Los pueblos mágicos más bonitos de México

CHOLULA, PUEBLA 

En el estado de Puebla y a dos horas de Ciudad de México, Cholula es un pintoresco pueblo mágico repleto de templos, posee nada menos que 37, algo sorprendente para una ciudad de su tamaño). Y es uno de ellos el que le regala su imagen más icónica, el santuario de los Remedios, que domina con sus cúpulas cubiertas de azulejos el paisaje desde lo más alto de lo que fue la gran pirámide prehispánica de Tlachihualtépetl, y, a sus espaldas, el volcán Popocatépetl. A pocos metros del santuario se encuentra otro símbolo arquitectónico de Olula: el conjunto conventual franciscano de San Gabriel, uno de los más antiguos de América. 

No te pierdas: 

• La fachada con piezas de Talavera del templo de San Francisco Acatepec 
• Conocer las plazas principales tanto de San Pedro como San Andrés, los pueblos hermanos 
• El Museo Regional de Cholula y su tesoro: el lienzo Quauhquechollan, declarado por la Unesco Patrimonio Mundial 

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BACALAR, QUINTANA ROO 

Fundado por los mayas, Bacalar es un pueblo mágico muy cerca de Chetumal, la capital del estado de Quintana Roo, y también una bonita laguna de siete tonos de azul que ofrece el espacio ideal para bucear, nadar y hacer snorkel. También es la puerta de entrada a las cavernas subacuáticas del Cenote Azul y a interesantes zonas arqueológicas mayas cubiertas por la selva, como Chacchoben. 

No te pierdas: 

• El Fuerte de San Felipe, con una de las mejores vistas de toda la laguna 
• El Cenote Azul, con más de 300 metros de diámetro y 90 metros de profundidad 
• Las estructuras minerales conocidas como estromatolitos en la laguna de Bacalar 
• Los pueblos mayas de Buenavista y Limones 

ORIZABA, VERACRUZ 

El espectacular y nevado por el espectacular Pico de Orizaba vigila este pueblo mágico enclavado en las montañas de la zona central de Veracruz, cuyo nombre significa «el lugar de las aguas alegres». Fue una importante ciudad virreinal, la más culta del país y de la que guarda un rico patrimonio arquitectónico, con construcciones coloniales y el Palacio de Hierro, diseñado por Gustave Eiffel, el único castillo art nouveau fabricado en metal en el mundo. 

No te pierdas: 

• Subir al teleférico de Orizaba, el tercero más largo de México 
• Tomarte una rubia en el Museo de la Cerveza ubicado en el Palacio de Hierro 
• Refrescarse con una picardía orizabeña 

VALLE DE BRAVO, MÉXICO 

Sorprende nada más poner un pie en este municipio cerca de Ciudad de México sus calles empedradas, sus casas tradicionales de adobe con tejas rojas, sus tiendas de artesanía, los puestos callejeros y las puertas o entradas de los locales con sus nombres grabados en madera. Para despertar el lado más aventurero, nada como volar en parapente o disfruta de deportes acuáticos en la presa Miguel Alemán. 

No te pierdas:   

• La cascada del Parque ecológico Velo de Novia 
• El santuario de la mariposa monarca 
• El bonito barrio de Santa María Ahuacatlán, con el Cristo Negro en la capilla de Santa María  
• La Grand Stupa de la Paz de los monjes del Tíbet 

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SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS

Rodeado de montañas, este bullicioso municipio del estado de Chiapas es un bello muestrario de riqueza cultural. Primero, por sus numerosas construcciones coloniales –fue fundado en 1528 con el curioso nombre de «Ciudad Real de los españoles», pero también por la vida de sus comunidades tzotziles y tzeltales que hacen de él una urbe muy animada y cosmopolita. Cualquier paseo debe recorrer el Andador Eclesiástico y el Andador Real de Guadalupe, sus dos principales vías peatonales y visitar los monumentos y museos que abren sus puertas entre el templo de Santo Domingo de Guzmán y el del Carmen. 

No te pierdas: 

• Probar una tortilla hecha a mano recién salida del comal, un pox –una de las bebidas tradicionales mayas más antiguas de México– y un café en Carajillo Café 
• Comprarte un chal bordado por las mujeres de Zinacatán 
• Hacer viajes cortos a Amatenango del Valle y San Juan Chamula 

BERNAL, QUERÉTARO 

Se camine por donde se camine, en este pueblo mágico mexicano del estado de Querétaro siempre está presente la Peña, que es como se conoce a su monolito, el tercero más grande del mundo después del Peñón de Gibraltar y el Pan de Azúcar de Brasil. Los más atrevidos se lanzan a escalarlo, aunque no hace falta ser un atleta para adentrarse en sus cuevas. Dicen que otorga vitalidad a los que viven cerca de él. Entre casonas construidas en el siglo XVII destacan sus principales lugares de interés: el castillo de tipo virreinal y las capillas de las Animitas y de Santa Cruz. 

