,type=downsize)
Ibiza no se entiende sin este céntrico hotel, y es que desde su apertura, en 1933, es el elegido por actores, cantantes o personalidades, como Carolina de Mónaco, cuando visitan la mayor de las Islas Pitiusas. Cumplir ese capricho de estar donde ha estado tu ídolo y descubrir las divertidas anécdotas que protagonizaron durante sus estancias, como que Pink Floyd compuso aquí la canción Ibiza Bar, mientras contemplas sus fotografías en los pasillos, o incluso encontrarte a algún otro famoso puede suceder cualquier día en el Gran Hotel Montesol Ibiza, Curio Collection by Hilton.
El que fue el primero hotel abierto en Ibiza forma parte de la Curio Collection de la cadena Hilton y acaba de renovarse para agradar en exclusiva al público adulto. Tras su fachada neocolonial de color amarillo y balcones blancos se esconde un alojamiento con una distinguida decoración, obra del conocido interiorista Lázaro Rosa-Violan, que acoge 33 exclusivas habitaciones con vistas a la ciudad antigua y al puerto, que queda a 20 metros de distancia o, más especial aún, en una de sus tres suites.
En pleno centro histórico, el hotel es el punto de partida perfecto para exprimir Ibiza, en un entorno de restaurantes de alto nivel, boutiques de moda y discotecas exclusivas. También está cerca de las playas más conocidas, Ses Salines y Cala Vadella, y del castillo que corona Dalt Vila, la ciudad antigua, declarada Patrimonio de la Humanidad.
Los huéspedes del Gran Hotel Montesol Ibiza, Curio Collection by Hilton tienen a su disposición un servicio de asesoramiento personal, con el que podrán alquilar un coche para recorrer la isla o un barco, contactar con un personal shopper y conocer la agenda de actividades locales. Son muchas las cosas de las que disfrutar, desde la visita al casco antiguo amurallado de Dalt Vila, con la espléndida catedral gótica, a contemplar uno de los atardeceres más bellos en el Parque Natural de las Salinas, Cala d´Hort o Benirrás, pasear por los pueblos blancos, hacer submarinismo o ir de compras a los mercadillos de San Carlos, San Jordi o Cala Llenya. A los huéspedes del Montesol también les espera el exclusivo Beach Club en Playa Tarida, a media hora en coche, donde relajarse en un chill out frente al mar al más puro estilo ibicenco.
Un excelente restaurante de cocina mediterránea y para cualquier hora del día pero, sobre todo, un punto de encuentro desde su apertura, es el Café Montesol. Durante la interminable noche ibicenca, hay que tomarse un cóctel en la terraza con vistas al boulevard Vara de Rey, una de las mejores postales de Ibiza, y probar una amplia selección de tapas, como los famosos baos.
Y no te olvides de descubrir Ibiza:
Ibiza, un paraíso hedonista en el Mediterráneo para disfrutar con la vista
En busca de atardeceres, acantilados y calas solitarias por la Ibiza más desconocida
