas de la escena local.
© MeliáMálaga, la ciudad de los mil museos
Durante la construcción, la obra tuvo que paralizarse tras hallarse en el terreno numerosos enteramientos de la necrópolis medieval islámica de Yabal Faruh, que se extendía por toda la ladera de Gibralfaro, pero, una vez concluidas las prospecciones arqueológicas, se han retomado los trabajos y el proyecto, que en principio se había planteado como un hotel de 4 estrellas, se espera inaugurar a finales de 2024. La última muestra de todo lo que se mueve en la capital de la Costa del Sol.
