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Apenas unos días después de su fugaz visita a Reino Unido por la coronación de su padre, el príncipe Harry ha recibido buenas noticias. El grupo editorial Mirror Group Newspapers, propietario de tabloides británicos como Daily Mirror, Sunday Mirror, Daily Express, se ha disculpado con el duque de Sussex en una audiencia celebrada en el Tribunal Superior de Justicia. Esta disculpa se ha dado en el marco del juicio que el hijo menor del rey Carlos III inició junto a otras personalidades internacionales por obtención ilegal de información mediante escuchas telefónicas por parte de algunos de sus reporteros.
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Harry había asegurado ser víctima de espionaje por parte del Daily Mirror entre 1995 y 2011, y que dicho medio no sólo había recopilado de forma ilegal información de él, sino también de su padre, su madre, Diana de Gales, e incluso de algunas de sus exnovias. El duque admitió que esta situación le causaba “una gran angustia”, así como el sentimiento de inseguridad tanto para él como para su círculo cercano.
“MGN se disculpa sin reservas por todos esos casos de recopilación de información ilegal y asegura a los demandantes que tal conducta nunca se repetirá”, ha expresado la empresa por medio de su representante legal Andrew Green, admitiendo haber recurrido a los servicios de un investigador privado para obtener información.
“MGN se disculpa sin reservas y acepta que el duque de Sussex tiene derecho a una compensación apropiada por ello”, ha señalado en el caso específico del royal. Green ha explicado además que la disculpa no se produce con el objetivo de reducir los daños sino porque “nunca debió haber ocurrido tal conducta”.
De acuerdo con Sky News, el abogado de Harry, David Sherborne, señala que la recopilación de información por vías ilegales es algo habitual para los medios de dicho grupo editorial. “Como escolar y en su etapa con el Ejército, y como joven adulto se le ha sometido a los métodos más intrusivos de obtención de su información personal”, ha indicado.
Además, Sherborne opinó que todas estas prácticas ilegales fueron aprobadas por los jefes de las publicaciones, incluido el periodista Piers Morgan (con quien tuvo su propia batalla legal Meghan Markle, esposa de Harry), pues aparentemente era un riesgo que bien valía la pena.
El abogado del duque de Sussex aseguró en un texto presentado en el Tribunal que su representado “experimentó una actividad telefónica y relacionada con los medios inusual que es consistente ahora en retrospectiva, pero en ese momento insospechada, con el acceso no autorizado a sus correos de voz y otra recopilación de información ilegal”. Además, dijo que Harry recibía llamadas a diario de números desconocidos, situación que planteó un riesgo de seguridad que afectó a toda la Familia Real.
Podría regresar pronto a Londres
Este juicio contra dichos medios británicos, el cual parece pintar bien para Harry, podría implicar su posible regreso a su país natal tras la coronación de su padre. En marzo, el hermano menor del príncipe William acudió a una audiencia preliminar y ahora no se descarta que, conforme avance el proceso legal, acuda nuevamente al Tribunal Superior de Londres para presentar sus pruebas y dar su testimonio. Aunque no hay nada claro al respecto, lo más seguro es que en este caso, el duque de Sussex viajaría sin Meghan y sus hijos.