El mundo de “clean beauty” es muy extenso y al mismo tiempo muy limitado. Aunque hoy en día existen mil ingredientes limpios y muchas fórmulas cruelty-free, la mayoría de la oferta sigue sin tener esta certificación. ¿Por qué será?
En un mundo obsesionado con las fórmulas limpias, mucho se dice de los productos orgánicos, así como ingredientes “dañinos” que entran bajo las categorías de parabenos y las siliconas, pero ¿qué pasaría si los quitamos por completo? ¿Los productos dejan de funcionar?
¿Qué son los parabenos?
Los parabenos son una serie de químicos que se utilizan para prolongar las fórmulas de lo que utilizamos en nuestro día a día sin que estas desarrollen ningún tipo de bacterias dañinas para la salud. Básicamente, su función es alargar la duración y la vida útil de un producto.
Si analizas los productos de tu rutina diaria (cuidado capilar, skincare y maquillaje) seguramente te darás cuenta que sus fórmulas cuentan con parabenos y esto en realidad no es algo totalmente malo, ya que el uso de estos determina la caducidad de la fórmula en sí.
Existen muchos mitos alrededor de los parabenos, muchos creen que provocan cáncer, infertilidad o irritación, pero la realidad es que no está comprobado. El único efecto negativo (comprobado hasta ahora) que se ha visto que dejen este tipo de ingredientes son alergias y reacciones en la piel en algunas personas.
¿Por qué evitarlos y cómo identificarlos?
Evitar los parabenos por completo es casi imposible. Sin embargo, ya hay alternativas para conservar tus productos. Puedes revisar las fórmulas de los productos que incluyes en tu rutina para analizar su composición y así apostar por aquellas con un bajo contenido de químicos.
Procura evitar fórmulas con ingredientes como metilparabeno, propilparabeno, etilparabeno y butilparabeno. Un gran tip es evitar todos aquellos ingredientes que cuyo nombre no puedas pronunciar. Una buena noticia es que muchos productos hoy incluyen la insignia y certificación de “clean”, misma que te asegura tu producto esta libre de estos ingredientes.
Todo tipo de conservadores tiene su lado no tan positivo. Y de la misma manera, al incluir productos libres de conservadores, es importante estar al pendiente de las fechas de caducidad y el tiempo de vida de los mismos, ya que pueden generar bacterias dañinas para la salud, las cuales se manifiestan como cambios en aroma, color y textura. Si notas cambios en alguna de estas características, probablemente sea momento de deshacerse del mismo.