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Este 9 de abril, el príncipe Felipe falleció a los 99 años y fue el pilar de la monarquía británica. Su longevo matrimonio con la reina Isabel II brindó una gran estabilidad en Windsor por más de siete décadas. En su rol como duque de Edimburgo, se convirtió en el consorte real con más años de servicio en la historia, y la soberana británica lo declaró públicamente como su “fuerza y permanencia”. Felipe se caracterizó por seguir su papel en la corona sin una guía específica para realizar sus funciones y definió su trabajo por medio de su propia experiencia.
© GettyImagesAl ser presentado ante la Casa Real lo hizo bajo el nombre de príncipe Felipe de Grecia. Nació en la isla de Corfú, el 10 de junio de 1921, como el hijo menor y único varón del príncipe Andrés de Grecia, que fue el séptimo hijo del rey Jorge I del país. Su madre fue la princesa Alicia de Battenberg.
Su infancia
Felipe y sus cuatro hermanas tuvieron que enfrentar una complicada infancia llena de traumas y dramas producto del exilio de su familia de Grecia en 1922. Su madre, Alice, nació sorda, tenía una frágil salud mental y tuvo que ser recluida en un hospital psiquiátrico cuando él tenía tan solo ocho años.
Aunado a esto, tuvo que lidiar con la ausencia constante de su padre, lo cual le dio una especie de orfandad familiar a tan temprana edad.
A pesar de esta situación en su entorno íntimo, Felipe pudo superar esas carencias y emergió como un personaje fuerte, ambicioso y determinado a salir adelante. Su buena apariencia, combinada con su condición de joven y apuesto oficial naval, hizo que los corazones de las damas se agitaran. Fue la joven princesa Isabel de Gran Bretaña, quien le brindó el amor y el ambiente familiar próspero que tanto necesitaba.
© GettyImagesTiempos de guerra
Felipe e Isabel mantuvieron contacto por medio de cartas amorosas que se enviaban durante la participación del duque de Edimburgo en la Segunda Guerra Mundial en la marina británica. A los 21 años, se había convertido en uno de los primeros tenientes más jóvenes de la Royal Navy y era el segundo al mando de la poderosa flotilla HMS Wallace.
A su regreso, cuando Elizabeth tenía 19 años, comenzaron a cortejar oficialmente. Aunque había demostrado su valía durante el conflicto, el héroe de guerra sin hogar ni fortuna era una elección poco probable de compañero real para la futura reina.
© GettyImagesSu matrimonio con Isabel
En abril de 1947, el rey Jorge VI dio su bendición para una boda real. Después de las nupcias, Felipe se convirtió en Su Alteza Real, el Duque de Edimburgo.
Ya había renunciado a su ciudadanía griega y adoptó el nombre de Mountbatten, que fue tomado de sus abuelos maternos, quienes aunque eran miembros de la familia real alemana, habían adoptado la nacionalidad británica y tradujeron su apellido Battenberg literalmente al inglés.
Una de las razones por las que su amor superó la prueba del tiempo fue su capacidad para reír juntos, ya que Felipe podía provocar una alegría genuina en la reina. Ambos permanecieron más de 70 años casados.
© GettyImagesSu vida pública
Además de su familia, las pasiones del duque lo llevaron en tres direcciones principales: el medio ambiente, las actividades ecuestres y el bienestar de los jóvenes. Quizás su mayor legado es el Programa de Premios del Duque de Edimburgo, que lanzó en 1956 para brindar a los jóvenes una oportunidad de descubrimiento personal y profesional.
También prestó su apoyo al Fondo Mundial para la Naturaleza y en su papel de presidente de 1961 a 1982 realizó una gira por el mundo para promover su causa.
© GettyImagesEl príncipe Felipe se había retirado de la vida pública en el año 2017 a la edad de 96 años, aunque continuó asistiendo a eventos públicos ocasionales. Dio un paso atrás después de realizar 22,191 compromisos en solitario y dar 5,493 discursos.
Su último compromiso oficial fue en julio del año pasado, cuando entregó su papel de coronel en jefe de The Rifles a Camilla, la duquesa de Cornualles, en una ceremonia en Windsor.
El esposo de la reina iba a cumplir 100 años de edad el próximo 10 de junio.
