REFUGIO DE OSOS
Cada otoño, robles, hayas y castaños visten de tonos dorados, ocres y rojos los agrestes paisajes de este espacio protegido como Reserva de la Biosfera que es uno de los últimos refugios del oso pardo, además de otros grandes mamíferos de los bosques del norte peninsular, como lobos, ciervos y urogallos. Fotos: Turismo de Asturias / Gonzalo Azumendi.