Todas sabemos que los miembros de la realeza deben cumplir ciertas reglas, que se han asentado y se llevan a cabo habitualmente. Y aunque a primera vista nos puedan parecer iguales, entre las casas reales europeas hay diferencias fundamentales en el protocolo. No solo se trata de su vestimenta o las piezas que pueden usas las mujeres solo si están
6 protocolos de las casas reales que difieren entre sí
Todas sabemos que los miembros de la realeza deben cumplir ciertas reglas, que se han asentado y se llevan a cabo habitualmente. Y aunque a primera vista nos puedan parecer iguales, entre las casas reales europeas hay diferencias fundamentales en el protocolo.
No solo se trata de su vestimenta o las piezas que pueden usas las mujeres solo si están casadas, las precauciones que son tomadas para sus viajes oficiales, los temas de conversación aprobados en sus reuniones o los juegos en los que los niños pueden participar. Para que no te quedes con la curiosidad, te contamos algunas de esas normas que rigen su comportamiento en su día a día y en circunstancias excepcionales y que les distinguen entre sus pares.
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La realeza danesa anuncia los nombres de los nuevos miembros en la ceremonia de bautizo
La realeza de Dinamarca intercala los nombres de los recién nacidos varones entre Christian y Federico desde 1513, aunque en alguna ocasión se haya saltado la tradición. Alrededor del recibimiento de un nuevo integrante también hay otra tradición: anuncian el nombre durante el bautizo. Sucedió, por ejemplo, en 2012 con Athena Marguerite Françoise Marie, hija del príncipe Joachim de Dinamarca y la princesa Marie de Dinamarca, y antes, en 2005, cuando transcurrieron meses antes de conocer el nombre del primogénito del príncipe Federico X y su esposa, Mary Donaldson, el príncipe Christian.
La realeza griega conserva el estatus de Su Alteza Real
Aunque la monarquía fue abolida en 1974 para dar paso a la República, los miembros de la realeza griega conservan el estatus de Su Alteza Real. De hecho, el protocolo considera que cualquiera que se case con la familia recibirá el título real.
Las mujeres de la realeza japonesa pierden estatus al casarse con plebeyos
La princesa Mako, hija del príncipe Akishimo y nieta del emperador Akihito, perderá su estatus real al casarse con Kei Komuro, un plebeyo con el que se comprometió en 2017, de acuerdo a lo que dicta la Ley de la Casa Imperial. “Dada esa situación, he tratado de ayudar al emperador y hacer todo lo posible para cumplir mi papel como miembro de la familia imperial, al mismo tiempo que he puesto en valor mi propia vida”, dijo en una conferencia de prensa.
A la realeza británica solo se les saluda si ellos extienden la mano
Ni besos, ni abrazos. No está bien visto el contacto físico con la familia real británica a menos que ellos extiendan la mano y debe ser muy breve. Las reverencias hacia la Reina Isabel también son parte de las normas de la corona inglesa, incluídos los miembros de su familia, desde su esposo, el príncipe Felipe a los infantes a partir de los cinco años, como ya lo ha hecho el príncipe George.
Solo los hijos del heredero del Rey de Suecia tendrán el estatus de Su Alteza Real
En octubre de 2019 se anunció que todos los nietos del rey Carl XVI Gustaf y la reina Silvia de Suecia, con la excepción de los hijos de su hija mayor, perderán sus títulos oficiales, aunque seguirán siendo miembros de la familia real. Según la declaración del palacio el cambio en el protocolo sirve para “establecer qué miembros de la familia real pueden desempeñar deberes oficiales del Jefe de Estado o relacionados con la función del Jefe de Estado”.
En los Países Bajos no hay una coronación
El rey Willem-Alexander de los Países Bajos se convirtió en monarca en el momento en que su madre firmó sus documentos de abdicación, pero no hubo, en sí, una coronación —que suele tener un tratamiento más religioso—, sino, más bien, una investidura por su naturaleza secular. Por esa razón, en la ceremonia de inauguración formal solo se exhibieron en una mesa la corona, el orbe y el cetro.
Numerosas tradiciones de las casas reales han permanecido en el tiempo –incluso durante siglos–, aunque algunas de ellas se han ido actualizando –especialmente de décadas recientes– conforme evoluciona la sociedad para adaptarse a los nuevos tiempos.