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Las célebres dunas de Maspalomas, declaradas reserva natural especial, ofrecen una de las imágenes más impactantes de la isla, con el azul del Atlántico como telón de fondo. Las arenas arrastradas por las corrientes del océano durante siglos han formado un mini desierto de 400 hectáreas –oasis incluido– en el que anidan aves y viven reptiles endémicos, como el lagarto gigante de Gran Canaria. Las dunas son la antesala de las fantásticas playas de Maspalomas, dos kilómetros de fina arena dorada donde uno se puede bañar casi los 365 días del año. Hay que dar un paseo por las dunas y llegar hasta el faro, que fue construido en el siglo XIX para guiar a los barcos que hacían la ruta transoceánica entre la península y América. La playa del Inglés es la más célebre del área de Maspalomas, pero tanto hacia Mogán como hacia el aeropuerto se pueden encontrar otras muchas playas en las que disfrutar de un día de sol y mar.
Saliendo de la populosa Maspalomas hay que adentrarse en el interior de la isla en dirección a las cumbres, concretamente hacia el Roque Nublo, un emblemático peñasco situado en el mismo centro, a 1.813 metros de altitud. Aunque está a solo 35 kilómetros de distancia, superar dicha altitud desde el nivel del mar cuesta más de una hora.
Para no perderte algunos de los mejores paisajes volcánicos, lo mejor es tomar la autopista GC-1 y después la carretera GC-120 que pasa por escenarios naturales de belleza fotogénica. El primero de todos es el barranco de Guayadeque, un monumento natural en el que se han encontrado numerosos vestigios de los asentamientos aborígenes prehispánicos –momias, vasijas y utensilios– en casas cueva y todos ellos guardados y expuestos en el Museo Canario de Las Palmas de Gran Canaria. Pero primero habrá visitar la Casa Cueva Canaria (casacuevacanaria.es), rehabilitada como museo en la que se descubren los modos de vida de sus moradores.
Después, sobre la misma carretera GC-120, se alcanza el mirador que permite observar la caldera de los Marteles, un cráter de 80 metros de profundidad creado por el hundimiento de la tierra después de una erupción volcánica ocurrida hace más de un millón de años.
Dejando atrás el pico de las Nieves, cima de la isla con 1.949 metros, se entra en el territorio nuboso, donde manda el pico más enigmático de la isla, el Roque Nublo, icono de la Gran Canaria más natural y monte sagrado para los guanches. Aunque existen diversos miradores en la misma carretera que permiten admirar su silueta, es posible acercarse hasta la misma base caminando unos 40 minutos desde el aparcamiento de la Degollada de La Goleta.
Antes de bajar otra vez a la costa, mejor desviarse hacia el pueblo de montaña de Tejeda, que conserva orgulloso la mayor cantidad de patrimonio arqueológico de la isla, además de unas vistas privilegiadas al Nublo y a otros roques, principalmente desde el Parador Nacional Cruz de Tejeda, que dan para imaginar que uno está en el Cañón del Colorado y no en Canarias.
El itinerario continúa tomando la GC-605, la escénica carretera que baja vertiginosa atravesando parajes espectaculares, como el parque natural de Inagua, cubierto por un pinar natural de gran valor; y deja a mano derecha la presa artificial de Soria, rodeada de roques y palmeras y que recoge el agua de la lluvia que cae en forma de cascada si coincide que ha llovido, hasta llegar al final de la ruta, el puerto de Mogán, una marina que conserva el encanto de los tiempos en los que era solo un puerto de barcos pesqueros, con playa enmarcada por apartamentos en la que encontrar ocio urbano tras pasar un día en las montañas de Gran Canaria.
ACTIVIDADES
Si quieres apuntarte a alguna actividad mar adentro, como un curso de windsurf, surf o kitesurf, Pozo Izquierdo es un lugar afamado por la calidad de las olas y la fuerza de los vientos que azotan esta parte del litoral, donde trabajan empresas como Pozo Winds (pozowinds.com).
Si quieres algo menos esforzado, puedes enrolarte en alguno de los barcos que parten cada día de Puerto Rico, en Mogán, para avistar delfines y otros cetáceos, como los que ofrece Spirit of the sea (dolphinwhale.es). O contratar una excursión en kayak desde Puerto Mogán por la costa hasta la playa de Taurito como las de OK Gran Canaria (okgrancanaria.com).
En el cercano barranco de los Palmitos está Palmitos Park (palmitospark.es) está este jardín botánico y parque zoológico perfecto para ir con niños.
Los cielos de las cumbres grancanarias están libres de contaminación lumínica y desde el Observatorio de Temisas (astrotemisas) de Agüimes se organizan visitas guiadas por astrónomos en las que se aprende sobre los planetas y las constelaciones. Son todos los viernes y sábados a las 9 de la noche en invierno y a las 10 de la noche en verano. Los domingos a las 11 de la mañana organizan también sesiones de observación solar y visitas al Museo Canario de Meteoritos (museocanariodemeteoritos.com), que alberga a la mayor colección de rocas caídas del cielo.
En la web del Patronato de Turismo (grancanaria.com/patronato_turismo) se ofrece información sobre los distintos senderos de la isla. Empresas como Trip Gran Canaria (trypgrancanaria.com) organizan caminatas por las cumbres.
GUÍA PRÁCTICA
Cómo llegar
El aeropuerto de Gran Canaria se encuentra a tan solo 31 kilómetros de Maspalomas y a 37 del Roque Nublo (20 minutos y una hora en coche, respectivamente), hasta el que llegan vuelos desde las principales ciudades españolas. SOLTOUR (https://www.soltour.es/) ofrece paquetes a Gran Canaria a muy buen precio.
Dónde dormir
En Playa del Inglés, en Gold by Marina (goldbymarina.com), un hotel boutique de decoración exquisita, a 10 minutos de la playa en Maspalomas. Solo para adultos. En Meloneras, en H10 Playa Meloneras Palace (h10hotels.com), en una zona tranquila frente al mar, con habitaciones elegantes y una oferta gourmet de cocina internacional y rincones temáticos. Aislado en una zona elevada entre Maspalomas y Puerto Mogán e ideal para desconectar, el Sheraton Gran Canaria Salobre Golf Resort (sheratongrancanaria.com), un cinco estrellas con infinity pools y campo de golf con vistas al mar y a la montaña. Otra opción es la casa rural Bentayga (casaruralbentayga.com), una casa tradicional restaurada al detalle con todas las comodidades y una terraza con vistas al Roque Nublo en el diseminado Juan Gómez, La Culata, de Tejeda. Tienen capacidad para 4-6 personas.
Dónde comer
En San Bartolomé de Tirajana, en La Proa Casa Reyes (laproacasareyes.es), una terraza al borde del mar para picar pescado y paella dentro del centro comercial Las Meloneras. En el de La Charca de Maspalomas está Samsara (samsara-gc.com), un clásico de cocina panasiática servida en un comedor de exótica. En Tejeda, cerca del Roque Nublo, en la Cueva de la Tea (tel. 928 66 64 60), un sencillo restaurante dentro de un hotel rural con vistas ofrece tapas típicas canarias como tacos de pescado con mojo verde, papas arrugás, bienmesabe…
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