No te pierdas: 

• Ver amanecer en la Peña y conocer la cueva de la Calavera 
• Hacer un tour y una cata en Vinos Azteca. 
• Probar los antojitos locales y los dulces Bernal. 

HUASCA DE OCAMPO, HIDALGO 

Un magnífico paisaje de montaña rodea este pueblo mágico del estado de Hidalgo en el que todavía resuena la bonanza de viejos tiempos, cuando Pedro Romero de Terreros, Conde de Regla, edificó varias haciendas de beneficio que lo convirtieron en el hombre más rico de su época. De aquello hoy quedan las ruinas que relatan el duro trabajo de antaño, ahora escenarios con bosques y barrancas, donde prismas basálticos, cascadas, presas y duendes reclaman la atención de los visitantes. 

No te pierdas: 

• Los prismas basálticos, uno de los tres prismas que hay en el mundo, junto con el de Hawái (bajo el agua) y el de la Calzada del Gigante de Irlanda del Norte 
• La Hacienda de Santa María Regla o San Miguel 
• Lanzarte en la tirolina de la barranca Peña del Aire 

IZAMAL, YUCATAN 

A 65 kilómetros de Mérida se encuentra Izamal, la conocida como la ciudad de los cerros por sus importantes restos arqueológicos, entre los que destacan 5 pirámides mayas. Esta ciudad en tonos ocre y blanco cuenta con una animada vida que invita a recorrer sus calles a pie, bicicleta o calesa. Obligado resulta visitar el convento de San Antonio de Padua –que cuenta con el atrio cerrado más grande de América– y el Centro Cultural y Artesanal, además de sus pirámides. 

No te pierdas: 

• San Antonio de Padua, ahora es el centro mariano más importante para los católicos yucatecos 
• La pirámide Kinich Kakmó, la tercera más grande de México 
• Las casonas coloniales

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TEQUILA, JALISCO 

El pueblo que da nombre a la bebida distintiva de México se levanta en las faldas del volcán de Tequila y el cañón del Río Grande, entre paisajes de cultivos de agave –en la lista de la Unesco–, antiguas haciendas y destilerías donde se fabrica la famosa bebida. Chichimecas, otomíes, toltecas y nahuatlacas ya degustaban los juegos de la planta azul antes de que en 1530 llegaron los españoles. La primera destilería se establece en 1600, pero no será hasta finales del XVIII cuando surja como industria. Tequila también guarda celosamente algunas de sus más antiguas tradiciones, como la típica bendición de las nueve de la noche. Y lugares como la cascada Los Azules, escondida entre cafetales, mango y platanares, 

No te pierdas: 

• Visitar alguna de las fábricas de tequila como José Cuervo, Casa Sauza, La Fortaleza, Auténtica Tequilera, Orendain o La Cofradía (en este último además se puede dormir, porque es hotel)  
• El Museo del Tequila ofrece una completa exposición sobre la historia y técnica de elaboración de la famosa bebida 
• Los Voladores de Papantla, una ceremonia ancestral declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad 

PATZCUARO, MICHOACÁN 

Las tradiciones purépechas conviven con la vida moderna en este pueblo mágico del estado de Michoacán fundado por el abulense Vasco de Quiroga para ser el centro político y religioso de la región. Él erigió la basílica de Nuestra Señora de la Salud y fundó la primera universidad de México, el Colegio de San Nicolás, hoy Museo de Artes e Industrias Populares. Y a él está dedicada la plaza principal de Patzcuaro, una de las más bellas del país. La arquitectura tradicional de su centro histórico –con casas de adobe y teja, calles empedradas e iglesias de estilo barroco y neoclásico–, su lago y y el sabor de sus platillos tradicionales resumen su esencia. 

No te pierdas: 

• Basílica de Nuestra Señora de la Salud 
• Los murales de la biblioteca Gertrudis Bocanegra 
• El colegio Josefino y el templo del Sagrario 

TEPOZTLANT, MORELOS 

Bajo el resguardo del cerro del Tepozteco y con una historia que atrae por su mística y su energía, la primera visita en este pueblo mágico del estado de Morelos no puede ser outra que las ruinas arqueológicas situadas en la cima del mismo. En este lugar de culto desde épocas prehispánicas se veneraba la imagen de Ometochtli Tepoztécatl, dios menor del pulque, también asociado a la luna y a la fertilidad vegetal, y en la actualidad aún se realizan ceremonias de purificación. Para descubrir también, uno de los mejores ejemplos de arquitectura religiosa de la Nueva España y su mercado de artesanías. 

No te pierdas: 

• El antiguo convento de la Natividad y su museo. 
• Ver las artesanías de los puestos en el centro del pueblo. 
• Visitar el Museo Carlos Pellicer.