No hay quien venga a región vinícola de Álava que no disfrute de sus afamados caldos. Con el vino como protagonista se pueden organizar en la zona un puñado de experiencias. Estas son 5 de las más apetecibles.
UN PASEO POR LAGUARDIA
En lo alto de un cerro protegido por murallas, se levanta este mágico pueblo que simula el casco de un navío, pero que un lugar de mares surca viñedos. Nada más adentrarse en él, envuelve su aire medieval y sorprende que por cuyas empedradas y estrechas calles no pasen coches. La joya arquitectónica de Laguardia es la iglesia de Santa María de los Reyes y su espectacular pórtico de piedra policromado del siglo XIV. Para verlo hay que apuntarse a la visita (3 €) que incluye un breve espectáculo de luces y voz en off en el que se explica cada detalle, desde al arco gótico hasta las escenas recreadas. Después lo que toca es perderse por las calles de su casco antiguo, visitar a su virgen china del siglo XIII, entrar en la iglesia de San Juan o admirar el reloj de la Plaza Mayor, en el que dos danzarines vestidos al modo tradicional salen a un balcón para bailar la danza típica. E imprescindible también para entender la historia y cultura de lugar, visitar una de sus 258 cuevas que recorren el subsuelo del pueblo, hoy convertidas en bodegas.
SORPRESAS BAJO TIERRA
Bajo el palacio de los Samaniego y a 7 metros de profundidad, se esconde El Fabulista (bodegaelfabulista.com), una bodega que sigue elaborando de forma tradicional sus vinos. Visitarla es toda una aventura donde se puede conocer todo el proceso de elaboración de sus vinos: desde la recepción de las uvas, pasando por la zona de elaboración y la de envejecimiento para, finalmente, degustar dos de sus caldos. La visita no está exenta de sorpresas, ya que el espíritu del fabulista Félix María Samaniego está muy presente en ella, incluso ¡se lo puede ver!
TRATAMIENTO CON VINO
El vino es el protagonista absoluto del Wine Oil Spa (wineoilspa.com) del hotel Villa de Laguardia, un espacio de 1000 m2 en el que dejarte mimar con los tratamientos más originales, como Cosmeticata, una cata de tres vinos y tres productos cosméticos de la marca Esdor creados con ingredientes de la zona. La experiencia, pensada para un grupo de amigos o familia, dura unos 80 minutos y cuesta 25 € por persona. Otra propuesta es su masaje corporal completo con uvas y aceite (57’ por 90 €) o un 3 en 1: exfoliación de pepita de uva, hidratación de vino y experiencia gastronómica, 65’ por 55 €. Y para las escapadas románticas, el paquete En pareja pasión y vino, una bañera de hidromasaje llena de vino tinto y un masaje relajante (50’, 116 €)
EXPERIENCIAS INTERACTIVAS
Para todos aquellos que quieran aprender sobre la cultura enogastronómica de la Rioja Alavesa, el espacio Villa Lucía (villa-lucia.com) ofrece múltiples actividades. Desde la visita a su museo, en el que conocer todo el proceso de la elaboración del vino mediante paneles didácticos, efectos audiovisuales y catas de aromas virtuales, pasando por la proyección de un cortometraje 4D –ganador de 17 premios internacionales–, una gymkhana o catas a medida.
GASTRO, VINO Y ESPECTÁCULO
A lo largo del año, el espacio Villa Lucia (villa-lucia.com) organiza diferentes eventos en los que degustar la mejor gastronomía local de km 0, acompañada de los mejores vinos y un divertido espectáculo. Monólogos, fiestas temáticas y Music & Wine Tonics, en el que diferentes estilos musicales como el swing, el folk o los boleros maridan con bebidas realizadas, en su mayoría, con vinos y cócteles derivados de la uva.
Si quieres un lugar en el que establecer tu punto base puedes optar por el Sercotel Villa de Laguardia (hotelvilladelaguardia.com), un cuatro estrellas con 86 habitaciones de estilo provenzal rodeado de viñedos situado a apenas 10 minutos andando del pueblo de Laguardia.