El Palacio está de fiesta con la celebración del cumpleaños 40 del Príncipe William. Solamente a unas semanas del Jubileo de Platino de la Reina Isabel y poco antes del festejo por los 9 años del Príncipe George, William se encuentra conmemorando sus primeras cuatro décadas de vida. Con tres hijos a cuestas y un sólido matrimonio, William es un hombre de familia que ha aprendido a balancear su vida pública con su papel como papá y esposo. Ante las requeridas ausencias de la Reina Isabel por cuestiones de movilidad, el Príncipe ha tomado la estafeta y como el segundo en la línea de sucesión, su posición es más protagónica que nunca antes. Pareciera que está tomando en sus propias manos la responsabilidad del futuro de la monarquía británica y lo que viene para las generaciones por venir, encabezadas por su propio hijo mayor. Con esto en mente, cualquiera pensaría que su cumpleaños ha sucedido con grandes celebraciones, pero nada más lejano de la realidad. Aunque se habla de que en algún momento tendrá una fiesta en conjunto con la Duquesa de Cambridge, quien en su momento no pudo festejar sus 40 años por la pandemia, el Príncipe ha optado por un día completamente inusual para este cumpleaños.
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Hace apenas unas semanas, el Príncipe sorprendía a los habitantes de Londres al encontrarlo en las calles vendiendo ejemplares de la publicación The Big Issue. Más de una persona reportó en redes sociales cómo el segundo en la línea de sucesión se encontraba en las calles con su chaleco y gorra -uniforme de los vendedores- convenciendo a más de uno de hacer la compra. ¿La razón? Este diario tiene como propósito dar una nueva oportunidad a las personas que viven en las calles, una causa muy cercana al corazón de William, quien en más de una ocasión acompañó a su madre a apoyar a personas en esta situación. Cómo olvidar que ya en su adolescencia, el Príncipe decidió pasar una noche en la calle para saber más de los retos que enfrentan las personas sin hogar.
Durante su trabajo como vendedor, William fue guiado por Dave Martin, una de las personas beneficiadas por este programa, con quien el Príncipe ha pasado su cumpleaños. Esta mañana, según reportan los tabloides británicos, se pudo ver al Príncipe visitan a Dave en el Tesco -tienda de autoservicio- en Hammersmith, Londres. El hombre se encontraba vendiendo, precisamente, el ejemplar en el que él y William aparecen en la portada, lo que hizo el gesto particularmente especial.
A pesar de la inusual forma en la que el Príncipe ha pasado su cumpleaños, la realidad es que hace sentido al recordar el ensayo que escribió para la revista en el que apunto a que quería que sus 40 años fueran un pretexto para hacer consciencia sobre esta causa. Y es que su interés por esta situación viene desde el recuerdo, gracias a la Princesa Diana. “Tenía 11 (años) cuando visité por primera vez un refugio para personas sin hogar con mi madre, quien en su estilo inigualable estaba determinada a crear consciencia sobre un problema ignorado e incomprendido”, explicaba en la revista.
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El agradecimiento de William
En medio de múltiples felicitaciones, por supuesto, encabezadas por la Familia Real británica con una serie de emotivos recuerdos a través de fotografías, el Príncipe William ha querido agradecer personalmente a todas las personas que se han tomado la molestia de dedicarle un mensaje en su día. “¡Gracias por todos los mensajes de feliz cumpleaños hoy!”, escribió el Príncipe junto a su inicial, el indicativo que los Duques utilizan cuando se trata de un mensaje propio y no de su equipo de comunicación.