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¡Chss! Este escondite virgen en Portugal es un secreto

Se llama Troia, es una estrechísima lengua de tierra, está rodeada de playas, despoblada y entre su vegetación se camuflan villas, campos de golf y ruinas romanas que miran al mar. Para unas vacaciones en Semana Santa no se puede pedir más. Pero es que lo hay. En el complejo Troia Resort impera la filosofía eco-chic y además cada uno diseña el día a día a su gusto.


Actualizado 10 de abril de 2019 - 11:12 CEST

Kilómetros y kilómetros de playas vírgenes, un entorno natural privilegiado para las aves y un espíritu relajado. A un lugar así cualquiera se escaparía esta Semana Santa. Más aún si ese paraíso portugués es casi un secreto. De momento, por Troia han pasado algunas celebrities internacionales que han encontrado en él su escondite perfecto, sobre todo, por la privacidad que garantizan sus exclusivas villas y sus amplios apartamentos, donde el lujo es pasar unos días en la playa aislados del bullicio, en libertad y disfrutando de la calma que ofrece un entorno como este.

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Pasear por la playa en familia se antoja como un plan perfecto para pasar el día.
Lujo y modernidad se dan las mano en las villa de Troia Resort.

La península de Troia queda cerca de casa, a solo una hora del aeropuerto de Lisboa, y frente a Setúbal, desde la que se llega en un ferry en apenas unos minutos. Para entretenerse, está la privilegiada bahía del estuario del Sado, donde se ven delfines haciendo acrobacias en sus aguas, los observatorios de aves de la laguna, los paseos en bicicleta, los almuerzos en la vecina Comporta, las animadas veladas en el Casino… pero también los planes que para Semana Santa ha ideado Troia Resort.

En la bahía del estuario del Sado podrás ver delfines haciendo acrobacias en sus aguas.
Para entretenerte en Troia puedes optar por dar un paseo en bicicleta con tu familia.

Las propuestas van desde menús especiales elaborados con productos autóctonos y de temporada hasta espectáculos y actuaciones para toda la familia en las ruinas romanas del complejo, que en el siglo I a.C. llegó a ser un gran centro de producción de salazones de pescado, el mayor del mundo romano en la época. Este mismo será el escenario para representar, el viernes 19 de abril, la pieza teatral Juegos de Engaño, una comedia inspirada en El Enfermo Imaginario, de Molière.

Vista aérea de las ruinas romanas del complejo de Troia Resort, ruinas que en su día fueron un gran centro de producción de salazones de pescado.

Muy cerca de las ruinas y para los amantes de los animales, el sábado 20 de abril se podrá asistir a un espectáculo ecuestre con fado y flamenco en medio de la naturaleza y a pocos metros de la playa.

Interior de una de las villas de Troia Resort.
Vista aérea de la península de Troia, situada a apenas una hora de Lisboa.

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