Ante el lamentable fallecimiento de la Reina Isabel, sus cuatro hijos han cerrado filas, cumpliendo cabalmente con las tradiciones y protocolos alrededor de la sucesión. Rotos de dolor, han hecho frente a sus responsabilidades públicas y en medio de la melancolía, han salido a agradecer a su pueblo por las muestras de cariño que han recibido. Mientras Carlos III ha tenido la agenda más agitada ante su nueva posición, la Princesa Anne ha robado el corazón de los británicos, al cobrar un estoico papel como la guardia y compañera de su madre en este últimos significativo viaje. La única hija de la Reina Isabel ha sido la encargada de acompañar el féretro de su madre desde Balmoral hasta Londres con sus respectivas paradas en Edimburgo. En un despliegue poco visto en ella, se le ha visto completamente conmovida ante su pérdida y ha tenido los gestos más significativos, como aquella reverencia al féretro que captó todas las miradas. Se ha convertido también en la primera mujer en participar en la Vigilia de los Príncipes, desde que comenzara esta tradición con la muerte de su bisabuelo George V. Todo esto ha traído una gran atención a la Princesa que desde muy joven ha cumplido con una ardua labor en su posición.
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¿Por qué es la Princesa Real?
Anne es la segunda hija de la Reina Isabel, y desde 1987 es conocida como la Princesa Real -posición vitalicia, que no se ha modificado ante el fallecimiento de la Reina-. Este es un título que tradicionalmente se da a la hija mayor del monarca reinante y no es uno que pase de generación en generación (como es sabido, casi en su totalidad, los títulos pasan a través del padre). Nacida el 15 de agosto de 1950, Anne fue la única mujer entre los cuatro hijos de la Reina Isabel y el Duque de Edimburgo. Gracias a su personalidad franca y práctica, se convirtió rápidamente en la favorita de su padre, de quien fue desde muy niña especialmente cercana.
Desde que tenía 18 años, en 1969, comenzó a cumplir con compromisos públicos, los cuales solamente irían creciendo con los años, hasta convertirse en la royal más trabajadora, título que gana año con año por la cantidad de eventos en los que aparece representando a la corona año con año. A sus 72 años, su carrera simplemente parece ir en ascenso, pues apenas hace dos años tomaba el puesto que había dejado Harry como Capitán General de los Royal Marines, convirtiéndose en la primera mujer en llevar este distinguido nombramiento.
La Princesa Anne acompaña a la Reina Isabel II en su último viaje
Una princesa rebelde
En su juventud, Anne se ganó la reputación de ‘princesa rebelde’, no por nada fue capaz de enfrentarse frente a frente con el hombre que pretendía secuestrarla, esfuerzo gracias al que se pudo evitar un desafortunado evento. Madre de dos y abuela de cinco, siempre se ha dicho que Anne tiene la personalidad más parecida al Duque de Edimburgo, pero también ha sido cercana a su madre, con quien en los últimos años se veía siempre simpática durante sus eventos públicos.
Profundamente respetuosa del protocolo en el que literalmente nació, la Princesa ha protagonizado algunos momentos virales que dejan ver que todavía tiene aquella vena libre de su juventud. Pero es sabido que a lo largo de su vida ha preferido tomar un perfil más discreto, incluso pidiendo que sus hijos no llevaron títulos nobiliarios. A pesar de esto, cuenta con la agenda real más ocupada de toda la familia y ante la ausencia de su madre, bien podría convertirse en uno de los apoyos más grandes de Carlos III.
Ha sido especialmente significativo que la Princesa Real haya recibido el honor de acompañar el féretro de su madre en su último viaje, dando testimonio del amor y el respeto que siempre hubo entre ellas.