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Kate Middleton ha recibido el alta hospitalaria luego de permanecer 14 días en un hospital privado en Londres, a donde fue ingresada el pasado 16 de enero para someterse a una cirugía abdominal programada. Así lo ha informado el propio Palacio de Kensington en un comunicado oficial este 29 de enero, detallando que la princesa de Gales ya se encuentra en su casa de Windsor, donde continuará con su recuperación.
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La salida del hospital de la esposa del príncipe William se dio tal como se había anticipado, pues desde que se informó de su operación se dijo que permanecería internada entre 10 y 14 días antes de regresar a casa. “La princesa de Gales ha regresado a su casa en Windsor para continuar recuperándose de la cirugía”, indica el comunicado.
El Palacio de Kensington ha querido destacar los avances de Kate en su recuperación. “Ella está teniendo buenos progresos”, enfatiza. Esta afirmación viene a abonar a aquellas versiones de prensa que señalan que la princesa está aprovechando el tiempo fuera de la agenda oficial para leer los cientos de cartas y tarjetas que ha recibido de todo el mundo con buenos deseos.
“El Príncipe y la Princesa desean agradecer enormemente a todo el equipo de The London Clinic, especialmente al dedicado personal de enfermería, por la atención brindada. La familia Gales sigue agradecida por los buenos deseos que han recibido de todo el mundo”, agrega el comunicado.
Sin embargo, aunque Kate ya ha recibido el alta hospitalaria, lo más probable es que pasará un largo rato antes de que reaparezca en la vida pública, pues anteriormente el Palacio de Kensignton había señalado que “según el consejo médico actual, es poco probable que regrese a sus funciones públicas hasta después de Pascua”. Ante la ola de especulaciones que surgieron, la institución tuvo que cofirmar a varios medios británicos que la operación de la princesa no estaba relacionada con un problema “canceroso” y que tras la exitosa cirugía se encontraba bien.
El motivo de la discreción sobre la hospitalización de Kate
La discreción que se manejó durante la hospitalización de la princesa de Gales llamó mucho la atención, y más debido a que en esta ocasión se les prohibió acampar a las afuera de The London Clinic. Sin embargo, de acuerdo con algunos, esta decisión pudo deberse no solo al caso de Kate.
“Cuando nacieron los niños reales, fue un momento de celebración y había un acuerdo controlado”, explicó Emily Nash, la editora de realeza de HELLO!. “Esta es una situación diferente a la de los nacimientos de los niños reales, y hay que considerar la privacidad de otros pacientes que entran y salen para recibir tratamiento, así como la de la princesa”, agregó.