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La provincia de Alicante aúna todo lo que deseamos en verano: mar, sol y arena. Alicante tiene 200 kilómetros de costa por descubrir, con arenales finos de aguas cristalinas y calas rocosas color canela.
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El Hotel Montíboli se corona como la joya del Mediterráneo y el primer cinco estrellas de Alicante, con una ubicación privilegiada.
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Su entorno hace del hotel la mejor elección para disfrutar de las vacaciones. Anclado en un acantilado entre dos playas, ofrece magníficas vistas desde todas las habitaciones.
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Una de las ventajas del alojamiento es que cuenta con acceso directo a dos de las playas más bonitas de Alicante: La Caleta y L’Esparrelló, calas salvajes situadas a un paso del alojamiento.
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La oferta culinaria del Hotel Montíboli juega un papel fundamental y se convierte en una experiencia para los cinco sentidos. Menús elaborados con comida local donde el producto se convierte en el protagonista gracias a su frescura y proximidad.
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Las instalaciones de este hotel están hechas para soñar, sobre todo sus piscinas, una parada obligatoria durante la temporada estival para hacer frente al calor.
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Disfruta del agua y las vistas en la piscina del acantilado con solárium sobre el mar, será tu favorita. Si buscas tranquilidad, la piscina con chorros, camas y bañeras de hidromasaje del spa es para ti. Y si buscas intimidad, la piscina de la Torre Paradís es la más romántica.
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La amabilidad y calidad de este complejo turístico harán de tu estancia una experiencia inolvidable. El Mediterráneo en estado puro: mar, playas, pinadas y acantilados, en definitiva, lo mejor del verano.