El Golfo, el valle más ‘chulo’ de El Hierro
Pequeña en tamaño y rica en contrastes y emociones, la isla de El Hierro ofrece lugares tan singulares como El Golfo, un valle abierto al mar y protegido por acantilados de piedra que alcanzan los mil metros de altura. Tan curioso es, que en su accidentada costa volcánica es posible bañarse tranquilamente en un charco azul mientras las olas baten con fuerza.
Esta isla canaria es un parque de atracciones de la naturaleza. En este peñón oceánico, barrido por los vientos alisios, las fuerzas de la naturaleza se expresan con una belleza poderosa. Reserva de la Biosfera, su violenta geología otorga grandeza y dramatismo a su paisaje, pero la isla guarda en su costa norte un espacio de dulce calma, un territorio poco elevado, asomado al mar y protegido por gigantescos acantilados conocido como El Golfo.
El valle secreto de El Golfo es tan espectacular que merece ser contemplado a vista de pájaro desde el mirador de La Peña, a casi 650 metros de altura, en un espacio y restaurante diseñados por el paisajista y ecologista César Manrique en Guarazoca. O seguir hasta el mirador de Jinama, a más de 1.200 m, por encima del “mar de nubes”, que permanece a menudo retenido contra el farallón rocoso. Del mirador arranca el Camino Real de Jinama, el antiguo camino por el que se descendía a las tierras bajas de El Golfo.
Ahora también se puede acceder por un moderno túnel que enlaza con Valverde, la capital, en solo veinte minutos, pero es mejor llegar por la carretera que desciende vertiginosamente desde el alto centro de la isla. Atravesando frondosos pinares, zonas de laurisilva y campos de helechos, se baja hasta los viñedos que producen las uvas con las que se elabora el magnífico vino de Frontera. A la entrada de la población se encuentra la ermita de Nuestra Señora de Candelaria, con su campanario encaramado en un promontorio.
Frontera y la inmediata Tigaday, rodeadas por cultivos de frutales, distribuyen los caminos que llevan hasta rincones llenos de encanto. En la costa, hacia el oeste, se encuentran las piscinas naturales de agua marina del Charco Azul, en Los Llanillos. En su agua salada es posible nadar tranquilamente mientras las olas rompen con fuerza contra los obstáculos que rodean la tranquila pileta natural de aguas azules. Las piscinas cuentan con instalaciones de agua potable y zonas para hacer pícnic.
Siguiendo hacia poniente se llega al balneario y spa de El Pozo de la Salud, y a las preciosas casas tradicionales de Sabinosa rodeadas por cultivos de viñedos. Por encima se encuentra la deshabitada y salvaje punta oeste de la isla, donde aparecen las sabinas de troncos retorcidos por el viento, cerca del hermoso y solitario santuario de Nuestra Señora de los Reyes.
Hacia el este de Frontera es posible bañarse en las piscinas costeras de El Charco de los Sargos, en La Maceta, y en la zona de Las Puntas, donde se encuentra el hotel más pequeño del mundo. A su espalda se levanta el enorme acantilado del monumento natural de Tibataje, y a tres kilómetros, el Ecomuseo de Guinea, que muestra en 31 edificios antiguos la forma de vida ancestral de los herreños. A su lado, el Lagartario conserva y enseña los últimos ejemplares del lagarto gigante de El Hierro, una especie amenazada, endémica, que todavía vive en libertad en los riscos de Tibataje y en los Roques de Salmor.
GUÍA PRÁCTICA
CÓMO LLEGAR
Vuelos diarios de Binter Canarias a los aeropuertos de Tenerife y Gran Canaria. Desde el puerto de Los Cristianos (Tenerife), llegan los barcos de la Naviera Armas (navieraarmas.com) al puerto de La Estaca, cerca de Valverde. La mejor manera de recorrer la isla es alquilar un coche en el aeropuerto.
DÓNDE DORMIR
En Frontera, en Puntagrande Hotel (hotelpuntagrande.com), un diminuto hotel de solo cuatro habitaciones, record Guiness como el más pequeño del mundo, en un bello emplazamiento junto al agua y con un buen restaurante. En Sabinosa, en el Balneario Pozo de la Salud (tel. 922 55 95 61), un hotel con spa junto al Pozo de la Salud y al borde del mar. En el centro de El Golfo, en Ida Inés (hotelidaines.com), un hotel tranquilo, con amplias vistas y buenos servicios.
DÓNDE COMER
En Valverde, en el Mirador de la Peña (tel. 922 55 03 00), que a sus vistas insuperables suma la cocina de calidad con productos canarios, papas arrugadas, pescados locales, vieja, atún, y carne de cabrito. Y en Frontera, en Guachinche Frontera (tel. 922 55 51 11), un pequeño local de buena cocina de productos locales entre los que destacan los pescados; y Artero (tel. 922 55 50 37), famoso por la calidad de los asados de pollo y cochinillo, y de las carnes a la brasa; es uno de los locales más populares de la zona por sus vistas sobre El Golfo.
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