Por las pistas de Aspen, Whistler, Gstaad, St Moritz o Courchevel se deslizan esquiadores con nombre y apellidos muy sonoros. Es en esta última donde Elsa Pataky, junto a su pareja, Chris Hemsworth, sus hijos y unos amigos han disfrutado de unos días de diversión: «Qué vacaciones tan increíbles», dice la actriz en su cuenta de Instagram. Y es la misma en la que Alberto de Mónaco se ha dejado junto a su hijo Jacques durante el Campeonato Mundial de Esquí Alpino y esquían el Príncipe Guillermo y Kate Middleton.
Por sus kilómetros y kilómetros de pistas, sus paisajes, sus instalaciones, sus zonas temáticas o su ambiente aprés ski, Courchevel es una de las mejores estaciones de Europa. Se encuentra en el departamento francés de Saboya y forma parte de Les Trois Vallées, el dominio esquiable más grande del mundo, con más de 600 kilómetros de pistas de esquí conectadas entre sí, 2000 metros de desnivel y múltiples zonas temáticas.
Todo el lujo y el glamur que uno puede imaginar está en este lugar, famoso también por sus magníficos hoteles (la mayor parte de ellos a pie de pista), como el Grand Hôtel Courchevel, y sus restaurantes de lujo, por los que siempre han desfilado celebrities atraídas por la calidad de sus servicios y el ambiente cosmopolita que envuelve a toda la estación. Las grandes marcas –desde Valentino, pasando por Hermes, Dolce & Gabbana, Dior, Jena-Paul Gauthier, Fendi o Gucci están presentes en la estación para alegría de los fashionistas del mundo entero.
¿CÓMO LLEGAR A COURCHEVEL?
Un lugar tan exclusivo como el que han disfrutado Elsa Pataky y su marido no podía tener un acceso más cómodo para llegar a él que en avión o helicóptero, pues Courchevel cuenta con un altipuerto (aeropuerto en zona de montaña) y una pista de aterrizaje en su cota 1850 para los esquiadores que van a disfrutar de sus pistas y quieren llegar de la manera más fácil hasta la misma estación. Exclusividad, ante todo.
UNA ESTACIÓN Y SEIS PUEBLOS
En las alturas del valle de la Tarentaise, Courchevel lo forman 6 pueblos que se van descubriendo a lo largo de una sinuosa carretera entre bosques y panorámicas espectaculares. Todos ellos están unidos por remontes o lanzaderas gratuitas conformando una estación única ski-in/ski out. Saint-Bon es el pueblo original y donde comenzó en 1908 la historia de este lugar, cuando se construyó el primer hotel, el Lac Bleu. Courchevel Le Praz es el baluarte del salto del esquí y su bosque el refugio perfecto para los esquiadores. Courchevel La Tania, el pueblo más reciente de Les 3 Vallées, cuenta con la magnífica pista de Folyères que serpentea por un precioso bosque de abetos y gran ambiente familiar. También lo tiene Courchevel Village, con una pista para trineos que llega hasta el mismo pueblo y una zona acualúdica.
El paraíso para el momento después de esquiar es Courchevel Moriond, donde se pueden encontrar desde bistrós típicos de Saboya a ostrerías. Y Courchevel 1850 es el imprescindible para los amantes de la moda, la gastronomía, la fiesta y los atractivos nocturnos, entre ellos el restaurante Chabichou (chabichou-courchevel.com), con dos estrellas Michelin y toda una institución (en la imagen). Desde aquí se sube a la cima de Saulire, cumbre de la estación, a 2738 metros de altitud.
¿CUÁNTO CUESTA ESQUIAR EN COURCHEVEL?
Courchevel es una estación ideal para cualquier aficionado al esquí, independientemente del nivel, porque posee más de 180 pistas verdes-azules indicadas para principiantes o esquiadores con un nivel intermedio y más de 140 de rojas-negras que se sitúan por encima de los 1800 metros de altitud. También hay snowpark para los más pequeños. De todo ello se disfruta con un forfait único que tiene un precio de 72 €, 57,60 € para niños hasta 13 años (courchevel.com/en)
Y UN PLUS
Courchevel es la única estación invernal francesa en poseer seis construcciones inscritas como monumento histórico de Francia, cinco de ellas forman parte de las construcciones más destacables de la arquitectura del siglo XX en montaña, como el chalet Joliot-Curie o la capilla Nôtre-Dame de L’Assomption.