La realeza inglesa está plagada de joyas históricas, y no nos referimos exactamente a los invaluables diamantes y coronas en su haber; sino a piezas de la moda que una a una han contado la historia de la Familia Real Inglesa a través de los años. Una de ellas es el vestido de novia que la fallecida princesa Diana utilizó el 29 de julio de 1981, cuando se casó con el heredero al Trono, el príncipe Carlos.
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Desde este jueves 3 de junio, la prenda forma parte de la exhibición Royal Style in the Making, en Kensington Palace. El icónico vestido vuelve a estar expuesto por primera vez en más de 25 años, una pieza única que marcó el inicio de una nueva era en la monarquía inglesa.
El príncipe William y el príncipe Harry otorgaron la autorización para sacar del clóset el vestido con el que su madre llegó a la Catedral de San Pablo, en Londres, para convertirse en la esposa del príncipe Carlos y una de las princesas más queridas en la historia.
El vestido estará a la vista del público exactamente el día que se cumplirían 40 años de aquella boda que simbolizaba una nueva era en la realeza británica. El enlace, además de ser de los más comentados, daba un aire de juventud a la Familia Real, además de ser una verdadera historia de cuento de hadas en la que la joven tímida conquistaba el corazón de un príncipe.
Este mismo año Diana cumpliría 60 años el 1 de julio.
No fue sino hasta el día de la boda que el mundo pudo ver el vestido de Lady Di. Diseñado por Elizabeth y David Emanuel, llamaba la atención por las grandes y abultadas mangas muy acordes a la década de los 80s.
El vestido contó con lentejuelas bordadas a mano y encaje de Carrickmacross que originalmente había pertenecido a la reina Mary, bisabuela del príncipe Carlos. Además, tiene 10 mil perlas en forma de corazón y moños que daban un toque extra. La cola de esta maravillosa pieza es de 25 pies.
En las vitrinas también se puede apreciar el traje rosado que la princesa Diana usó el mismo día de su boda y con el que se despidió de Londres como recién casada para partir desde la estación Waterloo a Broadlands, junto al príncipe Carlos hacia su luna de miel.
Si bien es un gran atractivo, el vestido de novia de Lady Di no es lo único que llama la atención en esta exhibición. La sede es en el renovado invernadero de Kensington Palace, en donde la exhibición temporal también cuenta con piezas de la moda real.
“La exhibición también presenta artículos nunca antes vistos de los archivos de algunos de los modistos reales más famosos del siglo XX”, explica Historic Royal Palaces en su sitio oficial.
“Habrá algunas sorpresas para los fanáticos de la moda”, agregan los organizadores de esta exhibición en la que se podrán apreciar diseños creados para tres generaciones de mujeres de la Familia Real.
Entre ellos se aprecia el vestido que la Reina Madre utilizó para su coronación y la de su esposo, el rey Jorge VI, en 1937. Ambos fueron padres de la Monarca actual, la reina Isabel.
La exposición está creada en asociación con Garrard y generosamente apoyada por la Fundación Familia Blavatnik. Estará abierta al público hasta el 2 de enero de 2022 y sólo se podrá acceder con boletos en preventa.