Una noche en una pared vertical a 100 metros del suelo
Hay multitud de hoteles espectaculares por su ubicación, otros por sus vistas y otros por la quietud que ofrece, al encontrarse en medio de la naturaleza. Pero para una noche increíble, Rab Riglos Suite conjuga estas tres características en un entorno sin igual, los Mallos de Riglos, a 45 kilómetros de Huesca. Una apuesta por lo único y exclusivo para los más aventureros. Esperamos que no tengas vértigo porque este hotel está en las alturas, literalmente.
Rab Riglos Suite permite la experiencia única de dormir en una de sus ‘habitaciones’ suspendidas en las paredes de los Mallos de Riglos gracias a hamacas de escalada de última tecnología y a expertos guías alpinos y escaladores profesionales.
Existen varios emplazamientos donde se sitúan las ‘habitaciones’, dependiendo de la experiencia del huésped. La habitación El Colorado es accesible para todos los públicos, por lo que cualquiera puede disfrutar de la experiencia.
Las hamacas son dobles, pudiendo montarse hasta dos por estancia. Así, la noche puede pasarse en solitario en el mayor de los silencios, en pareja disfrutando de las estrellas o con amigos compartiendo la aventura. También cuentan con una pequeña terraza para estirar las piernas.
Para respetar el entorno y a otros escaladores que quieran disfrutar de estas formaciones geológicas, que llegan a alcanzar los 245 metros de altura, las tiendas se desmontan cada día después de que se marchen los huéspedes.