Por la Ribera suiza siguiendo a Audrey Hepburn
Buena parte de sus 63 años de vida los pasó la actriz en Suiza, primero en Lucerna, después en Morges, entre los famosos viñedos de La Cote y el lago Lemán, y después, en Tolochenaz,, con frecuentes visitas invernales a Gstaad. Seguimos los pasos de la más inmortal de las estrellas de Hollywood por sus refugios suizos.
LUCERNA
Fue Lucerna la ciudad que primero conquistó a Audrey Hepburn. Y es fácil de entender, porque esta ciudad de Suiza encandila se mire por donde se mire, desde el lugar donde se levanta, a orillas del lago de los Cuatro Cantones, al panorama alpino que la rodea o su casco histórico, con un histórico puente de madera techado, magníficas iglesias barrocas, fachadas inundadas de frescos, plazas pintorescas y un futurista centro cultural obra de Jean Nouvel. La villa de la actriz que encarnó a una rebelde princesa adolescente en Vacaciones en Roma estaba situada en la exclusiva urbanización Bürgenstock, la montaña rodeada por el lago y célebre como lugar de vacaciones y descanso de famosos artistas, y fue en su capilla donde contrajo matrimonio por primera vez en 1954 con Mel Ferrer.
MORGES
A mitad de camino entre Ginebra y Lausana está la pequeña e idílica ciudad de Nyon. Es el punto de partida para recorrer, hasta Morges, la que es una de las más fructíferas regiones vinícolas del país, La Côte. Nyon y Morges son dos pequeñas ciudades, con castillos, palacios, museos y un paisaje de viñedos por el que pasear y luego acabar probando sus excelentes vinos junto a un pescadito a orillas del glamuroso lago Lemán, donde ambas toman asiento. En el ayuntamiento de Morges la actriz de Desayuno con diamantes contrajo matrimonio en 1969 con el aristócrata italiano Andrea Dotti, con el que tuvo a su segundo hijo. Hoy la Fundación Bolle (fondationbolle.ch) expone más de 4.500 grabados, postales y fotos en memoria de la actriz. No es la única que guarda su recuerdo, también la confitería Maier (chocolaterie-maier.ch), donde compraba sus chocolates, o la fromagerie J.A. Dufaux, cuyos quesos adoraba.
TOLOCHENAZ
La mayoría de los visitantes que llegan hasta el cercano Tolochenaz, también a orillas del lago Lemán, en el cantón suizo de Vaud, lo hace con el propósito de conocer el tranquilo lugar en el que la actriz con cara de ángel que fue icono de elegancia y estilo del siglo XX vivió discretamente durante más de 20 años. En este pueblo de ritmo tranquilo, alejado de los flashes que perseguían por aquel entonces a las estrellas de Hollywood, Audrey Hepburn vivió algunos de los momentos más felices y tristes de su vida. Aunque su mansión La Paisable es propiedad privada y no se puede visitar, sí en cambio el cementerio donde descansa en paz, un espacio a cielo abierto sobre una colina siempre con flores en su tumba.
GSTAAD
Pequeñas calles peatonales perfectamente cuidadas, chalets de estilo alpino, emblemáticos hoteles como el Gstaad Palace, las tiendas más caras y exclusivas, más de 250 km de pistas de esquí... todo ello rodeado de bosques, prados y lagos, y enmarcado por los impresionantes Alpes suizos llevan conquistando desde hace décadas a royals, grandes fortunas y celebrities de todo el mundo. Audrey Hepburn fue una de ellas, era el lugar donde le gustaba hacer largos recorridos practicando el esquí de fondo. Hoy basta con sentarse en la terraza del bistro bar Rialto de este retiro invernal con glamour, en plena Promenade, para ver desfilar ante los ojos a personajes de la talla de Carlota Casiraghi, Tatiana Santo Domingo, las hermanas Ecclestone, Lapo Elkann, algún miembro de los Saboya o el mismísimo príncipe Harry de Inglaterra.
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