No importa qué tendencia sea la favorita del momento... si algo nunca pasará de moda, eso es el blush. Lo cierto es que, habiendo un sinfín de colores a nuestra disposición, a veces es difícil escoger el indicado... un dilema que ya tiene solución y lo único que se debe de hacer es compararlo con tu boca (sí, así como lo leíste).
MÁS NOTICIAS RELACIONADAS:
- ¿El Aloe Vera funciona? Los pros y los contras según los expertos
- Los mejores trucos para eliminar las cicatrices de acné según los expertos
Las reglas para encontrar el rubor perfecto
Lo primero que se debe de hacer es elegir un producto en un tono similar al de tu piel (que suele ser frío, neutral y cálido), y luego poner en práctica la regla que consiste en aplicar el rubor que sea de tu agrado y compararlo con el color de tus labios.
"Pruébalo en las manzanas de tu mejilla para ver si 'choca' con el color de tus labios al natural, o con tu lipstick. Si se ve raro o poco natural, entonces debes elegir otro tono", comentó el maquillista Daniel Martin a Allure.
Todo cuenta, y elegir el blush perfecto también depende de tu tipo de piel. Si tu cutis es seco, elige unos hechos a base de minerales o con efecto glowy, pero si te inclinas más a la piel grasa, los expertos recomiendan los productos mate y no comedogénicos, esto para evitar los granitos
Si tu piel es clara (o pálida), los tonos perfectos para ti son los rosas pastel o muy tenues. "Los tonos durazno y rosa tenue son buenas opciones para la piel más pálida, especialmente si quieres lograr un efecto más sutil. Pero si quieres destacar entonces elige uno en ciruela o coral, los dos lucen muy bien", comentó la maquillista Amanda Bell a Elle.
Los tonos de piel es medio, los expertos tienen una buena noticia pues casi cualquier color te va muy bien, sobre todo los durazno y los cereza. Incluso puedes comprar una paleta de rubores y crear tus propios tonos. "Los tonos de piel medios tienden a ser más bronceados o con tonos cálidos. Este tipo de complexión se ve íncreíble con una mezcla de durazno y rosas", comentó la maquillista Cher Webb a Byrdie.
Si tu tono de piel es olivo, lo ideal es elegir rubores que van más al lado naranja, durazno, dorado... o incluso puedes optar por un bronceador. "Los rubores en tonos fríos pueden verse muy raros, pero usar uno en durazno cálido le dará a la piel oliva mucho brillo", expresó la maquillista Ashleigh Ciucci a Allure. El rosa clásico puede darle darle mucha más vivacidad y color a este tono, el cual tiende a verse "amarillento", como lo afirman los expertos.
Los tonos de piel oscuros resaltan con rubores en color coral, rojo o cereza... los cuales debes elegir en rangos fuertes y cálidos. "Es importante seguir la constante de lo cálido cuanto estás trabajando una piel oscura porque si te vas a lo frío, se ve opaco. Un tono ladrillo es una versión más roja del color uva. Tiende a darle un poco más de punch", agregó Ciucci a Allure.
Lo mejor es que el blush no solo le da un toque fresco y radiante a tu apariencia, sino que incluso puede crear un efecto lifting y rejuvenecedor si lo aplicas de la forma correcta.