A la derecha, un mar de olivos. A la izquierda, unas serrezuelas de roca caliza, las Subbéticas, salpicadas de pueblos blancos y castillos árabes. Y al frente, un camino llanísimo por el que pedalear sin hacer apenas esfuerzo, aspirando a pleno pulmón el grato olor de las almazaras, el aroma de Andalucía. Por este camino corrió, hasta 1985, el Tren del Aceite, que durante casi un siglo transportó en vagones cisterna el oro líquido de estas tierras desde Linares (Jaén) hasta Puente Genil (Córdoba). También llevaba plomo, carbón y pasajeros. Su trazado se ha conservado intacto, al igual que sus estaciones y viaductos, y podemos disfrutarlo sobre dos ruedas, especialmente el tramo más bello, que recorre 65 kilómetros del sur de Córdoba.
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INICIO DE LA RUTA
La ruta arranca en el viaducto sobre el río Guadajoz, a 10 kilómetros de la estación de Luque, que es un imponente puente de estructura reticular metálica, de 199 metros de longitud por 50 de altura, construido en 1891 y toda una reliquia de la arquitectura del hierro decimonónica.
LA LAGUNA DEL SALOBRAL
Solo 4 kilómetros más adelante está este otro «sorpresón», una charca estacional del tamaño de 90 campos de fútbol, en la que recalan ánades, porrones, malvasías, fochas, cigüeñuelas, avefrías, alcaravanes, cormoranes e incluso alguna bandada de flamencos.
ANTIGUA ESTACIÓN DE LUQUE
En el kilómetro 10, la antigua estación de Luque es ahora un buen lugar para desayunar o para comerse un flamenquín y un rabo de toro en el andén cubierto o en los viejos vagones. Cuenta también con un museo del aceite y una tienda. El pueblo blanco de Luque, con su castillo nazarí en lo alto, queda a tres kilómetros, monte arriba, de la vía verde.
ZUHEROS
Al que sí hay que subir es al pueblo de Zuheros, en el kilómetro 17 de la ruta. Sujaira, la roca inexpugnable, llamaron los moros a este nido de águilas que tiene el castillo más roquero de Córdoba y el caserío más impecable. Antes que los árabes, se encapricharon de Zuheros los cavernícolas que llenaron de cabras pintadas la cueva de los Murciélagos. El recorrido guiado por la cavidad cuesta 6 € (7,50 si se combina con la visita al museo arqueológico y al castillo).
EL CAÑÓN DEL BAILÓN
Este formidable tajo abierto por la erosión fluvial en la roca caliza lo podemos localizar al lado mismo de Zuheros. En el área recreativa Las Cruces nace un sendero circular de 4,7 kilómetros y dos horas de duración que permite contemplar el cañón a vista de pájaro desde el mirador de la Atalaya y luego recorrerlo por su fondo.
PRÓXIMA ESTACIÓN: DOÑA MENCÍA
En este pueblo, situado en el kilómetro 20 de la ruta, vale la pena hacer un alto para probar sus afamados vinos de Montilla-Moriles y para evocar a Juan Valera, que aquí escribió y ambientó varias de sus novelas. Luego se atraviesa el único túnel del recorrido, el del Plantío, y otro viaducto espectacular, el de la Sima, de 132 metros de longitud. En unas pocas pedaladas más llegaremos a la antigua estación de Cabra (kilómetro 33 de la ruta), que acoge el Centro de Interpretación del Tren del Aceite y donde hay aparcada una mastodóntica locomotora de vapor y varios vagones de mercancías.
CABRA
En Cabra acaba la parte más vistosa de la vía verde. Toca decidir. Si hay tiempo y fuerzas, se puede seguir pedaleando otros 32 kilómetros (65 en total, que en realidad son 130, pues hay que volver) hasta la estación de Campo Real, cerca de Puente Genil, donde concluía su trayecto el Tren del Aceite. Por el camino se verá Lucena, villa de gran tradición alfarera y espléndido pasado judío, que atesora una de las joyas del barroco cordobés, la capilla del Sagrario de la parroquia de San Mateo, además de un castillo, el del Moral, donde estuvo encerrado Boabdil.
La otra opción es dar media vuelta en Cabra y regresar disfrutando del mismo paisaje, pero con una nueva perspectiva: a la derecha, sierras de rubia caliza; a la izquierda, olivos, olivos y más olivos.
GUÍA PRÁCTICA
En Doña Mencía, Subbética Bikes Friends (subbeticabikesfriends.com) alquila bicis en la antigua estación y organizan paseos guiados por la localidad, visitando bodegas y rincones relacionados con la vida y la obra de Juan Valera. También ofrecen servicio de transfer y apoyo logístico para aquellos que realizan rutas en bici por la vía verde, algo muy útil si se desea hacer el recorrido en un solo sentido.
Dónde dormir
EN ZUHEROS
Hacienda Minerva (haciendaminerva.com). Cortijo del siglo XIX junto a la vía verde, en medio de un olivar, con baños árabes, piscina, encantadores patios floridos y taberna típica andaluza. En su restaurante, instalado en el antiguo molino de aceite, se come de maravilla.
Zyhayra (zercahoteles.com). Hotel rural en el pueblo, con buen restaurante de cocina tradicional. Hay que probar la clavellina [alubias con un huevo frito y ajitos por encima] y el abanico ibérico a la plancha.
EN DOÑA MENCÍA
Mencía Subbética (menciahoteles.com]. Moderno hotel con vistas a la sierra y a la vía verde. Dispone de 18 habitaciones amplias y luminosas, piscina, restaurante y terraza chill-out.
Dónde comer
EN LUQUE
Nicol's (estaciondeluque.es). Restaurante de cocina casera en la antigua estación de Luque, al lado mismo de la vía verde. También tiene tienda y museo del aceite, donde se hacen catas y desayunos molineros.
EN DOÑA MENCÍA
La Cantina (tel. 957 67 63 38). En la antigua estación, establecimiento sencillo frecuentado por usuarios de la vía. Especialidad en quesos y carnes a la brasa.
EN CABRA
Mesón La Casilla (mesonlacasilla.com). Excepcionales tapas y platos de auténtica cocina andaluza. Sobresaliente en pescados.
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