A pesar de que en los últimos días, el Príncipe Harry y Meghan Markle se han visto envueltos en una serie de reportes -sobre su supuesta no invitación al cumpleaños 75 de Carlos III-, parece que la pareja continúa con su agenda pública, curiosamente, muy ligada a lo que hacían de vuelta en casa. Si hace unas semanas, aparecían en conjunto en Nueva York con un evento organizado por su fundación Archewell en torno al Día Internacional de la Salud Mental, después de haberse tomado unos días de vacaciones en el Caribe y de reaparecer a su vuelta, tanto en el Gran Premio de Austin -Harry en solitario- y después en el concierto de Katy Perry, al que volaron con un grupo de celebrities, ahora ha sido a través de su sitio web que se ha sabido que han tenido una nueva aparición. En una ocasión ligada a una de las causas más cercanas al corazón del Príncipe Harry, la pareja se reunió en San Diego con un grupo de veteranos de guerra y sus familias. Camp Pendleton fue el escenario de este encuentro en el que tuvieron la oportunidad de conocer más el progama de mentores para hijos de militares Operation Bigs, en el que se busca que los chicos puedan recibir guía de otras personas que han pasado por sus mismas experiencias. A pesar de que éste es el compromiso que se ha reportado directamente en su sitio web, se sabe que durante su estancia en San Diego, la pareja también fue la encargada de inaugurar The Warrior Fitness Program West Coast Facility, un centro de rehabilitación física de la Navy Seal Foundation, en la que se les vio en una faceta más formal. Por supuesto, no han faltado los comentarios que apuntan a que estas apariciones van muy de la mano con lo que la pareja hacía en sus papeles oficiales en Reino Unido, antes de que decidieran separarse del Palacio.
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Durante la aparición que fue documentada en una serie de imágenes en su sitio web, se puede ver una versión estilosa, pero más casual de Meghan. A pesar de que la pieza clave de este look podría parecer una sencilla por tratarse de un cardigan en azul marino, el toque especial eran las amapolas rojas bordadas en él. Se trata de un diseño de Carolina Herrera, que aunque se encuentra agotado en la mayoría de las tiendas en línea, en algunas todavía se puede conseguir por 1,948 libras esterlinas (alrededor de $41,858 pesos mexicanos). Ha de recordarse que en Reino Unido, las amapolas son el símbolo del recuerdo en honor a las personas que han perdido la vida en servicio y, precisamente, en esta temporada del año, las personas públicas llevan un broche con esta flor para hacer un homenaje a quienes han hecho lo que se considera el ‘máximo sacrificio’.
En esta ocasión, ha combinado el suéter con una falda de lápiz modelo Rafferty de la marca Lafayette 148 New York. El diseño es de lo más sobrio y sencillo con corte midi y en color negro. Aunque también esta pieza se encuentra agotada, pues es de hace varias temporadas, en su momento tenía un precio de 398 dólares (aproximadamente $6,959 pesos mexicanos). La primera vez que se vio a Meghan llevándola fue en septiembre del 2021 durante su viaje a Nueva York, y este año la ha llevado en tres ocasiones distintas.
La versión formal de Meghan en los Invictus Games
La versión sobria de Meghan
Si para el encuentro con los veteranos, se le veía con esta sencilla combinación, durante la apertura del centro de rehabilitación física, la esposa del Príncipe Harry se decantó por una versión más sobria. Al igual que el resto de las royals, Meghan también ha aprovechado el otoño para llevar un traje de dos piezas, ella ha elegido el modelo Mulberry de Giorgio Armani en negro. El blazer estilizado con solapas amplias y un énfasis en la cintura hecho en seda negra tiene un precio de 3,195 dólares (aproximadamente $55,854 pesos mexicanos); mientras que los pantalones a juego con un corte palazzo -las piernas un poco más amplias hacia los tobillos-, pueden conseguirse por 1,165 dólares (algo así como $20,366 pesos mexicanos).