Guía práctica para descubrir Monfragüe, paraíso de aves y ornitólogos
Este parque nacional es la meca de quienes les apasiona seguir el vuelo de las aves a través de unos prismáticos. Un santuario natural con miradores, senderos y fauna para entretenerse un fin de semana.
Los romanos lo llamaron Mons fragorum, que viene a ser lo mismo que un monte de vegetación abundante y terreno abrupto. Y, haciendo honor a su nombre, así sigue muchos siglos después este auténtico santuario natural cacereño donde se localizan el 70% de las especies protegidas en Europa. Por su situación, a ambos lados del río Tajo y entre Las Villuercas y las montañas que circundan la vega del Alagón; por su valor natural, una de las áreas de bosque y matorral mediterráneo mejor conservadas; por su importancia faunística, con la colonia de buitre negro más numerosa del mundo; y por su conjunto, un verdadero corredor ecológico, Monfragüe es uno de los mejores destinos para la observación de aves. Ha llegado el momento de descubrirlo.
CENTRO DE VISITANTES
Quien se apunte a un fin de semana de caminos y avistamientos sorprendentes deberá pasar lo primero, sí o sí, por el Centro de Visitantes del parque (tel. 927 19 91 34), ubicado en el enclave de Villarreal de San Carlos. Junto a él se localiza, además, un centro de interpretación de la naturaleza y un pequeño conjunto de chozas tradicionales pastoriles reconstruidas como alojamientos. En las oficinas del parque informan sobre las empresas que organizan actividades de observación de aves y naturaleza.
MIRADORES
Monfragüe es para los ornitólogos el paraíso soñado, tanto por la cantidad de especies que pueden localizarse en un territorio relativamente pequeño como por la facilidad con la que pueden observarse muchas de ellas. Por esa razón abundan los miradores acondicionados junto a la carretera en distintos puntos del parque. Se encuentran situados estratégicamente frente a los farallones rocosos en los que trajinan sus nidos aves tan espectaculares y fáciles de ver como el buitre leonado. Pero también otras mucho más raras, como el buitre negro, la rapaz de mayor envergadura de Europa que mantiene aquí su mayor colonia en el continente; o la no menos rara y delicada cigüeña negra, cuyos devaneos amorosos en el nido pueden espiarse cómodamente desde las barandillas del mirador del Salto del Gitano, el más famoso. Otros miradores, como el de la Portilla del Tiétar, brindan, si se afina la puntería, una ojeada inolvidable al escondite del búho real.
SENDEROS
El recorrido de los miradores puede combinarse con el de las sendas señalizadas que descubren algunos de sus rincones más aislados. Hay tres balizados cada uno de ellos con un color: al castillo de Monfragüe (rojo), al mirador de Tajadilla (amarillo) y al arroyo de Malvecino y cerro Gimio (verde). Todas ellos arrancan de Villarreal de San Carlos y están, a su vez, divididos en distintos tramos, con lo que se facilita la posibilidad de realizar las etapas más cortas o las que presenten un mayor interés.
LA SUBIDA AL CASTILLO
Se puede realizar en coche casi hasta la misma cima o a pie siguiendo el sendero señalizado que arranca desde la fuente del Francés. Desde este punto lleva algo más de una hora y permite disfrutar de un paseo por el interior de una floresta, húmeda y sombría, en la que abundan los madroños, brezos, durillos, alcornoques, quejigos y arces, principalmente. El paisaje que se avista desde lo alto del torreón compite, sin duda, con el que divisan los abundantes buitres de la zona. En la bajada hacia la carretera principal se localiza el refugio neolítico en el que se han hallado pinturas rupestres realizadas por los primeros habitantes de la zona. Para verlas es necesario autorización previa.
CENTRO SUR DE VISITANTES DE MONFRAGÜE
Bajo esta denominación (centrosurmonfrague.com) se agrupan en Torrejón el Rubio varios centros de interpretación relacionados con el parque nacional: Observatorio Astronómico de Monfragüe, dedicado a la astronomía y observación del cielo; Monfragüe Birdcenter, punto de información y divulgación de las aves del Parque Nacional; o el Centro de Arte Rupestre de Monfragüe (tel. 927 45 52 92), sobre uno de los mejores conjuntos de arte rupestre esquemático de la Península ibérica, gracias a los 107 abrigos que hasta la fecha se han encontrado. El centro acerca a las diversas técnicas pictóricas, cómo confeccionaban los pigmentos, cómo vivían, y al mundo de las piedras estelas.
CENTRO DE INTERPRETACIÓN LA HUELLA DEL HOMBRE
En Serradilla está este museo etnográfico (tel. 927 40 70 02) que muestra material relacionado con la presencia del hombre en la zona desde tiempos ancestrales; está centrado en arqueología y etnografía.
GUÍA PRÁCTICA
Cuándo ir
Rutas en 4x4, senderismo, actividades de educación ambiental, talleres de anillamiento de aves... En Villareal de San Carlos se celebra a finales de febrero la Feria Internacional del Turismo Ornitológico (fioextremadura.es) con un montón de actividades para todos los públicos en este privilegiado espacio natural, también declarado Reserva de la Biosfera y Zona de Especial Protección para las Aves. Si la visita no coincide con la FIO, la primavera y el otoño son también buenos momentos para disfrutar tanto del paisaje adehesado de Monfragüe como de la llegada y partida de las aves migratorias que hacen parada estacional en el parque.
Dónde dormir
En Torrejón el Rubio, en la Hospedería Parque de Monfragüe (hospederiademonfrague.com), un edificio moderno construido con materiales nobles, pizarra, madera y cemento siguiendo las líneas de la arquitectura tradicional de la zona y decoración minimalista con muebles y alfombras de Mariscal o Le Corbusier, y pinturas de modernos autores extremeños como Vostell o Canelo. Otra opción es, en Plasencia, el hotel Exe Alfonso VIII (exehotels.com), un cuatro estrellas clásico y señorial ubicado en pleno casco antiguo, a dos minutos andando de la plaza Mayor.
Dónde comer
En Serradilla, en Serraillanu.es (serraillanu.es), cuya oferta gastronómica está basada en las recetas y productos de la tierra. Y a media hora de Monfragüe, en Arroyomolinos de la Vera, en La Era de mi abuelo (hotelpdelalba.es), donde probar cocina elaborada con productos de la tierra y de la huerta propia, pero con toques de creatividad.