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rotterdam holanda© Shutterstock

Rotterdam, la ciudad más artística y (este fin de semana) más musical

El festival de Eurovisión se celebra este año en una de las ciudades más dinámicas de Holanda. Portuaria, animada y con un skyline en constante cambio, ahora que todo el mundo habla de ella, es momento de descubrir sus mil caras, desde la de sus iconos arquitectónicos a la más cultural y vibrante.


21 de mayo de 2021 - 18:22 CEST
panoramica de la ciudad de rotterdam desde el mirador de euromast© Shutterstock

NUEVA ARQUITECTURA A ORILLAS DEL RÍO NUEVO MOSSA

A Rótterdam se la conoce como la Manhattan del Mosa. Aquí se construyó el primer rascacielos de Europa, y también aquí se levanta la torre más alta de Holanda (Maastoren), así que cuando uno llega a ella lo primero que tiene que hacer es buscar un buen mirador sobre la ciudad, como el de la torre Euromast (en la imaegn) y disfrutar con su impresionante perfil. Para ver y conocer la historia que hay detrás de su arquitectura, como la que se concentra en el moderno barrio Kop van Zuid, las rutas que ofrece Urban Guides (urbanguides.nl).

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terrazas en el puerto de rotterdam© Shutterstock

RESTAURANTES Y TERRAZAS

Como ciudad portuaria, con influencias de todo el mundo, en Rótterdam se disfruta de la cocina local, pero también de sabores exóticos. Para empezar, maravillosas vistas de la ciudad y el puerto tiene Euromast Brasserie (euromast.nl/en/restaurant), una experiencia única es probar los 9 platos acompañados de sus respectivos vinos de In de Keuken van Floris (indekeukenvanfloris.nl), la refinada carta vietnamita de Little V (littlev.nl) y, por supuesto, las propuestas de Parkheuvel (parkheuvel.nl), con estrella Michelin. Entre sus terrazas, Popocatepetl The Mexican (popo.nl), De Tuin (restaurantdetuin.nl), el barco de vapor ss Rotterdam (ssrotterdam.com).

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hotel new york en el muelle wilhelminakade de rotterdam© Shutterstock

EL MUELLE WILHELMINAKADE

Entre Rótterdam y Nueva York siempre ha existido una fuerte conexión. Desde este famoso muelle que se extiende a lo largo del río Mosa partían los trasatlánticos que entre 1901 y 1971 unían ambas ciudades y hoy es una sucesión de rascacielos, algunos con arquitectura de rasgos americanos, con los diseños más atrevidos. La única estructura de tiempos pasados en este entorno es el Hotel New York (en la imagen), la que fuera sede de la Holland America Line y que alberga un hotel y un restaurante (hotelnewyork.com), en el que descansar o degustar unas ostras mientas se contempla el perfil de la ciudad.

rotterdam oude haven la parte mas antigua del puerto embarcadero hist rico y el puente willemsbrug© Shutterstock

PUENTE WILLEMS Y PUENTE ERASMO

Por sus más de 300 metros y su color rojo, el Willemsbrug o puente de Guillermo es reconocible a primera vista. Une el norte y el sur de Rotterdam y permite hacerse una idea de lo gigantesca que se ha hecho esta ciudad a orillas del inmenso río Mosa. Rivalizando en vistosidad y monumentalidad, el puente de Erasmo, que le supera en metros, hasta llegar a los ochocientos, y es blanco como un cisne, una maravilla de la ingeniería.

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barrio de delfshaven rotterdam© Shutterstock

BARRIO DE DELFSHAVEN

En Rottterdam, todo es relativamente nuevo, pues la ciudad tuvo que empezar de cero después de ser arrasada durante la Segunda Guerra Mundial. De su pasado Rotterdam conserva unos pocos edificios, como la iglesia medieval St. Laurenskerkel Ayuntamiento o la White Huis, que no es una copia de la Casa Blanca de Washington, sino el primer rascacielos de Europa, de 1898. Pero para saber cómo era antes de 1940, lo mejor es conocer este pintoresco y pequeño puerto interior rodeado por dos canales, el Voorhave y el Achterhaven. En él no hay que perderse la iglesia Pelgrimvaderskerk, tomarse una cerveza en De Pelgrim (pelgrimbier.nl) y admirar el De Delft, una réplica de un navío del siglo XVIII.

casas cubicas del arquitecto holand s piert blom en la ciudad de rotterdam© Shutterstock

CASAS CÚBICAS

Han pasado más de 40 años desde que el arquitecto holandés Piert Blom diseñara junto a la estación de tren Rotterdam Blaak esta urbanización que semeja un bosque abstracto, cuyas casas son literalmente cubos inclinados a 45 grados, pero siguen siendo una de las atracciones más singulares de la ciudad. Si curiosa resulta la visita a la casa museo Kijk-Kubus, más aún la experiencia de pasar una noche durmiendo entre las paredes inclinadas de una de ellas (kubuswoning.nl).

parque de los museos de rotterdam© Shutterstock

EL PARQUE DE LOS MUSEOS

Los cinco museos más conocidos de la ciudad se reúnen en el parque Museumpark. El más importante es el Boijmans Van Beuningen, fundado en 1849, un monumento emblemático de la ciudad que, cerrado actualmente por reformas, ha cedido algunas de sus obras maestras firmadas por grandes artistas como El Bosco, Rembrandt, Monet, Van Gogh, Mondrian, Dali o Kandinsky a sus museos vecinos. Próximos a este entorno quedan la torre Euromast –una de las más altas de la ciudad, a la que se puede subir para admirar la panorámica a 185 metros de altura, el puente de Erasmo y la Witte de Withstraat, una popular calle llena de tiendas, galerías y cafés.

markthal el mercado mas impactante de rotterdam© Shutterstock

MERCADO MARGKTHAL

Para sentir el pulso de Rótterdam y de paso vivir una auténtica experiencia gastronómica hay que visitar sus mercados, que no se libran del diseño que impera en esta ciudad. Por fuera Markthal (markthal.klepierre.nl) es una herradura gigante, por dentro, un mercado, y apartamentos, donde además de hacer la compra en su centenar de puestos puedes aprovechar para tomarte algo. En su bóveda interior, un inmenso mural digital en el que se representan frutas, verduras y hortalizas.

wattertaxi por los canales de rotterdam© Shutterstock

EL SKYLINE DESDE EL AGUA

En una ciudad de perspectivas como Rotterdam, casi es obligado admirar su perfil desde el agua, tan estrechamente vinculada a ella. En los emblemáticos barcos Spido, en waterbus, en watertaxi (en la imaegn) o en un singular autobús que lo mismo va por el centro de Rotterdam que al minuto siguiente navega entre los barcos del Mosa, la silueta de esta metrópolis en permanente construcción y con una arquitectura de renombre internacional siempre depara nuevas sorpresas.

molinos de viento de kinderdijk holanda© Shutterstock

MOLINOS DE KINDERDIJK

En Holanda hay más de mil molinos, pero los que brindan la típica imagen holandesa son los de Kinderdijk, a solo 15 kilómetros de Rotterdam, inscritos en la lista de la Unesco del Patrimonio de la Humanidad. En apenas una hora se puede llegar en bici, y luego en ferri desde el pueblo de Krimpen, hasta estos 19 molinos construidos hacia 1740 en el pólder (tierra que se ha recuperado al mar) de Alblasserwaard, en la confluencia de los ríos Lek y Noord. Hoy son un símbolo de la gestión de agua holandesa. Además de ver numerosos cursos de agua, diques, molinos y esclusas, se pueden visitar dos de ellos convertidos en museo y uno en centro de interpretación.

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