cantabria© JUAN CARLOS MUNOZ/Alamy Stock Photo

Valle del Asón (Cantabria): cascadas de vértigo y cuevas rupestres

Un recorrido en coche siguiendo al río Asón desde su nacimiento, un imponente salto vertical de 70 metros de altura, hasta su desembocadura en la bahía de Santoña. En este viaje de la montaña al mar nos detendremos aquí y allá para ver miradores espectaculares, santuarios, casonas de indianos y cuevas con valiosos conjuntos rupestres que enriquecen este desconocido valle de naturaleza en estado puro


24 de enero de 2022 - 19:36 CET

Desde el mirador del nacimiento del Asón, un espacio ganado a la sinuosa carretera CA-265, se tiene la mejor fotografía de la joya del Parque Natural Collados del Asón, la cascada más alta de Cantabria, por la que el río se precipita con toda su fuerza. Cailagua, la llaman las gentes del lugar, y tiene su sentido. Dicen que aquí nace el arcoíris, porque al desplomarse de manera estrepitosa desde los farallones calizos forma una cola de caballo que le saca los colores. Con distancia se disfruta del espectáculo natural, pero para sentirlo hay que hacer la ruta senderista que llega a los pies de la cascada. De este y de otros recorridos por el parque natural informan en el centro de interpretación, como el que acerca al nacimiento del río Gándara, el principal afluente del Asón, que hace su aparición de un modo más humilde. Para ver las aguas en sus primeros pasos nos asomaremos al mirador de las cascadas, que, a 300 metros de altura, vuela sobre el espectacular paisaje de montañas y prados de un verde intenso del valle de Soba.

Para ti que te gusta

Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte

Navega de forma ilimitada con nuestra oferta

1 año por 49€ 9,80€

Este contenido es solo para suscriptores.

Celebramoscon un 80% de descuento.

Suscríbete 1 año por 49€ 9,80€

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

© JUAN CARLOS MUNOZ/Alamy Stock Photo

Un sendero que arranca en la minúscula aldea de Asón y discurre por un bonito bosque de ribera, también con encinas, hayas, castaños y helechos, llega hasta los pies de la cascada. Ver cómo el agua se pulveriza mientras cae a 70 metros de altura de la pared calcárea es una imagen que impresiona también desde la distancia.

Montañas como Peña de la Busta, Picón Blanco y, sobre todo, la gran pirámide del Pico San Vicente escoltan por la izquierda la carretera que lleva a la cueva de Covalanas, Patrimonio de la Unesco, un valioso conjunto rupestre que se remonta 20.000-25.000 años atrás.

En Cantabria hay más de 6.000 cavidades y la que queda más próxima es la de Cullalvera, en pleno casco urbano de Ramales, que sorprende por su imponente boca. Si desde aquí tomamos la ca-261 que sale a la izquierda, alcanzaremos los pueblos de Valle y Riva y después a Arredondo. Todos ellos con gran número de palacios, casonas y casas de indianos.

© Custom

Ampuero, la capital del bajo Asón, tiene algunos lugares de interés, como sus casas con galerías acristaladas, otras indianas y la iglesia de Santa María, en la imagen.

Regresamos a Ramales para continuar hacia Rasines y caminar por el bonito sendero del Parque Paleolítico de la Cueva del Valle. Entre sus rocas calizas manan las aguas del río Silencio y descubrimos un mamut, en realidad la reproducción de uno de estos animales prehistóricos que merodeaban hace miles de años por esta cueva habitada hace al menos 15 milenios.

Siguiendo el discurrir del río llegamos a Ampuero para visitar el santuario de la Bien Aparecida, patrona de Cantabria, y, de paso, deleitarnos con la panorámica del valle.

© JUAN CARLOS MUNOZ/Alamy Stock Photo

El Asón se aproxima al mar y antes de desembocar se convierte en una ría, la de Limpias, en cuya orilla descansa la villa marinera que le da nombre. A su larga historia marítima, gracias al puerto del Ribero, y a la milagrosa imagen del Santo Cristo de la Agonía, que encontramos en la iglesia de San Pedro, se suma el bello paisaje de marisma en el que está enclavada. Un buen observatorio para contemplar a las aves que merodean por este espacio que forma parte de la Reserva Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel. La ría de Treto toma el testigo y lleva las aguas del Asón hasta la bahía de Santoña, dejando a un lado la playa de La Salvé de Laredo y, enfrente, el monte Buciero. Dos buenas pistas para alargar la escapada más allá.

