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Hay muchas formas de descubrir Ávila, rodear su imponente y bien conservada muralla, hacer un recorrido por sus palacios renacentistas o sus iglesias románicas, seguir las huellas de Santa Teresa en su ciudad natal... Aunque todas son apetecibles, la de apuntarse a una ruta de tapas es casi una obligación en la ciudad. Como además aquí las tapas van incluidas en el precio y además se eligen a la carta, todo el mundo se deja caer en la tentación.
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En busca de especialidades, las patatas revolconas son un básico en los bares capitalinos, tanto como el chuletón de raza avileña y las judías de El Barco de Ávila en la carta de los restaurantes, así que más novedoso será ir en busca de esas otras creaciones con las que los chefs locales se desmarcan. Por ejemplo, las que acaban de ser elegidas ganadoras de Ávila en tapas, el concurso que cada año, y van 21, distingue las mejores elaboraciones de la cocina en miniatura.
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Nueve son las puertas que tiene la Muralla de esta ciudad Patrimonio de la Humanidad en sus 2,5 kilómetros de perímetro. Por la de San Vicente, frente a la basílica que le da nombre y los jardines, se accede a la calle López Núñez, adornada de palacios levantados en el siglo XVI: el de los Sofraga, el de los Verdugo, el de los Águila, el de Monjaraz. Frente al primero se encuentra la Taberna de los Verdugo (tabernadelosverdugo.com), primera parada de esta ruta para degustar el canelón de avileño, que un jurado profesional ha elegido en una cata a ciegas mejor tapa 2022 entre las 12 finalistas.
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Si se quieren probar las propuestas que han quedado en segundo y tercer puesto hay que salir extramuros. En la zona sur, muy cerca de la Avenida Juan Pablo II, está el Café Teatro La Oca (laocacocktailbar.es), referente del tapeo y de la coctelería, que ha triunfado con su tapa Ostras!! Sal y Tequila, galardonada también con el premio a la Innovación.
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En la zona norte, en el polígono industrial de Las Hervencias, se descubre el restaurante El Comienzo, cuya tapa Chubasquero de Santa Teresa es toda una sorpresa desde su mismo nombre, tercer premio en el concurso.
De vuelta al centro histórico, la calle San Segundo, que une San Vicente con la plaza de Santa Teresa, siempre es una buena elección para tapear, por ejemplo, en el restaurante Casa de Postas (casadepostas.com), cuya Alboca ha obtenido el galardón a la mejor tapa en la categoría 'Sin barreras'. Un mini cono de lámina de remolacha relleno con una mousse que está llamado a ser la especialidad más solicitada entre sus propuestas gastronómicas.
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En la misma calle San Segundo, frente a la puerta de la muralla que da acceso a la plaza de la Catedral y la Casa de las Carnicerías, que acoge la oficina de turismo y es punto de inicio de la ruta por el adarve, otra parada para degustar la nueva creación de Alvalacán-Puerta del Alcázar. En este caso, Italia 4 México 1, que es como ha llamado a la tapa que ha logrado el premio ‘Otras tierras’, y que consiste en una focaccia y cochinita pibil con carne de cerdo, cebolla, chalota, soja y aceite de sésamo.
Muy cerca queda la plaza de Nalvillos, la misma en la que se levanta el Museo de Ávila, ocupando otro de los bonitos palacios de la ciudad, y su anexo, la iglesia románica de Santo Tomé el Viejo. Justo enfrente abre sus puertas La Tere (lateregastrobar.com), el gastrobar por el que pasar para probar su cocina fusión mediterránea y desvelar el secreto de la mejor tapa ‘De nuestra tierra’, de inspiración teresiana, bautizada como El fraile y la Santa. Tras este sugerente nombre, una croqueta de rabo de toro sobre salsa de pimiento del piquillo, salsa chile y yema de Ávila. ¡Toda una sensación!
Las yemas de Ávila son el dulce más afamado de la ciudad, ¿quieres apuntarte a un taller para aprender a elaborarlas?
Al día o cuando se vuelva a Ávila, la ruta puede continuar en busca de esas otras tapas finalistas de las 33 presentadas al concurso: la hamburguesa de cochinita pibil de The Happenny Bridge Irish Pub (irishpubavila.com), el taco del convento de El Convento (restauranteelconvento.es), el crêpe relleno de El Lienzo (en el Palacio de Congresos) o las diferentes versiones de carrilleras elaboradas por La Vaquería (restaurante del complejo rural Naturávila), Sofraga Palacio (bwpremiersofragapalacio.com) o Dvinos. La boca se hace agua.