Dos abruptas hoces, la del Huécar y la del Júcar, marcan la orografía de Cuenca, una ciudad en continua renovación, decorada por arte abstracto y condimentada por la gastronomía manchega. A medio camino entre Madrid y Valencia, y su comunicación en tren de alta velocidad, la convierten en una escapada ideal para un día o para un fin de semana.
Sorpresas alrededor de la ciudad colgada de Cuenca (y no te las esperas)
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A su amplio abanico de atractivos se suma ahora la recién inaugurada Tirolina de Las Hoces (tirolinacuenca.com), un vertiginoso salto que atraviesa la hoz del Huécar, afluente del río Júcar, en un recorrido de 445 metros de distancia que salva un desnivel del 67% a una velocidad de unos 90 kilómetros por hora, siempre dependiendo del peso, altura y viento.
Se trata de una tirolina doble, lo que le añade una dosis extra de diversión, y más si tenemos en cuenta que es la más larga en una ciudad europea, superando a la de Toledo, que cuenta con 160 metros. Además de su característica de urbana, resulta imposible obviar la naturaleza que se extiende a sus pies. Para poder sobrevolarla hay que tener un peso de entre 40 y 120 kg. La venta de entradas se abrió a principios de enero en forma de tarjetas regalo que pueden adquirirse en la web por valor de 25 €.
El inicio, que es bastante pronunciado, da comienzo en el aparcamiento del Castillo, en el barrio donde se ubicaba la fortificación que dio origen a la villa y de la que aún quedan restos de la muralla almorávide. Desde ellos, la calle Trabuco despliega un casco histórico único reconocido como Patrimonio de la Humanidad en 1996.
Sobre un farallón de roca caliza se aferran los edificios que siluetean Cuenca desafiando la ley de la gravedad. Entre ellos destacan las emblemáticas Casas Colgadas o la catedral, con una minuciosa portada cuyo tamaño, no muy grande, hace que resulte difícil intuir la magnitud que aguarda en el interior.
Por otro lado, los Rascacielos de San Martín sobresalen con sus 12 plantas en la parte más alta y cuatro en la más baja. Las torres, también denominadas «casas hondas», se construyeron con un entramado de madera de 40 metros de altura, destacando como las viviendas más altas de construcción tradicional en Europa hasta el siglo XIX.
Contemplarlos a vista de pájaro desde el cable, que asciende a los 120 metros de altura en su punto más elevado, obsequiará con las mejores panorámicas de una ciudad inexpugnable, cuya fortificación natural presume de ser el mayor territorio forestal urbano de Europa. La naturaleza contrasta con la arquitectura del macizo calizo, bajo el que fluyen sus ríos horadando profundos valles.
En los 30 segundos del emocionante recorrido nos habremos plantado en la senda de la Cueva de la Zarza, una de las muchas que se pierden por las hoces. Por debajo se sitúa el Parador, ocupando el antiguo convento de San Pablo, del año 1523. Su vieja iglesia acoge el Espacio Torner, con 40 obras del artista. Un lugar especial donde dialogar con el arte jugando entre contrastes visuales, cromáticos y lumínicos.
MUSEOS Y MÁS MUSEOS
El puente rojo de San Pablo, construido en hierro a principios del siglo XX siguiendo la corriente de Eiffel, conduce de nuevo al casco histórico, donde el arte continúa repartiéndose por su patrimonio. Es el caso de la Fundación Antonio Pérez, que alberga el antiguo convento de las Carmelitas Descalzas, o de la colección Roberto Polo CORPO, expuesta en otra iglesia desacralizada, la de Santa Cruz, y formada por obras de Josef Hoffmann, Paul Joostens, Henry van de Velde o Picasso.
Un viaje artístico por los lugares de Picasso en el año de su aniversario
En el interior de una de las tres Casas Colgadas que quedan de las ocho que hubo históricamente, se encuentra el Museo de Arte Abstracto. Creado en 1966 gracias a la colección que el pintor filipino Fernando Zóbel puso a disposición del público influenciado por Gustavo Torner, fue una auténtica revolución y todo un referente para artistas nacionales e internacionales, impulsando la modernización imparable de Cuenca.
En la ciudad española con más museos por habitante, la oferta museística se completa con el Museo de las Ciencias de Castilla- La Mancha y el MUPA, el Museo Paleontológico (en la imagen).
CAPITAL ESPAÑOLA DE LA GASTRONOMÍA 2023
El reciente nombramiento de Cuenca como Capital Española de la Gastronomía en este 2023 es otro de los motivos poderosos para redescubrir la localidad y sus recetas manchegas más tradicionales maridadas con la cocina de vanguardia. Vecinos del Museo de Arte Abstracto, en las conocidas originalmente como «casas voladas», son los restaurantes Casas Colgadas (restaurantecasascolgadas.com), con la cocina kilómetro 0 como seña de identidad, y La Casa de la Sirena (restaurantecasadelasirena.com), con un menú basado en la esencia conquense.
Una ruta por Cuenca, de los mejores restaurantes al arte de vanguardia
A los fogones de ambas propuestas culinarias está el chef con estrella Michelin Jesús Segura, para terminar de revolucionar esta ciudad que vive colgada de la naturaleza manchega más vertiginosa y extraordinaria.