© Gonzalo Azumendi

La cueva de Cullalvera sorprende por su imponente boca. Abrigados y caminando por la pasarela que recorre el interior veremos estalactitas, banderas y otras formaciones geológicas, pero no estalagmitas, pues esta gran cavidad es como una surgencia, por donde se canalizan las aguas del entorno.

No dejes de...

Descender en canoa por el río Asón. Una actividad divertida y emocionante para disfrutar del agua y del entorno natural del valle desde otra perspectiva. Hay tramos adaptados a todos los niveles, unos más tranquilos y otros con rápidos y saltos para momentos de adrenalina. Empresas de turismo activo ofrecen estos descensos (a partir de 25 €) desde Udalla, Ampuero o Cubillas, como Canoasón (canoason.es), Alto Asón (altoasonaventura.com) o Nor3 (nor3.com). También esta y otras actividades, como espeleología o escalada, con Alto Miera (centroactividadesaltomiera.com).

© Gonzalo Azumendi

El singular campanario de la iglesia de San Pelayo sobresale sobre Arredondo. También de interés en este pueblo, la ermita rupestre de San Juan de Socueva.

Guía práctica

Guía práctica

© Gonzalo Azumendi

Cuándor ir

Para ver la cascada en su máxima belleza, en primavera y otoño, después de las lluvias. En verano para descender por el Asón en canoa. El 15 de septiembre es la fiesta de la Bien Aparecida.

Cómo llegar

Desde Santander al nacimiento del Asón hay una hora por el puerto de Alisas, con espectaculares vistas. Desde la cascada al mar hay 35 kilómetros.

Qué ver

CENTRO DE INTERPRETACIÓN COLLADOS DEL ASÓN. En el pueblo de La Gándara. Informansobre itinerarios, como la ruta del nacimiento del Gándara (4,5 km) o la del Asón (7,5 km). Salidas guiadas (redcantabrarural.com/naturea-3). CUEVA DE COVALANAS. El aparcamiento está a dos kilómetros de Ramales por la N-629. Desde él un sendero en pendiente de 700 metros lleva hasta la entrada (cuevas.culturadecantabria.com). CUEVA DE CULLALVERA. En el casco urbano de Ramales (cuevas.culturadecantabria.com). CUEVA DEL VALLE. En torno a esta cavidad habitada en el Paleolítico discurre una ruta senderista fácil. Se aparca antes de llegar al barrio de Helguera. MUSEO DE LA CANTERÍA. Dedicado al gran maestro cantero Rodrigo Gil de Hontañón, que trabajó en el siglo XVI en las catedrales de Salamanca o Segovia. En el barrio de Cereceda de Rasines (aytorasines.org). AMPUERO. Casonas del siglo XIX, como la de Espina, la iglesia de Santa María y, a cinco kilómetros, el santuario de la Bien Aparecida. LIMPIAS. Bonito conjunto de casonasy palacios y la milagrosa imagen del Santo Cristo de la Agonía, en la iglesia de San Pedro.

Dónde dormir

PARADOR DE LIMPIAS (Limpias, parador.es). Emplazado en una gran finca con jardines. Piscinas y restaurante. TORRE DE RUESGA (Valle, torrederuesga.com). Palacio del siglo XVII que conserva la grandeza de su época. Con spa, piscina y restaurante. CASONA VALLE DE SOBA (Regules, casonavalledesoba.com). Siete habitaciones en una antigua casona montañesa junto al río Gándara.

Dónde comer

RONQUILLO (Ramales, restauranteronquillo.es). Recetas tradicionales con productos kilómetro cero y técnicas de vanguardia. Un sol en la guía Repsol. COVENTOSA (Asón, restaurantecoventosa.com). Cocido montañés y cabrito al horno.SOLANA (Ampuero, restaurantesolana.com). Cocina contemporánea con estrella Michelin.

Más información

TURISMO DE CANTABRIA, turismodecantabria.com