Diez razones para visitar Soria todo el año (y no solo cuando hace bueno)
Soria está mejor que nunca en otoño, cuando las alamedas pintan de oro las orillas del Duero y de los fogones emana el olorcillo dulzón de los Boletus. Sí, es verdad. Pero el resto del año hay también muy buenas razones para visitarla: trufas en invierno, fiestas de devoción y otras de más jolgorio, festivales de música clásica y moderna, eventos literarios y cinematográficos... En Soria podemos morir de frío o de un atracón (comer setas y torreznos a dos carrillos), pero no de aburrimiento.
INVIERNO: TRUFAS Y CARNAVAL
Los montes de encinas sorianos son el hábitat ideal de la trufa negra (Tuber melanosporum), un hongo más feo que un pecado, pero de aroma delicadísimo, que convierte el más humilde plato en un manjar digno de reyes. En febrero y marzo, coincidiendo con la recolección, se celebran las Jornadas de la Trufa Negra (soriaytrufa.com), en las que numerosos restaurantes de la capital y la provincia ofrecen tapas y menús elaborados con ella. Otra buena razón para visitar Soria en esta época es el carnaval, fiesta que en la capital empieza el jueves anterior al Miércoles de Ceniza con una tradición que se remonta al siglo XVII. Es el Jueves Lardero, día en que se merienda pan, chorizo y huevo en el monte Valonsadero, el de las Ánimas, el camino de los Royales y los parques de la ciudad. Y también se bebe, claro. Más que nada, para entrar en calor.
SEMANA SANTA
Sobria, austera, devocional, típicamente castellana... Así es la Semana Santa de Soria (semanasantadesoria.com), que está declarada de interés turístico regional, entre otros motivos, por ser la única que sigue con precisión cronológica lo acontecido durante la pasión de Cristo. Sus orígenes hay que buscarlos en la antigua Vera Cruz, una cofradía penitencial que en las noches del siglo XVI salía a dar cristiana sepultura a los reos ajusticiados bajo el soportal de la ermita de la Soledad. Además de por su tono serio, sencillo e intenso, la Semana de Pasión soriana estremece por las imágenes que procesionan, como el Santo Cristo del Humilladero, una talla del siglo XVI atribuida a Juan de Juni o persona próxima a él; y por los monumentos que le sirven de decorado, como la iglesia románica de Santo Domingo, que por sí sola, sin tambores, trompetas, incensarios, pendones y capirotes, pone la carne de gallina, y con ellos, doblemente.
FIESTAS DE SAN JUAN
Si la Semana Santa de Soria es la fiesta más seria del mundo, San Juan, para compensar, es una locura total: casi una semana de toros, vino y música, en la que las protagonistas son las 12 cuadrillas, herencia de los antiguos barrios repobladores. En teoría la cosa dura seis días (del 27 de junio al 2 de julio, en 2018), pero meses antes ya hay actos preparatorios: el Catapán, el Desencajonamiento, el Lavalenguas, la Compra… La fiesta fiesta arranca el miércoles, día del Pregón. El jueves tiene lugar la Saca: caballos, corredores y reses mansas traen desde el monte Valonsadero los 12 astados (uno por cuadrilla) hasta el coso capitalino. El llamado viernes de Toros los animales son lidiados. Su carne y sus despojos se subastan por todos los barrios el sábado Agés. El domingo de Calderas es el día grande, cuando desfilan las cuadrillas con sus calderas, unas cacerolas que llevan carne de toro, pollo o gallina, huevo y chorizo, y que se adornan con flores y motivos tradicionales. La última jornada, el lunes de Bailas, hay procesión de los santos titulares de cada uno de los barrios, merendola junto al Duero y concierto de la banda municipal, que despide las fiestas a ritmo de sanjuaneras.
MÚSICA AFROAMERICANA Y POESÍA
El último fin de semana de julio, la orilla del Duero se inunda con la música afroamericana de Enclave de Agua (enclavedeagua.com), un festival gratuito que reúne a primeras figuras y en el que tienen cabida desde el blues del delta del Mississippi hasta el hip hop, pasando por el soul, el funk, el rhythm & blues, el afrobeat, el reggae… Hay un tren especial para asistir al festival que sale de Madrid, hay una zona de acampada en la misma orilla y hay un montón de actividades complementarias: jam sessions, mercado de artesanía, talleres de dibujo y manualidades, kayak y rafting por el Duero, yoga… Pocos días después, la segunda semana de agosto, la ciudad vuelve a inundarse, pero esta vez de versos. Se trata de la feria del libro Expoesía, la mayor de España dedicada a este género literario, que se celebra en un espacio de lo más apetecible (la Dehesa, el parque más grande, céntrico y mimado de la ciudad) y acoge multitud de actos: presentaciones, recitales, exposiciones, charlas, conciertos, talleres y homenajes. Cada año, con un tema distinto: el exilio, la mujer y la poesía, la naturaleza, los poetas malditos… Imposible olvidar (y menos estos días) que Soria es la Ciudad de los Poetas, cantada por Antonio Machado, Gustavo Adolfo Bécquer y Gerardo Diego.
OTOÑO SETERO Y MUSICAL
Soria es el país de Jauja de los aficionados a las setas, donde en otoño se cogen a espuertas Boletus edulis, níscalos, trompetas de la muerte… El resultado de esta hiperabundancia puede verse y saborearse a finales de octubre, durante la Semana de la Tapa Micológica (asohtur.com), en la que participan medio centenar de bares y restaurantes de la provincia y se sirven más de 25.000 minidelicatessen a precio de pincho corriente y moliente (2 euros, en 2017). También es buena época esta en Soria para los amantes de la música culta. Y es que durante las tres últimas semanas de septiembre se celebra en la capital el Otoño Musical Soriano (festivalotonomusical.soria.es), un festival de primer orden, con más de un cuarto de siglo de historia. Música de cámara, orquestal y de banda, jazz, flamenco y música antigua, además de selectos recitales de canto, componen la variada programación de este festival cuyo escenario principal es el auditorio Odón Alonso del Centro Cultural Palacio de la Audiencia, bautizado así en memoria de quien fue su alma máter y su director hasta su fallecimiento en 2011.
RELATOS CORTOS Y CORTOMETRAJES
Cada noche de Difuntos (1 de noviembre) se celebra en Soria el homenaje a Gustavo Adolfo Bécquer y a su leyenda El monte de las ánimas, considerada por muchos como el mejor relato corto de terror de la literatura castellana. El festival de las Ánimas (festivaldelasanimas.com) comienza una semana antes con lecturas de relatos de Lovecraft, Poe o Dickens en las ruinas de San Nicolás. Y finaliza con un abracadabrante desfile nocturno hasta las orillas del Duero, donde a la luz de la gran hoguera y de las antorchas de los monjes, se realiza la lectura de la leyenda de Bécquer, a la que cada año pone voz un reconocido actor de doblaje. En noviembre también se celebra el Certamen Internacional de Cortos de Soria (certamendecortossoria.org), que durante 15 días permite a los asistentes ver más de 200 cortometrajes procedentes de más de 20 países. Con tanta historia corta, noviembre en Soria debería llamarse noviembreve.
Más información: Turismo de Soria (http://www.turismosoria.es/)