Una catedral para una boda que ha revolucionado la capital sevillana
Sevilla puede presumir de muchas cosas, pero sobre todo de Catedral y más con su torre, la famosa Giralda, todo un símbolo en la ciudad que este fin de semana, bajo un sol radiante, va a lucir espectacular ante la mirada de miles de personas que estarán pendientes de una de las bodas del año, la de Pilar Rubio y Sergio Ramos.
El vestido, o los vestidos, que lucirá Pilar Rubio (aún no ha desvelado si será uno o más diseños), su peinado, el traje del novio, los invitados… miles de personas estarán pendientes este sábado de todos los detalles de una boda que, ya a estas alturas, ha hecho correr ríos de tinta. Pero nosotros queremos detenernos en otra gran protagonista, la Catedral de Sevilla, declarada Patrimonio de la Humanidad junto con el Real Alcázar y el Archivo de Indias, y desvelaros, eso sí que podemos, sus secretos, sus imprescindibles, para descubrir otro día.
LA GIRALDA
La torre de la Giralda es el distintivo de la ciudad de Sevilla. Mandada construir en la segunda mitad del siglo XII por los califas almohades, la más hermosa de las torres musulmanas cobró su aspecto definitivo tras su reforma en el siglo XVI. Un prisma perfecto de casi 93 metros de altura coronado por la veleta de una estatua femenina llamada popularmente el Giraldillo, nombre que acabó de aplicarse a toda la torre. Hoy en día es el mejor mirador para contemplar Sevilla, desde su campanario y sus balcones, orientados a los cuatro puntos cardinales, se obtiene una visión perfecta de los Alcázares, el Archivo de Indias, el barrio de Santa Cruz o el Palacio Arzobispal.
PUERTAS DE LA CATEDRAL
La puerta del Perdón, que da paso al patio de los Naranjos, era la entrada principal de la primitiva mezquita. Conserva el arco de herradura y sus portones de bronce almohades. Las portadas góticas más antiguas son los laterales a los pies de la iglesia. Las de la cabecera son también góticas.
CAPILLA MAYOR
Se sitúa en la nave central, delimitada por rejas renacentistas. La preside el mayor retablo de la cristiandad, una pantalla dorada de 20 metros de altura con infinidad de tallas y relieves, comenzado por el flamenco Pyeter Dancart a finales del siglo XV. En la cabecera está la capilla Real.
SACRISTÍAS, TESORO Y SALAS
La riqueza artística de la catedral es inabarcable, con multitud de obras de arte. Algunas de las más notables están en las salas del área de recepción, en la sacristía de los Cálices y sacristía Mayor, y en la sala Capitular. Hay que detenerse en los cuadros de San Isidoro y San Leandro, de Murillo, las Santas Justa y Rufina, de Goya, Santa Teresa, de Zurbarán o la talla de la Inmaculada Concepción, de Martínez Montañés.
TUMBA DE COLÓN
En el lado derecho del crucero se encuentra la tumba del descubridor, un monumento del escultor Arturo Mélida en el que cuatro heraldos representan los reinos de Castilla, León, Aragón y Navarra. La inscripción dice: «Cuando la isla de Cuba se emancipó de la Madre España, Sevilla obtuvo el depósito de los restos de Colón, y su Ayuntamiento erigió este pedestal».
LA VISITA
La Catedral (catedraldesevilla.es) está abierta de lunes a domingo en diferentes horarios que pueden verse modificados por celebraciones de actos de culto (como este fin de semana por la boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos).
La entrada cuesta 9 € (reducida 4 €, menores de 14 años gratuita) incluye la visita a la Catedral, las sacristías, la Sala Capitular, el Tesoro, la Giralda, el Patio de los Naranjos y la iglesia de El Salvador, ubicada en la cercana plaza de El Salvador. Existe un horario de acceso gratuito, los lunes de 16:30 a 18:00.
En los meses de verano existen unas normas de decoro en la indumentaria: no estando permitido el acceso al templo en calzado de playa, las mujeres no pueden acceder en tirantes ni pantalón corto y los hombres con camisetas sin mangas.
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