Helen Lindes y sus paisajes de Lanzarote
La modelo creció entre las piedras volcánicas y las espectaculares playas de su isla favorita, Lanzarote, donde vuelve en visitas relámpago.
Pocos saben que Helen Lindes nació en Girona, pero desde que se mudara con su familia a Lanzarote a los cinco años, las islas le han dejado una huella imborrable. Ella misma se siente canaria, y no pierde ocasión para promocionar su isla predilecta, aquella en la que pasó su infancia y su primera juventud.
Aunque está a punto de casarse en Mallorca con Rudy Fernández, la modelo se ha convertido en embajadora indiscutible de su isla. Helen conoce Lanzarote como la palma de su mano, y vuelve muy a menudo para reencontrarse con sus rincones y paisajes.
La modelo recomienda el sur de la isla para pasear por un paisaje único: árido y sencillo pero sobrecogedor. El negro de la lava solidificada contrasta con las higueras y las viñas protegidas por los zocos, que son construcciones rudimentarias de piedra. Si el cielo luce despejado, se pueden observar fácilmente desde la costa las islas vecinas (Fuerteventura e Isla de Lobos). Coronan el paisaje Las Montañas del Fuego, que pertenecen al Parque Nacional de Timanfaya, al oeste de la isla. El parque se extiende por los municipios de Tinajo y de Yaiza, y cuenta con el último volcán activo de la isla: el Islote de Hilario. Para los aficionados al senderismo, Timanfaya ofrece la "Ruta de los Volcanes", que abarca 14 kilómetros de caminata entre las sorprendentes "anomalía geotérmicas". Si el visitante prefiere un paseo un poco más relajado, puede optar por hacerlo a lomos de un camello.
En la ruta que nos marca Helen Lindes no puede faltar el Puerto del Carmen, principal atracción turística de la isla de Lanzarote y uno de los destinos más populares de las Islas Canarias. Situado en el municipio de Tías, a solo 10 minutos del aeropuerto, Puerto del Carmen se extiende por un litoral de más de 6 kilómetros de playas. Este idílico entorno natural lo completa una amplísima oferta de servicios y oportunidades de ocio, deporte y relax.
Para comer o cenar en Puerto del Carmen, Helen recomienda la zona de El Varadero en La Tiñosa y da tres nombres: La Cascada, Puerto Bahía y Cofradía de Pescadores. La Cascada divide sus instalaciones en dos ambientes: la taberna y el restaurante, cada uno con su carta, pero ambos de cocina internacional y moderna, con carnes y pescados a la brasa. Puerto Bahía es un local más clásico con una carta muy variada en marisco. La Cofradía de Pescadores destaca por su precio económico y alta calidad de sus platos sencillos.
Pero el restaurante favorito de Helen se llama Costa Azul, y se encuentra al sur de la isla, en el municipio de Yaiza, dentro del pequeño pueblo marinero de El Golfo. En primera línea de playa, el restaurante Costa Azul está especializado en todo tipo de pescados frescos y moluscos autóctonos. No pasa un verano sin que la modelo se siente a una de sus mesas, y sus dueños ya la saludan por su nombre.
Helen Lindes se deshace en elogios también hacia su playa favorita: la playa de Famara. Sus 6 kilómetros de largo se extienden por el noroeste de la isla, al abrigo de El Risco de Famara. En ella la modelo reconoce haber pasado horas de su infancia, jugando con la arena y aprendiendo a surfear. Helen recomienda la visita al pueblo marinero de La Caleta de Famara, cuyas casitas blancas le otorgan una pintoresca belleza. Como curiosidad, en La Caleta se rodaron algunas escenas de la película de Almodóvar Los abrazos rotos. Además, este pueblo sirve de punto de encuentro y reunión de surfistas. Aunque carece de hoteles, se pueden alquilar apartamentos y bungalows a buen precio.
Un alojamiento muy especial, fundado y regentado por un amigo de la familia de la modelo, es La Finca Arrieta. Este hotel "eco", también en el noroeste de Lanzarote, se levanta en una zona árida y totalmente aislada. Sus peculiares habitaciones imitan a las tiendas nómadas de las llanuras de Mongolia, los tradicionales yurts. Sus estructuras de tela y esqueleto de madera ofrecen todo tipo de comodidades a familias y a parejas. Las 15 estancias del complejo se abastecen de energías limpias y los huéspedes disfrutan también de la sala de ocio y lectura, las piscinas, la granja y la tienda ecológica.
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