STONEHENGE (INGLATERRA)
En el condado inglés de Wiltshire, sobre una verde llanura de Salisbury, se levanta este enigmático conjunto megalítico, el más famoso de Europa. Dos preguntas siguen en el aire desde su descubrimiento, ¿quién o quiénes lo levantaron? y ¿cuál fue su uso? Muchos son los que tratado de dar respuesta a estos interrogantes: el Mago Merlín, los romanos, los druidas e incluso los extraterrestres, pero lo cierto es que sigue siendo un misterio. Lo que sí parece haberse esclarecido con diferentes estudios arqueológicos es la fecha de su origen. Este monumento declarado Patrimonio de la Humanidad data del año 3.000 a.C.
LÍNEAS DE NAZCA (PERÚ)
Situado en el desierto del mismo nombre, las líneas de Nazca han sido y son todo un misterio. Estos geoglifos tienen forma de humanos, animales, plantas y otros seres desconocidos y solo son completamente visibles desde el aire. El conjunto de estas figuras abarca más de 500 kilómetros cuadrados y, según los estudios realizados, su creación comenzó en el año 400 a.C.. Para evitar su desaparición, esta zona se ha declarado protegida y es Patrimonio de la Humanidad. Lo más curioso de estos dibujos es que ninguna de las líneas de un mismo grabado se junta y la gran pregunta es, ¿quién trazos estos curiosos dibujos? Los extraterrestres es la respuesta más común entre los amantes del misterio.
PARQUE DE LAS ESFERAS (COSTA RICA)
En el sur de Costa Rica, en la llanura aluvial del delta del río Diquís, existe un conjunto de más de 500 petroesferas precolombinas, únicas en el mundo por su tamaño –algunas alcanzan los 2,66 metros– y la perfección con la que han sido talladas. Estas características llevaron a la Unesco a declararlas Patrimonio de la Humanidad. Fueron descubiertas en 1939 por una compañía bananera estadounidense que deforestó la zona y, desde entonces, arqueólogos de todo el mundo se han preguntado cómo surgieron y cuál era su utilidad. Por supuesto, entre las teorías de su origen están los extraterrestres y dioses que las lanzaban para alejar los huracanes.
ESTATUAS MOAI (ISLA DE PASCUA)
Mientras los arqueólogos siguen intentando descifrar cómo se esculpieron y trasladaron las famosas estatuas moai, los habitantes de la zona tienen la creencia de que estas figuras son una representación de sus ancestros y que llegaron a este lugar por sí solos, ya que eran capaces de andar. Más de 100 ejemplares custodian las verdes colinas y la costa de la isla, algunas de las cuales pesan más de 85 toneladas y miden entre uno y diez metros de alto, de ahí el misterio ya que son demasiado pesadas como para ser transportadas a mano. Los exploradores europeos que las descubrieron en 1722 aseguraron que los rapanuis no contaban con animales de tiro ni con la ayuda de la rueda.
EL LAGO NESS (ESCOCIA)
Si existió o existe un monstruo en estas aguas es algo que no llegaremos a saber, pero lo cierto es que el misterio que ha envuelto a este lago –ubicado a pocos kilómetros de Inverness– lo ha convertido en uno de los puntos más turísticos de Escocia. Desde el siglo VI, muchos han sido los que han asegurado ver a Nessie, un enorme animal marino que, supuestamente, vive en sus profundidades. Los biólogos marinos encargados de analizar sus aguas no han encontrado evidencias de la existencia de un animal de tal tamaño, pero los habitantes de los alrededores siguen asegurando verlo cada cierto tiempo.
TRIÁNGULO DE LAS BERMUDAS
Muchas son las leyendas que se han extendido acerca de este punto del mapa a lo largo de los años. Este triángulo que une las islas Bermudas, Puerto Rico y Miami es, sin duda, uno de los grandes misterios de la humanidad. Fue en 1945 cuando desapareció en él un avión y tras él llegaron una larga lista de barcos y aviones que una vez entraron en esta zona no se les volvió a ver. Las explicaciones a tal misterio son muchas, desde las menos racionales, como monstruos marinos, deformaciones temporales y extraterrestres, hasta las aportadas por científicos de todo el mundo: trombas marinas, erupciones de gas metano y anomalías magnéticas. La respuesta válida todavía no existe.
LAS TINAJAS DE LOS MUERTOS DE PHONSAVAN (LAOS)
A unos 400 kilómetros de Vientián, la capital del país, se ubica la conocida como la llanura de las tinajas de los muertos de Phonsavan. Un sitio arqueológico que es realmente resulta misterioso, donde cientos de tinajas elaboradas con piel de animal, estiércol, arcilla, azúcar y arena se reparten sin ningún orden. Muchas son las leyendas que tratan de dar respuesta, como la que cuenta que, tiempo atrás, contenían whisky para calmar la sed de un gigante que vivía en las montañas o, la más lógica, que se usaban para rituales funerarios. El misterio no solo reside en para qué sirvieron, sino también en el porqué se colocaron aquí, ya que no se tiene evidencia de ocupación en esta zona.