Amalia de Holanda sigue sorprendiendo con sus looks por el Caribe

Amalia de Holanda sigue recorriendo el Caribe en su primer viaje oficial en su papel de heredera al trono. Con 19 años, la Princesa ha tomado nuevas responsabilidades, entre las que este viaje destaca como uno de sus más grandes pasos en su carrera hacia la corona. Si hace unos días repasábamos los primeros looks con los que la primogénita de Máxima y Guillermo Alejandro, Reyes de los Países Bajos, esta vez retomamos una de las maletas más coloridas y prácticas que hemos visto cuando de royals se trata. Gracias a su corta edad, Amalia se ha dado licencias cuando de su guardarropa se trata, siendo práctica y repitiendo la fórmula con la que se siente cómoda, eso sí, demostrando que es hija de su madre, llevando los colores del arcoiris tanto en su ropa como en sus accesorios. Repasa con nosotros los nuevos looks que hemos visto en la maleta de Amalia.

Los primeros looks

A su llegada al aeropuerto de Bonaire se vio a Amalia, siguiendo los pasos de su estilosa madre en un wrap dress modelo Tilly de Diane Von Furstenberg en azul con estampados en verde, que aunque se encuentra agotado en la mayoría de las tiendas, se podía conseguir por un precio original de 607 dólares (alrededor de $11,297 pesos mexicanos). Lo combinó con unas alpargatas modelo Tasha de Asos, con un precio de 30 libras esterlinas (solamente $680 pesos mexicanos). El bolso se lo habíamos visto antes a su madre, se trata del clutch Jige de Hermes, mientras que los lentes eran el modelo 08 Havana de Chimi. En cuanto a complementos lució unos aretes -que también le habíamos visto a Máxima- de la colección de Miriam de Hungría y un collar que ya había lucido antes de Marianna Lemos.

Durante su viaje de Aruba a Curazao a bordo de un barco de la armada local, la Princesa lució juego con el traje Massimo Dutti de su madre, una blusa roja con pantalones lino en marfil, que combinó con sus sandalias de Gianvito Rossi, modelo Versilia 100, y el collar de dijes que Marianna Lemos que se le ha visto llevando a lo largo del viaje.

Manteniendo la vibrante paleta de colores, en su visita a Willemstad -capital de Curazao-, la Princesa lució una blusa estampada de inspiración boho modelo Kileda de Isabel Marant, que se puede conseguir por 450 euros en otro color en la página de la firma (alrededor de $9,131 pesos mexicanos), que combinó con unos pantalones de vestir color carmín. En cuanto a complementos, llevó un clutch de mezclilla de la firma Natan que pertenece al clóset de su madre, sus lentes Chimi, el brazalete Clic H de Hermes, los aretes Les Bonbons de la firma Rebecca de Ravenel con un precio de 295 dólares (algo así como $5,595 pesos mexicanos) y sus tacones Gianvito Rossi modelo 85.

A su paso por Otrabanda en Curazao, la Princesa mostró una versión más formal en un maxidress de transparencias con estampado floral de LaDress, modelo Naomi, que ya le habíamos visto antes. En esta ocasión lo combinó con las sandalias de tacón con diseño modelo Filipa de Schutz, que tienen un precio de $3,100 pesos mexicanos y un colorido bolso en verde modelo Le Bambino de Jacquemus. En cuanto a joyería, repitió su brazalete Hermes y el collar de Marianna Lemos.

En uno de los días de mayor protagonismo de la Princesa, cuando tuvo oportunidad de participar en la liberación de tortugas, Amalia lució un vestido estampado en azul de Zara combinado con sus tenis de Veja modelo V-12. En esta ocasión se le vio estrenando un bolso de paja de la diseñadora Themis Zouganeli de 360 euros (aproximadamente $7,302 pesos mexicanos), así como un sombrero fedora modelo Fiona de House of Ord, de 74.99 euros (alrededor de $1,521 pesos mexicanos). Una vez más, llevó sus lentes Prada, así como su joyería de Hermes y Marianna Lemos.

Para su noche de carnaval, en la que se le vio mostrando sus mejores pasos junto a sus padres por las calles de Curazao, la Princesa llevó un vestido estilo kaftan en estampados verde menta modelo Collier de la firma Essentiel Antwerp, que se puede conseguir por 390 libras esterlinas (algo así como $8,880 pesos mexicanos).

A su llegada a la isla de San Martín, la Princesa Amalia se dejó ver en su versión más formal, luciendo un traje de lino en color paja de la firma de cabecera de su madre, Natan. Este look lo combinó con una blusa modelo Tobago de la firma Vanessa Bruno, que en algunas tiendas digitales puede conseguirse en rebaja. La Princesa Heredera complementó estas piezas con sus tacones Gianvito Rossi, y los accesorios que no ha abandonado durante este viaje.

Durante su visita por las calles de San Martín, la Princesa fue vista llevando el maxidress floral modelo Erica de Diane Von Furstenberg, que contrastó con su bolso Le Bambino de Jacquemus. Sacando el máximo provecho a su maleta, repitió las sandalias Gianvito Rossi, los lentes Chimi, así como su joyería, agregando los aretes Empire de la firma SuperTrash, que antes le habíamos visto a Máxima.

En su segundo día de San Martín, se ha visto a la Familia Real en el Fuerte Amsterdam. Para esta visita, Amalia llevó una blusa estampada con motivos geométricos, combinada con unos pantalones azul marino. Una vez más, ha lucido sus lentes Chimi y sus tenis Veja.

