Cameron Diaz confiesa que dejó atrás la presión de la belleza tras su partida de Hollywood

Aunque Cameron Diaz vivió la presión de los estereotipos de belleza por mucho tiempo, ahora está más feliz y tranquila que nunca lejos de estos, y sobre todo de Hollywood. La estadounidense de 49 años se sinceró como nunca sobre la tensión que vivió en su carrera como actriz, admitiendo que ahora, su apariencia es lo que menos le importa.

Aunque Cameron Diaz vivió la presión de los estereotipos de belleza por mucho tiempo, ahora está más feliz y tranquila que nunca lejos de estos, y sobre todo de Hollywood. La estadounidense de 49 años se sinceró como nunca sobre la tensión que vivió en su carrera como actriz, admitiendo que ahora, su apariencia es lo que menos le importa.

A pesar de ser una de las figuras más populares y queridas, la famosa confesó que se encuentra más tranquila lejos de los reflectores. "Otra vez, regreso a la trampa de todo, especialmente en nuestra sociedad, como lo que valoramos, lo que creemos que es importante. Mira, si es importante para ti, está bien [...] Soy una víctima absoluta de la cosificación social y la explotación a la que las mujeres están sujetas. Yo caí en todas de ellas", contó a Michelle Visage, concursante de RuPaul's Drag Race en su podcast, Rule Breakers de la BBC.

Cameron confesó que la presión en Hollywood la llevó a ser autocrítica con su apariencia, algo que aprendió a soltar al abandonar su carrera.

"Es difícil no hacerlo, es difícil no mirarte a ti misma y juzgarte comparándote con otros estándares de belleza, y pienso que esa es una de las cosas más grandes, los últimos 8 años, chica soy como salvaje, soy como un animal salvaje, soy una bestia [...] Simplemente empiezas a alejarte de eso. Y dices ’¿Por qué estoy aquí sentada siendo tan mala conmigo? Mi cuerpo es fuerte. ¿Por qué voy a hablarle mal? ¿Por qué voy a tratarlo mal cuando me ha llevado tan lejos?", agregó en el podcast.

La famosa admitió que alejarse de la actuación fue de gran ayuda y ahora tiene otras prioridades en las que para nada figura su aspecto o el cuidado de éste. "No me importa. Literalmente lo último en lo que pienso en mi día a día.... como tal vez no todo el día, es cómo luzco [...] No, no, literalmente no hago nada. Nunca me lavo mi cara", contó.

Cameron también expresó que tiene un sinfín de productos en su tocador valorados en miles de pesos, sin embargo, su rutina de belleza es casi inexistente, enfocándose más en su vino, Avaline, en su matrimonio con Benji Madden y en su hija Raddix.

"Dos vece al mes si tengo suerte. Digo 'Ah, debería de ponerme esto. Una vez funciona, ¿verdad?' ¿Es lo único que tengo que hacer? Simplemente no estoy en ese lugar en este momento en el que pongo alguna energía", dijo a Michelle Visage.

La estadounidense se mostró emocionada por su cumpleaños número 50, agradeciendo su fortaleza y todas las enseñanzas que ha aprendido en el camino.

"¿No es increíble? No puedo esperar a cumplirlos. ¡Ahora sé más; he hecho tantas cosas!", finalizó en el podcast Rule Breakers.