A pesar de que la princesa Diana perdió la vida hace más de 23 años, su legado aún perdura y se mantiene como todo un ícono del estilo y la elegancia. Desde sus característicos outfits, su maquillaje siempre impecable, hasta sus peinados, prevalecen actualmente en el mundo de la moda. Pero… ¿cuál era su perfume preferido? HELLO! consultó el sitio Celebrity Fragance Guide y encontró que la madre del príncipe William y el príncipe Harry tenía varias fragancias preferidas, las cuales aún puedes adquirir actualmente, como Bluebell de Penhaligon’s.
¿Te interesa la fragancia de la princesa de Gales? El precio del perfume es de aproximadamente $151 dólares y esta descrita como un aroma fresco y afrutado con notas cítricas, mezcladas con esencias de lirio, jazmín y rosa, además de una gota de clavo y canela. Esta increíble mezcla viene en una icónica botella con un listón azul pastel, el cual le dará un toque de feminidad a tu tocador.
Otras de las fragancias listadas en el sitio web como las favoritas de ‘Lady Di’ son: Diorissimo (Christian Dior), Reverie (Gloria Vanderbilt) y 24 Faubourg (Hermès). Así que si deseas evocar el estilo de la princesa, ya sabes qué fragancias adquirir.
En cuanto a su maquillaje, la princesa Diana era toda una entusiasta. En 2017, Mary Greenwell, quien maquilló a la royal en varias ocasiones, conversó con Lisa Eldridge, directora creativa de Lancôme. En la conversación, la cual está en el canal de YouTube de Eldridge, Mary comentó que el look de la princesa era sencillo y destacó las cualidades de su rostro.
“Tuve el privilegio de maquillarla durante unos años antes de su prematura muerte. Era un ícono. Su maquillaje era muy, muy simple”, comentó la experta en belleza, quien añadió que la princesa disfrutaba de que le aplicaran maquillaje. “La princesa Diana tenía unas pestañas increíbles ... Nunca habría usado pestañas postizas con ella”, señaló.
También explicó que la realeza disfrutaba mucho de que la mimaran. “A la princesa le encantaba que le maquillaran. Para ella, era un momento en el que siempre podía relajarse. Siempre era encantador conversar con ella”.