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Portugal guarda rincones que son desconocidos por muchos. Lejos del estrés y de los horarios, están las residencias del grupo Octant Hotels: Octant Douro y Octant Vila Monte.
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Situado junto al río Duero, Octant Douro está construido en las laderas de Castelo de Paiva. El interior se une con el exterior a través de sus cristaleras orientadas al Duero, realzando la conexión con el paisaje.
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Las suites respiran vanguardia, e incluso podemos disfrutar de algunas con piscina privada.
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El complejo es una puerta abierta a la gastronomía local, con experiencias como la cena Be My Guest. Además, aquí tienen una de las mejores selecciones de vino de Oporto del país, así como una carta de vinos del Duero que no ofrecen en ningún otro lugar.
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Visitas a las Pasarelas del Paiva (Patrimonio Nacional de la UNESCO), viajes en barco a la Ilha dos Amores o un chapuzón en las piscinas fluviales, son algunas de las experiencias a disfrutar en la zona.
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Octant Vila Monte, situado en el Algarve y con esencia Farm House, es el punto de encuentro entre la montaña y el mar.
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Este hotel cuenta con Villa Indigo, una villa privada de 1000 metros cuadrados y dos restaurantes de primera clase. Asimismo, los huéspedes también pueden hacer uso de los servicios 24 horas, dos piscinas exteriores climatizadas, jardines…
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Todas sus suites y habitaciones son un reflejo de la riqueza arquitectónica propia del Algarve, al mismo tiempo que incluyen piezas de artesanía local.
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Para los que no conciben un verano sin mar, cerca del hotel se ofrecen actividades como visitas a la isla de Fuzeta en barco o expediciones en vela. Y para aprender de la tierra y de la cultura de la zona, el maestro alfarero Francisco Eugénio ofrece clases magistrales de cerámica.