Por Navidad, regálate una escapada (de lujo) a Escocia
¿Quieres vivir estas fiestas en un lugar mágico, sugerente y con un montón de propuestas deliciosas para darte un capricho de esos que no se olvidan? Te proponemos un viaje de lujo de la mano de Luxury Scotland para vivir unas navidades al más puro estilo ‘scottish’.
¿Por dónde empezar una escapada navideña en Escocia? ¡Por Edimburgo, por supuesto, con el Hogmanay como gran atracción! Y es que la fiesta con la que los capitalinos celebran el Fin de Año y dan la bienvenida al Año Nuevo –¡durante cuatro días con sus noches!– es la culminación a un sinfín de atractivos: la tradicional procesión de antorchas, fuegos artificiales, los sonidos y olores típicos del mercado navideño de Princess Street Gardens, el castillo iluminado en las alturas…
Que la capital escocesa sea uno de los destinos europeos favoritos por miles de visitantes para vivir la Navidad con un puntito bon vivant no es fortuito. Para empezar, no faltan por estas fechas las deliciosas propuestas gastronómicas de restaurantes como 21212 Restaurant with Rooms, bajo la batuta del estrellado chef Paul Kitching. No se queda atrás un clásico moderno, The Witchery, donde celebrities como Jack Nicholson o Michael Douglas han claudicado a sortilegios gourmet como su trucha del Loch Etive con crema de cangrejo.
Aprovechando la cercanía a Edimburgo, a apenas una hora en coche, no dejes de escaparte a las Borders, las tierras de frontera de Escocia con Inglaterra. Allí no solo encontrarás historia y leyenda entre las románticas ruinas de abadías como Dryburgh o literatura en estado puro –no dejes de visitar Abbotsford, la casa donde vivió y escribió el novelista Sir Walter Scott-, sino también descubrir paisajes como Scott’s View, un espejismo sobre los meandros del Tweed y las Eildon Hills. Y para entrar en calor y vivir una experiencia única en la región, sumergirte en la calidad del excepcional The Roxburghe Hotel (theroxburghe.com) con una copa de vino frente a su chimenea.
No se queda atrás Edimburgo por estas fechas en propuestas hoteleras se refiere. Normal: aquí hay hoteles en los que la sofisticación alcanza lo sublime. ¿Cómo no levitar en el G&V Royal Mile Hotel Edinburgh (quorvuscollection.com/gandv-hotel-edinburgh) o en The Glasshouse (theglasshouse.ie), a un paso de Calton Hill? Si a todo esto le sumas una oferta noctámbula de diseño y un shopping más que sugerente, la ecuación tiene una solución fácil: Edimburgo es tu destino por Navidad.
Tras unos días urbanitas, nada como darle un toque campestre a tu periplo navideño en Escocia. Eso significa poner rumbo norte y hacer un alto en el camino en todo un mito: The Gleneagles Hotel (gleneagles-hotel.com). Situado en Perthshire, el escenario de la 2014 Ryder Cup, no te lo puedes perder si eres amante del golf. O de maravillas gastronómicas como su restaurante –con dos estrellas Michelin y bajo la dirección de Andrew Fairlie- o de los mimos de su lujoso spa…
Pese a que en gaélico Trossachs significa “País tosco”, en The Trossachs & Loch Lomond (lochlomond-trossachs.org) descubrirás delicadezas solo por las cuales ya merece la pena recalar aquí. Una espectacular: el Cameron House (qhotels.co.uk/our-locations/cameron-house/), el mejor alojamiento posible en esta región gracias a su ubicación frente al lago Loch Lomond. Por supuesto, también cuentan las delicias que el chef de su afamado restaurante, Martin Wishart (martin-wishart.co.uk), ha preparado para los días de Navidad, el Boxing Day y Año Nuevo.
Para conocer mejor el fascinante escenario natural que rodea al hotel, enrólate en una visita que no olvidarás nunca: sobrevolar en un aeroplano los escenarios de las Tierras Altas en las que Rob Roy McGregor, el Robin Hood escocés, forjó su leyenda en el siglo XVIII. Si lo prefieres, también puedes aventurarte en la ruta senderista que lleva hasta Balquhidder, a orillas del loch Voil, donde se encuentra la tumba del matrimonio. El paisaje te cautivará para siempre, con la cima del Beinn an t-Sidhean coronada de nieve, y, al final de la carretera, un tesoro glamping: una caravana de 1950 reconvertida en un alojamiento único y confortable en el que recalar, antes o después, de saborear la gastronomía del Monachyle Mhor Restaurant (mhor.net/monachyle-mhor-hotel/restaurant/).
Ahora te proponemos que pongas rumbo hacia Skye, la isla más famosa de las Hébridas, una isla que debe ocupar un lugar de honor en tu escapada navideña a la costa oeste escocesa. No dejes de deleitarte en los paisajes que verás a tu paso hacia esa romántica isla, como el valle de Glencoe o el castillo de Stalker, con las montañas coronadas de nieve.
Skye atesora paisajes deliciosos como los que contemplarás al discurrir por la península de Trotternish o al acercarte a la cascada Mealt Falls y Kilt Rock. También te quedarás con la boca abierta ante la belleza de la cordillera Cuillin o cuando contemples el castillo de Dunvegan, la residencia ancestral del clan MacLeod.
Sin olvidar su vibrante capital, la deliciosa población marinera de Portree. Con su coqueto puerto de casitas multicolor, es una parada obligada para una mañana de compras o para degustar el marisco fresco de estas aguas en alguno de sus restaurantes. Aunque no hay mejor gourmet temple en Skye, sobre todo en Navidad, que Kinloch Lodge (kinloch-lodge.co.uk). Claire y Godfrey Macdonald, sus propietarios, han preparado junto al chef del restaurante, Marcello Tully, un retablo de viandas para vivir en la mesa una Navidad especial. El mejor broche de oro para vivir una Escocia al más puro estilo scottish.
MÁS INFORMACIÓN
Turismo de Reino Unido, visitbritain.es; Turismo de Escocia, visitscotland.com/es y Luxury Scotland, luxuryscotland.co.uk