Esta ciudad Hanseática a orillas del Weser es uno de los secretos mejor guardados de Alemania. Cercana, abierta y acogedora, tanto que los famosos músicos de Bremen vieron en ella el lugar perfecto para huir de sus dueños en busca de una vida mejor, vida que se respira en cada callejuela, edificio y restaurante de esta gran urbe con más de 1200 años de tradición e historia que podrás descubrir a través de estas ocho experiencias que te proponemos a continuación.
MARKTPLATZ Y LA FIGURA DE ROLANDO
El centro neurálgico de la ciudad es todo un espectáculo visual, un estímulo para todos los sentidos. El simple placer de sentarse en una de las terrazas de la plaza con un café a observar el ir y venir de los transeúntes o admirar la arquitectura tradicional son ya una experiencia en sí misma. Pero, más allá de esto, no hay que quitarle el ojo al edificio del ayuntamiento con su fachada renacentista y su gran sala gótica en la cual se celebran los principales eventos de la ciudad, así como a la famosa estatua de Rolando cuya leyenda cuenta que la ciudad permanecerá libre e independiente mientras siga en pie, dos joyas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2004.
PEDIR UN DESEO EN LA ESTATUA DE LOS MÚSICOS DE BREMEN
¿Quién no ha oído la famosa historia de los hermanos Grimm sobre estos cuatro animales (un burro, un perro, un gato y un gallo) que se lanzaron a recorrer el mundo ganándose la vida como músicos a fin de evitar la muerte? La Marktplatz acoge también esta divertida estatua que data de 1951, un punto perfecto para comenzar un tour por esta ciudad alemana. La tradición manda pedir un deseo en silencio mientras se sujetan con ambas manos las patas del burro, superstición que hace que luzcan ciertamente descoloridas.
DESCUBRIR EL BARRIO DE SCHNOOR
Conocido como el más antiguo de la ciudad, Schnoor es una parada imprescindible para todo aquel que visite Bremen. De estrechas y mágicas calles con edificios de arquitectura tradicional que casi se tocan entre sí, este antiguo barrio de marineros y artesanos acoge hoy día diferentes restaurantes bares y tiendas de artesanía. Si vas de noche no olvides pasar por la Gasthausbreuerei Schüttinger, la cervecería más antigua de Bremen en la que podrás degustar su cerveza artesanal a muy buen precio acompañada de música en directo.
CONOCER EL AMBIENTE DE SCHLACHTE
A orillas del río Weser se encuentra el paseo marítimo de Schlachte, lugar ideal para dar un tranquilo paseo y empaparse del ambiente cosmopolita que en él se respira. Un tramo que se engalana según la época del año siendo la feria de “Schlachte- Zauber” una de las más famosas. Ataviados como en la Edad Media los comerciantes de la zona transportan a sus visitantes al pasado con comidas y bebidas típicas. Los barcos amarrados al río que hacen las veces de restaurantes y bares acogen diferentes eventos proporcionando también un toque marinero digno de admirar.
DELEITARSE CON LA CATEDRAL GÓTICA DE ST. PETRI
Entrar en la catedral de San Pedro es sumergirse en un recorrido por la historia ya que este monumento de estilo gótico tiene más de 1200 años. Este lugar de culto evangélico luterano levantado sobre las cenizas de la iglesia de madera creada, en el año 789, por uno de los primeros misioneros de los frisones ha sido reconstruido en varias ocasiones siendo las criptas las partes conservadas más antiguas. Situada en el corazón de Bremen, sus dos torres gemelas de 99 metros de altura se alzan imponentes en el skyline de la ciudad.
DE CRUCERO POR EL WESER
Disfrutar de un tranquilo paseo en barco de Bremen a Bremerhaven puede ser un plan perfecto para pasar el día. Columna vertebral de Bremen, el río Weser ofrece, a lo largo de su trayectoria, múltiples y hermosos paisajes pintados de verde, así como pequeños y pintorescos pueblos cuyas casas asoman entre frondosos árboles. La ruta dura unas 4 horas aproximadamente te permitirá ver la ciudad desde un punto de vista totalmente diferente.
VIVIR SUS GRANDES FIESTAS DURANTE TODO EL AÑO
La ciudad de Bremen es sinónimo de celebración. Durante todo el año se suceden diferentes festividades que congregan tanto a sus habitantes como a numerosos turistas que llegan atraídos por la alegría y buen ambiente de estas tierras. Desde el Festival de circo Internacional La Strada, que acoge 150 eventos al aire libre del 13 al 16 de junio, el festival cultural Breminale del 3 al 7 de julio, pasando por el Festival Maritimo Internacional, en el que se sueltan amarran y se presentan canciones marineras (del 2 al 4 de agosto), hasta el Festival de Música de Bremen perfecto para cerrar el verano con tintes melódicos (del 24 de agosto al 14 de septiembre) esta urbe se engalana, una y otra vez, para convertirse en un lugar de referencia artística y cultural del país. Pero si hay una festividad que resalta por encima del resto esa es el Freimarkt de Bremen, evento que se celebra en la segunda quincena de octubre en la que se presentan más de 320 artistas en el recinto de Bürgeweide. Para los que prefieran huir del bullicio la Marktplatz acoge el Kleinen Freimarkt, todo un deleite para los sentidos. Olor a mantecado recién hecho, almendras calientes, regalices y mucho más es lo que les espera a aquellos que decidan acudir a las casetas decoradas según modelos antiguos que reproducen así los casi mil años de historia de este mercado.
BOTANIKA
Y entre arquitectura, gastronomía y festividades también hay hueco para el descanso y la conexión con la naturaleza. En el Rhododendron-Park Bremen (con una extensión de 46 hectáreas) encontramos Botanika, un jardín de 3,2 hectáreas en el que encontrarás plantas de todo el mundo y una de las mayores colecciones de azaleas y rhododendron, cuya colección solo es superada por la de la reina Isabel de Inglaterra.
Más información:
www.bremen-tourism.de/es