EME CATEDRAL
Casi el noventa por ciento de todas las cofradías de Sevilla desfilan delante de este hotel, y eso dice mucho de su ubicación, en pleno centro de la carrera oficial (el recorrido obligado que hacen todas las hermandades). Ya sea desde sus elegantes habitaciones o desde su restaurante panorámico y bar La Terraza, un sofisticado entorno donde tomar uno de sus célebres cócteles, la catedral y la Giralda casi se pueden tocar.
LAS CASAS DEL REY DE BAEZA
Asomado también a la catedral, es otro de los hoteles que cuenta con una de las terrazas con mejores vistas de la ciudad. Está abierta a todo el público, no solo a los alojados, y es un lugar para disfrutar de un exclusivo aperitivo, pero también uno de esos lugares de encuentro donde rematar la velada con lo mejorcito de la coctelería internacional.
LA TERRAZA DEL INGLATERRA
Refinado y elegante, el hotel Inglaterra es un clásico en la ciudad. Lleva ahí, en la Plaza Nueva, frente al Ayuntamiento, desde 1857. Pero si señorial es el hotel, atractiva es La Terraza, un referente de las noches sevillanas, ya sea para contemplar el skyline de la ciudad desde su barandilla de cristal, disfrutar de sus mojitos y gin tonics o, en Semana Santa, contemplar las procesiones que, allá abajo, desfilan ante los ojos.
TERRAZA AZAHAR
En lo más alto de esta preciosa casa andaluza tradicional situada en la plaza Jesús de la Redención, un nombre de lo más propio para el momento, surge una azotea privilegiada sobre el casco antiguo de Sevilla con el sugerente nombre de Azahar. En ella, a cierta altura, se puede tapear o relajarse en su zona chill out mientras se contempla el atardecer. Una terraza para desconectar de todo o todo lo contrario, quedarse embebido ante el desfile, desde lo más alto, de sus pasos procesionales.
EL MIRADOR DE SEVILLA
A partir de una casa palacio del siglo XVIII se fue armando este hotel emplazado a unos pasos de la catedral y de La Maestranza, será por eso que gusta tanto a los toreros. Lo corona ‘El Mirador de Sevilla’, el más panorámico de sus dos restaurantes, donde cenar saboreando una cocina creativa mientras se contempla una vista de la catedral y la Giralda iluminadas en la noche sevillana.