A lo largo de los años ha sido muy cuidadosa para no prestarse a ninguna comparación con la Princesa Diana, tanto que la Duquesa de Cornwall ha preferido no usar de forma pública el título que le corresponde de Princesa de Gales. Pero hay un detalle que las mujeres que tantos problemas tuvieron siguen compartiendo, una pieza de joyería. El que fuera uno de los collares de la Princesa Diana se ha convertido en un broche constantemente utilizado por Camila. Sorprendentemente, la joya tiene su propia historia más allá de los diamantes y esmeraldas.
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La pieza es conocida como el broche Prince of Wales Feathers, por las tres plumas en diamantes que lleva al centro, que son símbolo del heredero al trono. La joya fue un regalo de bodas para la Princesa Alexandra de las damas de Bristol, en su boda con el entonces Príncipe de Gales –más tarde, Rey Edward VII- en marzo de 1863. Se trata de un óvalo de 18 diamantes con diminutas esmeraldas intermedias, rodeando las tres plumas del Príncipe de Gales en diamante, con el lema del heredero al trono “Ich Dien” que es alemán para “Yo sirvo”. Como toque final, se puede agregar una esmeralda en forma de gota suspendida del fondo, pieza que se añadió al set en los últimos años.
Con la muerte de la Reina Alexandra en 1925, el broche fue heredado por su nuera, la Reina Mary, quien se lo dio a la Reina Madre. Fue ella quien se lo dio a la Princesa Diana tras su compromiso con el Príncipe Carlos en 1981, siguiendo la tradición que hace de ésta una joya de la princesa consorte. Desde que lo recibió, éste se convirtió en una de las joyas favoritas de Diana, volviéndose una infaltable de sus primeros años de matrimonio. Aunque en un principio la usó a modo de collar y sin la esmeralda colgante, esta última pieza –que fue un regalo del Príncipe Heredero de Arabia Saudita en la boda de Diana y Carlos- comenzó a aparecer de vez en vez.
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Como sucede en todos estos casos, ante el divorcio de Diana y Carlos, las joyas de la corona regresaron a la Reina Isabel –según la tradición, éstas pertenecen al monarca-. Sin una Princesa de Gales vigente, la joya estuvo guardada por muchos años, hasta el 2006, cuando después de su boda con el Príncipe Carlos, la Duquesa de Cornwall comenzó a usarlo, pero nunca como collar, sino como broche. Casi siempre cuando lleva verde, se puede ver a Camila luciendo esta joya y por supuesto, siempre se comenta la relación con Diana. Eso sí no hay que olvidar, que en algunos años, será la Duquesa de Cambridge quien luzca al máximo la famosa pieza, así como en un futuro lejano, la esposa del Príncipe George lo hará, para seguir esta tradición.