El inicio del viaje

Con sus 19 años, a la Princesa Amalia de Holanda le han llegado nuevas responsabilidades y oportunidades. Como heredera al trono, la primogénita de Máxima y Guillermo Alejandro de los Países Bajos ha comenzado a tomar un papel protagónico que se ha visto marcado por algunas situaciones. Algunas de ellas muy gratas, como su reciente debut en los viajes oficiales de la Familia Real, y otros más bien preocupantes, como las amenazas que ha recibido a su seguridad. Dejando de lado los problemas que esto ha conllevado en sus primeros años de universidad, Amalia ha realizado este primer viaje llena de ilusión, dispuesta a participar en todo tipo de actividades y regalando enormes sonrisas a todas las personas que ha conocido en su paso por el Caribe. Por supuesto, este viaje también ha sido una oportunidad para conocer más de la Princesa, quien ha dado muestra de su estilo a través de todos los looks que ha presentado durante la visita.

Los primeros looks

A su llegada al aeropuerto de Bonaire se vio a Amalia, siguiendo los pasos de su estilosa madre en un wrap dress modelo Tilly de Diane Von Furstenberg en azul con estampados en verde, que aunque se encuentra agotado en la mayoría de las tiendas, se podía conseguir por un precio original de 607 dólares (alrededor de $11,297 pesos mexicanos). Lo combinó con unas alpargatas modelo Tasha de Asos, con un precio de 30 libras esterlinas (solamente $680 pesos mexicanos). El bolso se lo habíamos visto antes a su madre, se trata del clutch Jige de Hermes, mientras que los lentes eran el modelo 08 Havana de Chimi. En cuanto a complementos lució unos aretes -que también le habíamos visto a Máxima- de la colección de Miriam de Hungría y un collar que ya había lucido antes de Marianna Lemos.

En su segunda aparición en este país insular de los Países Bajos, se vio a Amalia luciendo un vaporoso vestido de Natan, la firma de cabecera de su madre, que combinó elegantemente con unos tacones de la firma favorita de las royals como la Princesa de Gales, Gianvito Rossi. En esta ocasión se le vio estrenar un bolso modelo Micro Porter de Marina Raphael que se puede conseguir por 850 euros (aproximadamente $17,253 pesos mexicanos). La Princesa repitió sus estilosos lentes de Chimi y los combinó con unos aretes que antes se le habían visto a su madre de Ole Lynggaard -firma danesa-, además de un brazalete Clic H de 660 dólares (alrededor de $12,278 pesos mexicanos). Más tarde, al visitar la playa, la Princesa cambió los tacones por los tenis favoritos de Kate, unos Veja que originalmente cuestan $3,012 pesos mexicanos.

Por la noche se vio a la jovencita poner un poco de color en su maleta, con un vestido floral en amarillo de Ralph Lauren, que aunque ya se encuentra completamente agotado, tenía un precio de 319 libras esterlinas (algo así como $7,291 pesos mexicanos). De forma estilosa, llevó un saco blanco sobre los hombros y un bolso modelo Moneypenny de Sophie Habsburg directo del clóset de Máxima. Esta vez lució unas alpargatas modelo Tula de Asos de 43 dólares (casi $800 pesos mexicanos) y en cuanto a joyería, llelvó los aretes de su madre de Siman Tu y repitió el collar de Marianna Lemos y el brazalete de Hermes.

Dejándose ver en una faceta más formal, en su llegada a Aruba, se vio a Amalia llevando un elegante traje de lino de Max Mara, compuesto por el saco Allor y el pantalón Sultano a rayas, que ya le habíamos visto antes. En esta ocasión lo combinó nuevamente con sus alpargatas Tasha y como accesorios llevó sus lentes de Chimi y su collar Marianna Lemos, que parece haber sido el oficial del viaje.

Continuando en una nota más casual, Amalia llevó a una caminata al National Park Arikok, en Aruba, un relajado look compuesto por una sencilla blusa amarilla de Zara, con unos jeans blancos de la misma firma española. En esta ocasión los tenis fueron de Autry en su modelo Medalist, mientras que los lentes oscuros eran estilo PR 67XS de Prada de $8,999 pesos mexicanos.

En una combinación muy similar, pero con un giro chic, durante su visita a los terrenos del mayor productor de aloe vera en el mundo, la Princesa lució una blusa verde con un pantalón en crudo. El toque especial lo dio el clutch Zellige Me de Sarah Beydoun de 375 dólares (aproximadamente $6,973 pesos mexicanos). Esta vez lució unas sandalias modelo Versilia 100 de Gianvito Rossi, repitió sus lentes oscuros de Prada y recurrió a unos coloridos aretes de Zara.

En la noche más amena de este viaje, en la que se vio a Máxima mostrando sus mejores pasos, la Princesa recurrió a un colorido atuendo. Amalia combinó unos pantalones blancos con un animado poncho de Missoni, que lució con las mismas sandalias de Gianvito Rossi y un bolso Le Bambino de Jacquemus.

A su llegada a Curazao, se vio a la Princesa en una versión más cómoda con un top floral modelo Vaige de Munthe, con un precio de 219 euros (algo así como $4,451), que llevó con unos pantalones negros. Haciendo prácticas decisiones con su maleta, volvió a lucir su misma joyería, lentes y tenis, pero agregó unos nuevos aretes modelo Dancing Yelly Fish de Barong Barong, que cuestan 69 euros (poco más de $1,400 pesos mexicanos).