Si algo distinguió a la princesa Diana a lo largo de su vida , fue su impecable estilo para vestir, al punto de que, con el paso del tiempo, se convirtió en un ícono de la moda. Al formar parte de la realeza, la llamada ‘Reina de Corazones’ tenía acceso al joyero de la Familia Real. Aunque algunas de estas piezas no eran suyas, la princesa tenía permiso de lucirlas en concesión para eventos especiales, bailes reales, cenas con mandatarios, entre otras ocasiones.
Diamantes, rubíes, perlas, esmeraldas, zafiros y más son algunas de las piedras preciosas que Diana de Gales solía lucir. Tenemos para ti algunas de las piezas más icónicas.
Anillo de compromiso de zafiro
La joya está formada por un fabuloso zafiro azul de 18 quilates, rodeado por 14 pequeños diamantes. Este mismo anillo fue el que el príncipe Carlos entregó a Lady Diana Spencer en su pedida de mano en 1981.
Cuando los Duques de Cambridge anunciaron su compromiso en noviembre de 2010, William se refirió a la alhaja de su madre como algo muy simbólico: “Este anillo es muy especial para mí, es una manera de asegurarme de que mi madre no se pierda del momento y la emoción por la que estamos pasando en estos momentos”.
Tiara Spencer
Esta es otra de las célebres joyas que la princesa Diana lució. La joven Diana la usó en el día de su boda con el príncipe Carlos, cuando tenía 20 años. La tiara, que pertenece a la familia Spencer, está hecha de oro con flores en forma de estrellas y está decorada con diamantes de diferentes tamaños, destacando cinco al centro; uno de ellos de mayor tamaño y envuelto con un corazón.
Tiara Cambridge Lover‘s Knot
La tiara Cambridge Lover‘s Knot Tiara o la tiara de la reina Mary es, sin duda, una de las joyas más emblemáticas de la princesa Diana. La corona fue un regalo de bodas de la reina Isabel II a la joven Diana.
Tras su divorcio del príncipe Carlos en 1996, la joya regresó a las arcas de la Reina. La corona está compuesta por 19 arcos de diamantes que tienen a su vez perlas en forma de gota. Esta corona ha sido utilizada por Kate Middleton en varias ocasiones, como en el Remembrance Day de 2016 y 2015.
Choker Art Deco de esmeraldas
Esta gargantilla fue creada por la reina María (abuela de la reina Isabel II) y está compuesta por diamantes y esmeraldas. Diana solía utilizarlo en varios eventos. La reina Isabel lo ha lucido en escasas ocasiones, sin embargo Diana era una gran admiradora de la joya y le daba usos muy originales, pues además de gargantilla o choker, lo convertía en diadema.
El choker como una diadema
En esta fotografía al lado del príncipe Carlos, Diana aparece utilizando el choker de esmeraldas como una diadema. La princesa lo utilizó en un baile especial en su honor en su viaje oficial por Australia, en octubre de 1985.
Conjunto ‘Lago de los Cisnes’
En una de sus últimas apariciones públicas antes de su deceso, la princesa acudió a una función especial del Lago de los Cisnes en el Royal Albert Hall en Londres en junio de 1997. La madre de William y Harry lució un collar de diamantes y perlas, el cual pronto fue conocido como el collar del ‘Lago de los Cisnes’.
El collar era parte de un juego completo, pero quedó inconcluso, pues le faltaban los pendientes. Diana murió antes de que se completara el trabajo de joyería. Esta joya no pertenecía a la Familia Real y según la revista People, fue vendida en una subasta después del deceso de la princesa, en 1999. El juego consiste en un collar y sus aretes hechos en diamantes y perlas del Mar del Sur diseñado con la ayuda del Joyero de la Corona, Garrard. El conocido como Swan Lake Suit fue realizado con cinco de las perlas favoritas de Diana, así como 178 diamantes. Después de usar el collar, Diana lo devolvió a Garrard para que se pudiera trabajar el en forma conjunta, pero nunca pudo volver por él.
Saudi Suite
Este juego de impresionantes zafiros fue un regalo de bodas de parte del príncipe Fahd de Arabia Saudita a la princesa Diana cuando se casó con el príncipe Carlos. El set estaba formado por un collar de diamantes con un gran zafiro azul, un reloj con zafiros y diamantes, un brazalete, un par de pendientes y un anillo.
De su inspiración
Como amante del diseño y la joyería, Diana fue modificando las joyas a su gusto y creó nuevas piezas como otro par de aretes y un choker con gamuza azul que en algunas ocasiones usaba como diadema.
Los otros pendientes de la Saudi Suite
Estos pendientes de zafiros también forman parte del juego, y algunas piezas están en poder del príncipe William, quien a su vez obsequió los aretes de zafiros a su esposa, Kate Middleton.
Los otros pendientes de la Saudi Suite
Estos pendientes de zafiros también forman parte del juego, y algunas piezas están en poder del príncipe William, quien a su vez obsequió los aretes de zafiros a su esposa, Kate Middleton.
Collar de perlas con zafiro
Este collar formado por siete cadenas de perlas con un gran zafiro era de la Reina Madre. A principios de su matrimonio, la princesa Diana solía llevar la piedra preciosa como un prendedor y poco después decidió llevarlo en una gargantilla.
Los zafiros, sus preferidos
Al parecer, la princesa Diana tenía una gran pasión por los zafiros. En su joyero también había piezas como esta gargantilla de diamantes y zafiros rondelle, formado a base de pequeños cortes por toda la pieza.
El otro anillo especial de Diana
Su anillo de compromiso de zafiro no era la única sortija en su impresionante joyero. Diana de Gales también poseía un espectacular anillo con una aguamarina en corte esmeralda con pequeños diamantes, el cual hacía juego con un brazalete de perlas. Este anillo fue el mismo que Meghan Markle lució el día de su boda, en mayo de 2018.
Regalos de Oriente
El sultán Qaboos de Omán regaló a la princesa Diana este juego de pendientes y collar de diamantes.
Las perlas
En su día a día, la princesa Diana solía llevar discretos collares y pendientes de perlas. Sin duda, este es uno de sus sellos más icónicos.
Broche con una esmeralda en forma de gota
El broche Prince Of Wales Feathers, conocido por las tres plumas en diamantes que tiene al centro, fue un regalo de bodas para la princesa Alexandra, quien contrajo matrimonio con el Rey Eduardo VII, en marzo de 1963.
La joya es un óvalo formado por 18 diamantes y pequeñas esmeraldas. Tras su compromiso con el príncipe Carlos, Diana recibió esta pieza de parte de la reina Madre. Fue precisamente la joven princesa quien le agregó una esmeralda en forma de gota. También suele usarse como broche.