Kate Middleton acompañó al príncipe William al 13º día de Wimbledon, para ver la final masculina en el Centre Court. En el mismo lugar se encontraban Pippa Middleton con su madre, Carole, y su hermano James. Los Duques de Cambridge ocuparon el palco real, mientras la familia de la Duquesa se sentó en los asientos normales entre la multitud.
Kate y William, emocionados en la final en la que Federer consiguió su octavo Grand Slam. Foto: Getty Images
Para esta ocasión, Kate se dejó ver perfecta para el verano: llevó un vestido blanco con estampado floral, llevó un clutch a juego de la colección de Victoria Beckham y completó su outfit veraniego con unas gafas de sol de Bvlgari. La pareja real compartió asientos con celebridades como los actores Bradley Cooper y Eddie Redmayne.
Kate lució increíble con un vesitdo muy 'ad hoc' para el verano. Foto: Getty Images
Los Duques de Cambridge, los Middleton y miles de espectadores más fueron testigos del triunfo del suizo Roger Federer tras vencer al croata Marin Cilic en la final. El vencedor de 36 años es un gran amigos de los Middleton, tanto que fue parte de los invitados en la boda de Pippa y James Matthews, en mayo pasado.
Carole, Pippa y James Middleton, entre la multitud viendo una de las finales más emocionantes del Wimbledon. Foto: Getty Images
Aunque Kate preside el patronato de Wimbledon, esta es su segunda vez en lo que va del año que presencia un acto deportivo de este tipo. En tanto, su familia ha estado más pendiente de esta disciplina y según el Daily Mail, Carole ha estado presente en al menos cinco ocasiones.
Se sabe que Kate es una gran aficionada a los deportes y es tanta su admiración por el tenis, que según reporta el tabloide inglés le dolió perderse la final de Andrew Murray en 2013. Justo en ese entonces, la Duquesa estaba embarazada del príncipe George y pidió permiso a su médico de ir al partido, pero éste definitivamente le dijo que no. Kate dio a luz al príncipe George el 22 de julio; dos semanas después del encuentro de Murray con Novak Djokovic. Estaba tan apenada por haberse perdido el triunfo de Murray, que le escribió una nota de disculpa por su ausencia.