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Apenas se puede apreciar, pero el paraje de la Flecha del río Piedras, en la desembocadura de este río, cambia a una velocidad de vértigo. Los 40 centímetros que crece cada año —sin duda, un ritmo trepidante para un crecimiento dunar— resultan una amenaza para el acceso de los barcos al puerto de El Terrón, en Lepe.
En este ecosistema que se forma frente al litoral se suceden playas de arena dorada a lo largo de la desembocadura del río y otras, a las que se accede atravesando las dunas por pasarelas de madera, frente al Atlántico. Kilómetros y kilómetros de arena dorada tiene la de Nueva Umbría lo que garantiza la privacidad y el aislamiento de los bañistas. En pocos lugares de España podemos tumbarnos al sol en una playa fluvial o en una junto en el mar separadas tan solo unos metros de distancia.
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Para cruzar a la zona de la flecha y la playa de Nueva Umbría es necesario hacerlo en ferris que parten desde el puerto de El Rompido transportando a los pasajeros, con varias frecuencias diarias (flechamar.es). Para una experiencia más exclusiva mejor alquilar una embarcación privada (desde 70 € / 2 horas, sin necesidad de tener titulación, laflechadelrompido.com) y además de navegar por la desembocadura del río es posible ir deteniéndose en las playas y darse un chapuzón. Para los que quieran practicar deportes acuáticos esta desembocadura es el lugar indicado, gracias a sus aguas tranquilas. Kayak, motos de agua, paddle surf… son actividades que pueden realizarse con empresas como flechaextreme.com o laflechadelrompido.com, guiadas o simplemente alquilando el material.
© Age FotostockLa subida de la marea provoca la creación de lagunas naturales formando el Paraje Natural de las Marismas del Río Piedras y la Flecha del Rompido, un espacio de especial protección por sus valores naturales y su biodiversidad. Aves como la cigüeña blanca, el aguilucho lagunero, el zampullín chico, el pato colorado o la garcilla bueyera encuentra aquí su hábitat. Una manera divertida de recorrerlo es alquilar un segway (civitatis.com) y hacer una ruta guiada por expertos que te descubrirán los rincones más bellos.
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MUY PRÁCTICO
Acceso y aparcamiento
Viniendo por la autovía A-49 hay que tomar la salida hacia Cartaya. De ahí hay que dirigirse hacia el pueblo marinero de El Rompido, donde habrá que dejar el coche en el puerto.
La mejor manera de llegar a las playas de La Flecha es en barco, desde el puerto de El Rompido parten los ferris que cruzan frente al pueblo -tardan entre 5 y 10 minutos máximo- o se alquilan las embarcaciones privadas. Para ir de una playa a otra solo hay que caminar; tendrán que cruzar la zona dunar los que quieran relajarse en la inmensa playa de Nueva Umbría, frente al océano.
© Age FotostockTambién se puede acceder desde la localidad de La Antilla, caminando.
Longitud
14 kilómetros de playa virgen y aislada la de Nueva Umbría. El resto de playas que se forman a lo largo de la Flecha son arenales mucho más pequeños.
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Características
Arena fina y dorada, playa salvaje, sin servicios y un grado de ocupación muy bajo la de Nueva Umbría por lo que es una playa muy tranquila. Esta baja ocupación hace que sea elegida por nudistas, aunque sus muchos kilómetros harán difícil encontrarse con alguien.
Al ser una zona protegida no tiene servicios, no se permite la instalación de chiringuitos o bares con lo que una vez que se cruza a ella habrá que llevar todo lo necesario para pasar la jornada. Sombrillas, crema de protección, comida, bebida… y gracias a sus aguas transparentes es buena idea llevar unas gafas de buceo y el tubo porque es fácil ver peces cerca de la orilla.
Actividades
A lo largo de la desembocadura del río, en la cara interior de La Flecha, es fácil ver todo tipo de embarcaciones de recreo, tablas de paddel surf, kayaks o motos de agua. En el entorno pueden practicarse otros deportes como rutas en bicicleta, segway o rutas a caballo.
© E.P.EN EL ENTORNO
El Rompido
Un pueblo marinero de casas blancas y esencia andaluza. Su estampa más característica la ofrecen sus dos faros, actualmente solo uno en funcionamiento. Hay que sentarse a la mesa de alguno de sus restaurantes a degustar unas gambas de Huelva. La Brasa de Horizontal (elrompidohorizontal.wixsite.com/labrasadehorizontal) o en la marisquería Doña Gamba (doñagamba.es) son buenas opciones.
© Age FotostockMarismas del Odiel
En Calatilla está el centro de visitantes del Paraje Natural (visitamarismasdelodiel.blogspot.com), el segundo humedal más importante del litoral andaluz donde habitan más de 300 especies de aves.
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© Age FotostockDe La Antilla a Ayamonte
A partir de la pequeña barriada marinera de La Antilla comienza un sector playero embellecido con pinares, dunas regeneradas y merenderos. En Isla Cristina hay que acudir al puerto, a partir de las cuatro de la tarde, cuando regresan los pesqueros y visitar su lonja. Tras las salinas y el molino de marea se llega a Ayamonte. Visitar la Casa Central, las iglesias de las Angustias y San Francisco y, en el casco antiguo, la parroquia del Salvador.
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