Los alojamientos más singulares del planeta
Una iglú, una yurta en Mongolia, una palloza gallega, una suite en un palafito... Una colección de hoteles y viviendas que van de lo más arcaico o lo más sorprendente y curioso.
Gustos hay para todos, pues hay quienes prefieren lo más elemental a lo más original, o al revés. Seas como seas, probablemente algunos de estos espacios podrían ser de tu agrado. Se acabó el alojamiento anodino y sin personalidad. Ahora lo que se lleva es la excepción, que apela a la sorpresa del huésped y que, más que un lugar de paso, se convierten en un destino en sí mismos. En esta galería te mostramos una selección que, por unas cosas o por otras, nos han parecido muy singulares.