La visita de dos días del rey Carlos y la reina Camilla por la ciudad de York se ha visto opacada, luego de que el monarca sufriera un intento de ataque por parte de un individuo. De acuerdo con los reportes, un hombre trató de arrojar unos huevos al Rey, mientras este y la reina consorte caminaban por Micklegate Bar, saludando a la multitud que ahí los esperaba. Mientras los huevos se dirigían en dirección al Rey, este parecía sereno y sin hacer mucho caso a lo que sucedía, continuó con su compromiso.
El tirador de los huevos arrojó un total de cuatro huevos, los cuales no atinaron en el blanco. Rebecca English, reportera del Daily Mail, informó que el manifestante gritó lo siguiente: “Este país se construyó sobre la sangre de esclavos”. Según Reuters, la policía se apresuró a arrastrar al individuo. “Un hombre de 23 años fue arrestado bajo sospecha de un delito de orden público luego de un incidente en Micklegate en York”, dijo la policía en un comunicado, de acuerdo con la agencia. “Actualmente permanece bajo custodia policial”.
De acuerdo con los testigos, el individuo estaba protestando por la historia de Reino Unido con la esclavitud. Sin embargo, la multitud alrededor rápidamente se volvió hacia el hombre y se les escuchó gritar: “Qué vergüenza”. HELLO! indica que, al mismo tiempo en que se llevó a cabo el arresto, la multitud empezó a lanzar vítores como “God save the King” (Dios salve al Rey)”. Finalmente, el sujeto fue retirado del lugar.
Afortunadamente, el incidente no pareció desconcertar a la pareja real y el Rey continuó con su caminata por Micklegate Bar, lugar donde tradicionalmente el monarca ingresa a la ciudad.
Carlos III inauguró una estatua en honor a su difunta madre, la reina Isabel II, en York el 9 de noviembre. “Mi esposa y yo estamos profundamente conmovidos por habernos pedido que desvelemos esta estatua de mi amada madre. Cuando esta estatua se planeó por primera vez hace cinco años, durante un reinado de duración y logros sin precedentes, se pensó como una celebración del Jubileo de Platino de la difunta Reina”, dijo el Rey harles en su discurso. “Ahora, como hemos presenciado, con gran tristeza, el final de ese reinado, se revela en su memoria, como un tributo a una vida de extraordinario servicio y devoción”.